La Comisión recordó que el pasado 22 de julio, quien fuera presidente de México de 2000 a 2006, publicó en su cuenta de Twitter un mensaje de odio con contenido explícitamente xenofóbico, antisemita y de evidente intolerancia religiosa y étnica, contra los ahora precandidatos de Morena.
Ciudad de México, 25 de julio (SinEmbargo).– La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) reprobó los mensajes de odio y discriminación que hace unos días emitió el expresidente mexicano Vicente Fox Quesada contra los precandidatos presidenciales de Morena, los cuales consideró que no abonan al debate político, violentan a minorias y tampoco forman parte de la libertad de expresión del exmandatario.
Por medio de un comunicado de prensa, la Comisión dijo que, pese al marco del debate y la competencia política que tienen lugar en el país, hay que “colocar la dignidad humana en el centro de la presente coyuntura”.
“Se advierte que repercuten en una disposición generalizada hacia la descalificación, usando la xenofobia y, por otra parte, la discriminación en contra de las personas beneficiarias de programas sociales, en detrimento de sus derechos humanos”, comentó la institución.
“De ninguna manera puede considerarse que el mensaje del expresidente forme parte de su ejercicio del derecho a la libertad de expresión. El Artículo 19 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos es categórico al advertir que los discursos de odio, que promuevan la discriminación y la xenofobia, son inadmisibles en un orden social justo y democrático. El derecho a la libertad de expresión no es un derecho absoluto, como lo es, en cambio, el derecho de toda persona a la no discriminación. Por ello, incluso bajo situaciones de extrema gravedad, la no discriminación es un derecho insuspendible”
Reprobamos los mensajes de odio y #Discriminación vertidos en el marco del debate y la competencia política que tienen lugar en el país, y hacemos un llamado a colocar la dignidad humana en el centro de la presente coyuntura.#DefendemosAlPueblo pic.twitter.com/Uh9kzmmvyX
— CNDH en México (@CNDH) July 25, 2023
La CNDH comentó que con los comentarios del exmandatario se pone de manifiesto que el respeto de los derechos humanos y la dignidad lamentablemente “no forman parte de la agenda ni del discurso de diversos actores políticos en la actual coyuntura”, lo cual constituye un serio riesgo para el ejercicio del debate y de la democracia misma.
La Comisión recordó que el pasado 22 de julio, quien fuera presidente de México de 2000 a 2006, publicó en su cuenta de Twitter un mensaje de odio con contenido explícitamente xenofóbico, antisemita y de evidente intolerancia religiosa y étnica, contra los ahora precandidatos de Morena.
De acuerdo con las autoridades, su mensaje denuesta, con adjetivos descalificativos, xenófobos y de odio, a sus eventuales contrincantes: menciona a Claudia Sheinbaum como “judía búlgara”, a Marcelo Ebrard como “francés”, y de Gerardo Fernández Noroña y Adán Augusto López se expresó incluso negando su humanidad, refiriéndose a uno como “extraterrestre” y a otro como supuestamente proveniente de Transilvania (teniendo en cuenta la doble connotación del término, por una parte, el origen de un ser tradicionalmente identificado con lo maligno, y por otra, una vez más, su nacionalidad), respectivamente.
En ese sentido, la Comisión recordó que México ha presentado una contradicción histórica en términos del despliegue de sus capacidades de hospitalidad, al recibir diferentes olas migratorias y brindarles estabilidad social, en contraste con fuertes tendencias hostiles hacia comunidades marginadas, especialmente centroamericanas.
“Aun así, México es también un país de tradición migrante. Este dilema se suma a la ola xenófoba que se comparte entre países del norte global, generalmente administrados bajo políticas neoliberales y de extrema derecha, y al reto actual que representan las nuevas migraciones”.
“En el debate y la contienda política, es responsabilidad de toda figura pública, sea autoridad de Gobierno, exgobernante o dirigente, sobre todo en declaraciones difundidas en redes sociales y medios de prensa, ser en extremo cuidadoso de sus expresiones, discernir entre la manifestación de diferencias y la denuncia, incluso, de situaciones necesarias de conocer por la opinión pública, y la mera descalificación, sobre todo aquellas expresiones peyorativas que denigran las características físicas, la condición de género, la nacionalidad, en suma la dignidad, y vulneran los derechos, porque tendrán un efecto contradictorio, pudiendo fisurar incluso las prácticas democráticas”, recalcó.
Pido una disculpa por haber retwiteado un Twit que no es mío
Tengo un profundo respeto por la comunidad judía .— Vicente Fox Quesada (@VicenteFoxQue) July 21, 2023
La Comisión consideró que el mensaje de Fox no abona a un debate político democrático ni basado en los principios constitucionales de igualdad y no discriminación. También pidió que las redes sociales se traten de forma ética y no se mercantilice el debate político ni las personas participantes en campañas, “pues en la mercadotecnia actual hay una tendencia a cumplir un rol como productos, donde la política se envuelve con frecuencia de retórica y se ha vuelto espectáculo, pero con frecuencia para lo único que sirve es para desviar la atención de lo verdaderamente importante”.
Finalmente, la CNDH insisitió en que el mensaje del expresidente es violatorio de derechos humanos y nugatorio de la dignidad humana, tanto de las personas a las que señaló con su mensaje de odio, como de las personas pertenecientes a los colectivos aludidos, como la comunidad judía, las comunidades francesa y búlgara.
“Cualquier persona en la arena política debería abonar a ese debate con argumentos, incluso mediante la exposición de la corrupción, no apelando a frivolidades y ocurrencias que repercuten en detrimento de los derechos, las libertades y la dignidad humana”.
La CNDH hace un respetuoso exhorto y una invitación a la clase política y a la sociedad en su conjunto, para que en el marco de los procesos político – electorales que se avecinan y toman forma en nuestro país, se apueste en todo momento por un debate de altura ética, de propuestas y de denuncia sin más restricciones que las que eviten la discriminación, el odio, la xenofobia, el antisemitismo u otras manifestaciones reprobables, que en definitiva no tienen cabida en una democracia como la que estamos construyendo.