Uno de los rumores más extendidos es que en muchos edificios colapsados de la capital se trabaja ya en la limpieza de escombros pese a los indicios de que todavía hay gente sepultada.
Por Martí Quintana
México, 25 septiembre (EFE).- Una larga lista de falsos rumores e informaciones sin contrastar sobre el trágico terremoto del 19 de septiembre en México, que suma ya 319 muertos, se han propagado en redes sociales generando una enorme confusión e incluso pánico.
Megaterremotos, labores de demolición con supervivientes sin rescatar o la existencia de emigrantes ilegales sepultados son algunos de los rumores que circulan por las redes sociales que acrecientan el nerviosismo e incluso la histeria.
"Encontrar sobrevivientes entre los escombros es la prioridad número uno", aseguró el domingo el alcalde de la Ciudad de México, Miguel Ángel Mancera, en un intento de atajar las desinformaciones sobre supuestas decisiones de las autoridades de concluir las operaciones de rescate.
Uno de los rumores más extendidos es que en muchos edificios colapsados de la capital se trabaja ya en la limpieza de escombros pese a los indicios de que todavía hay gente sepultada.
"Intentan meter maquinaria pesada en los escombros como si quisieran borrar evidencias sin importarles que aún hay esperanza", se lee en un mensaje de Facebook, sin firmar, compartido miles de veces.
La magnitud de los rumores es tal que el coordinador de Protección Civil, Luis Felipe Puente, defendió la actuación gubernamental. "Es falso que se estén demoliendo estructuras donde puede haber sobrevivientes o personas desaparecidas", dijo categóricamente.
Continúan las labores de búsqueda por parte de expertos nacionales y extranjeros en los edificios derruidos, aunque las posibilidades de hallar gente con vida menguan cada hora que pasa.
En este contexto, de muy poco ayudan informaciones como que en uno de los inmuebles colapsados, donde se espera sacar al español sepultado Jorge Gómez Varo, el mismísimo presidente Enrique Peña Nieto había ordenado parar las labores.
El capitán del equipo rescatista español, Juan Carlos Peñas, desmintió a Efe esta versión que generaba gran inquietud entre los españoles residentes en México.
La fábrica textil de Chimalpopoca, en la popular colonia Obrera, también ha generado un enorme revuelo.
Hace un par de días se suspendieron las labores de búsqueda y se retiraron los escombros. No obstante, surgió una información sobre que en el sótano trabajaban mujeres, aparentemente emigrantes ilegales de Centroamérica.
"Vivas o muertas nuestras 'cuerpas' no son basura ni escombro", clamó una "brigada feminista" en redes sociales, en uno de los casos que más controversia ha generado y que retomaron medios nacionales.
Según constató Efe, este domingo un grupo de mujeres levantó en este lugar un "memorial" para las obreras que "hasta ahora no han sido encontradas ni nombradas",a pesar de que no hay ninguna prueba que respalde la existencia de esa trabajadoras en la empresa textil.
Ni Protección Civil, ni el Ejército ni la Marina -la institución oficial mejor valorada del país- se salvan de las críticas.
A los miembros de las Fuerzas Armadas se les acusa, por ejemplo, de ir armados en las zonas de derrumbe y de entorpecer las labores de los centenares de voluntarios.
Una imagen negativa que se acentuó tras descubrirse la inexistencia de una niña llamada "Frida", supuestamente sepultada en el colegio Enrique Rébsamen de la capital -símbolo de la tragedia con 19 menores y 6 adultos muertos- en unas labores de rescate que coordinó directamente la Marina.
El listado de bulos y noticias falsas, 'fake news', se han ensañado también contra los políticos. Por ejemplo, se dijo que el oficialista Partido Revolucionario Institucional (PRI) se apoderó de víveres para repartir a los damnificados. Pero las imágenes que supuestamente delataban al PRI eran de 2012.
También se acusó al gobernador del estado de Morelos, Graco Ramírez, de desviar ayudas para los damnificados. La noticia corrió como la pólvora en redes sociales e incluso ocupó portadas.
La administración estatal lo negó todo, y la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales (Fepade) está investigando el caso.
Los rumores no solo buscan dinamitar la credibilidad del Estado, ya de por sí maltrecha.
También afecta a los voluntarios. Recientemente, se advertía por Whatsapp que hay falsos brigadistas que aprovechan la solidaridad de quienes los acogen en casa para robar.
Ni el Gobierno capitalino ni los medios de comunicación han reportado un solo caso, aunque sí ha habido ladrones hurtando víveres o incluso asaltando a dos voluntarias.
A esta retahíla de informaciones dudosas, o literalmente noticias falsas, se le suman teorías apocalípticas como la de un inminente megaterremoto que provocaría una destrucción masiva.
Mucha gente utiliza las redes sociales para compartir este tipo de bulos, pese a que el Servicio Sismológico Nacional (SMN) no se cansa en repetir un hecho científico incontestable: "Los sismos no se pueden predecir".