De acuerdo con la información vertida por el diario, las empleadas que aparecen en el video han sido despedidas y la dirección de la residencia para personas de la tercera edad ha abierto un expediente disciplinario.
Ciudad de México, 25 de agosto (SinEmbargo).--- Un video difundido en redes sociales muestra el momento en que una exempleada agrede verbalmente a una mujer de la tercera edad mientras otra graba en la residencia para personas de la tercera edad en Mossèn Homs de Terrassa, España, de acuerdo a una nota publicada por ElDiario.es.
De acuerdo con la información vertida por el medio, las empleadas que aparecen en el video han sido despedidas y la dirección de la residencia para personas de la tercera edad ha abierto un expediente disciplinario.
Los departamentos de Salud y Trabajo, Asuntos Sociales y Familias de la Generalitat, titular del centro, han denunciado el hecho ante los Mossos y dieron a conocer que interpondrán una denuncia judicial.
"Actuaremos ante cualquier caso de trato vejatorio a una persona residente en un centro de atención a la gente mayor", aseguraron.
Mireu i feu-lo rular, si us plau. No cal comentaris. Només escoltar lo que li diu a la iaia que està al llit. Quin fàstic, senyor.
A un geriàtric de Terrassa. De @Bcnlegendz pic.twitter.com/w9mTmrxrIX— naxoxan (@naxoxan) August 24, 2020
En las imágenes dadas a conocer se puede ver que la empleada que grabó el suceso está riéndose mientras su compañera trata de darle de comer a una mujer de la tercera edad que se encuentra acostada.
"Gorda, venga. Eliza, que coma (...) abre la puta boca ya (...) vieja cascarrabias", dice la mujer tratando de darle un bocado a la mujer. Al darse cuenta que es grabada señala que "ella no es así", pero que la paciente "la saca de quicio".
Posteriormente se vuelve contra ella y sube el tono de voz: "¡Eliza, la pastilla! ¿Qué no entiendes que te la tienes que tomar? ¿Sabes qué? Si no te la quieres tomar, no te la tomes y ya, si te duelen los pies o la cabeza, te vas joder; hombre ya, la puta pastilla".
Jordi Ballart, Alcalde de Terrassa, lamentó el suceso y dijo que la situación es un reflejo de la incompatibilidad de las empleadas para el servicio público y el respeto a los derechos humanos más básicos, según publicó ElDiario.es.
