No son buenas las noticias que circulan en estos días sobre México. Donald Trump, un individuo que odia a los latinos y en particular a los mexicanos, parece afianzarse en las encuestas. Noviembre, cuando se decide la elección presidencial, está a la vuelta. Los especialistas en economía y finanzas han empezado a calcular qué significará para México si él triunfa sobre Hillary Clinton. Y sus cálculos son para dar escalofríos...
Ciudad de México, 25 de julio (SinEmbargo).– Analistas, periodistas, bancos de inversión, casas de análisis y agentes de bolsa han empezado a calcular, con mayor seriedad, las pérdidas que tendrá México ante un inminente triunfo de Donald Trump.
Dos datos han acelerado estos cálculos: por un lado, que durante la semana pasada, en la convención republicana, Trump volvió a ratificar sus amenazas contra México. Por el otro lado, las últimas encuestas: el republicano aventaja a la aspirante demócrata Hillary Clinton por tres puntos en un sondeo de la cadena CNN, que da a Trump 48 por ciento de la intención de voto frente al 45 por ciento de Clinton. La otra encuesta publicada hoy, de CBS News, ya muestra a los dos candidatos empatados en un 42 por ciento.
La mayoría coincide en que se trata de un golpe de múltiples efectos y con varias paredes. Golpear el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) pegaría a Estados Unidos... pero para México sería devastador. Sobre todo para su moneda y para el crecimiento, que es lo que garantiza la generación de empleo y el bienestar.
Dimitra DeFotis, de Barron’s, dice en un artículo hoy: Si Trump abandona en TLCAN, ¿adiós peso y adiós exportaciones de gas?
“Si Donald Trump es elegido Presidente, y hace efectivas sus arengas contra el libre comercio, México tendría un gran golpe. En un nuevo informe sobre el impacto de la elección presidencial en Estados Unidos, Morgan Stanley señala que el 80 por ciento de todas las exportaciones mexicanas van a los Estados Unidos, y la manufactura de México representa una quinta parte del crecimiento del PIB desde la Gran Recesión. Morgan Stanley señala que se necesitarían por lo menos seis meses para que Estados Unidos pudiera retirarse del Tratado de libre Comercio, o TLCAN, aunque no está claro si la retirada unilateral de un Presidente resistiría un desafío legal, dado el papel del Senado en la ratificación de los tratados”.
Los analistas Nikolaj Lippmann, Lillian Starke y Luis Arcentales agregan:
“Mientras que [está claro que] la economía de México puede llegar a perder de manera desproporcionada, si Estados Unidos deja el TLCAN el impacto sería para ambos lados. La relación comercial entre México y Estados Unidos es de total integración e interdependencia en la cadena de suministro, con un 60 por ciento de las exportaciones de manufacturas clasificadas como bienes intermedios, lo que refleja un ecosistema industrial muy unido a través de fronteras”.
“Nos encontramos con un montón de pruebas en varias industrias de que las empresas estadounidenses tienen importante dependencia de los proveedores mexicanos. Y a pesar de la atención política sobre el déficit comercial de Estados Unidos con México, un nuevo eslabón importante está surgiendo entre los dos países: México podría convertirse en el único factor de aumento en la demanda de gas natural para Estados Unidos durante la próxima década”.
Los tres especialistas de Morgan Stanley dicen:
“También esperaríamos que el peso se vea bajo presión adicional. Sobre el tipo de cambio, Morgan Stanley’s FX Strategists ve tres canales principales a través del cual podría verse afectado el peso mexicano… y ninguno de ellos es positivo:
“1) En la balanza de pagos.
“2) Ablandamiento en las mediciones de crecimiento debido a la reducción relacionada a efectos colaterales de los vínculos comerciales (especialmente en la manufactura), y,
“3) La volatilidad de la moneda dentro de los mercados emergentes (currency’s high beta)”.
El peso mexicano, entonces, podría devaluarse, dicen los especialistas. “Y es probable que siga devaluándose si Estados Unidos dejara el TLCAN. En caso de que el Congreso estadounidense se vuelva más anti-comercio, el peso mexicano sería probablemente la moneda más afectada”.
LAS EXPORTACIONES BAJARÍAN
El 28 de junio, Donald Trump reiteró sus críticas contra el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), un acuerdo trilateral entre Estados Unidos, México y Canadá en vigor desde hace más de 20 años.
El magnate dijo que el TLCAN es “el peor acuerdo comercial en la historia” por lo que si México y Canadá no aceptan renegociar sus términos, invocará el Artículo 2205 del acuerdo para retirar a Estados Unidos del pacto.
Esa retirada, según expertos en política comercial, con seguridad provocaría la imposición de tarifas en las exportaciones estadounidenses y las importaciones de esos países, de acuerdo con el diario La Opinión, con sede en Los Ángeles.
Pero varias organizaciones empresariales, como la Cámara de Comercio de Estados Unidos (USCC) y la Asociación Nacional de Manufactureros (NAM), manifestaron su rechazo a las ideas de Trump, al advertir que disminuirían las exportaciones y causarían un alza de precios y la pérdida de al menos 3.5 millones de empleos.
Parte de la estrategia de Trump ha sido criticar la política comercial del entonces Presidente Bill Clinton, que incluyó promover la inclusión de China en 2001 en la Organización Mundial de Comercio (OMC), y que, según el empresario neoyorquino, fue una idea respaldada por Hillary Clinton, su rival demócrata.
China y México han sido un blanco fácil de los ataques de Trump, quien asegura que estos países se han beneficiado del comercio bilateral con EU, en detrimento de los trabajadores.
Las declaraciones de Trump van en contra de la corriente del sector empresarial en EU, que apoya el TLCAN y se ha beneficiado enormemente del comercio exterior con México y Canadá.
Según la USCC, desde 1994 el comercio de EU con México y Canadá aumentó por casi cuatro a 1.3 mil millones de dólares en 2014, gracias al TLCAN.
SUS OTRAS AMENAZAS
Anteriormente, el candidato del Partido Republicano ya ha amenazado que de llegar a la presidencia revertirá el Tratado de Libre Comercio para América Latina (TLCAN), impondrá un arancel a las exportaciones mexicanas hacia Estados Unidos y detendrá las remesas de los migrantes mexicanos.
De acuerdo con Banco Base, la economía de México se desplomaría 3.4 por ciento en 2017 si Donald Trump es el próximo Presidente de Estados Unidos.
"El mayor riesgo para México es que Donald Trump gane las elecciones", sentenció la directora de análisis económico de Banco Base, Gabriela Siller.
Banco Base estimó que un arancel de 35 por ciento –propuesto por el magnate– retrocedería en un 11.6 por ciento las exportaciones mexicanas no petroleras, lo que implicaría una caída de 2.9 por ciento.
Además, bloquear las remesas golpearía un 0.5 por ciento el PIB y el dólar podría llegar hasta los 25 pesos.
"Trump es un efecto de la crisis de 2008. Y ha llevado a aumentar las posiciones en contra del peso", dijo Siller.
CI Banco considera lo mismo.
En Estados Unidos, hasta hace pocos meses, la mayoría daba escasas posibilidades a que Donald Trump pudiera tener una exitosa
campaña para convertirse en el candidato del Partido Republicano a la presidencia de Estados Unidos. Finalmente, la semana pasada de manera oficial fue elegido como el candidato por su partido.
Donald Trump se ha caracterizado por anunciar un plan económico que dista de las prácticas consideradas como favorables para los
mercados financieros, expuso en su análisis semanal. No sólo eso, sino que también en sus propuestas de campaña se encuentran temas que irían en contra de las relaciones diplomáticas y económicas con México (como son sus posturas en contra de la inmigración ilegal y del TLCAN).
"Si la popularidad de Trump se mantiene fuerte, veríamos un incremento de la volatilidad en los mercados financieros en las próximas
semanas o meses, y en especial sobre el peso mexicano (ya que los inversionistas buscarán cubrirse ante la posibilidad de que
resulte ganador)", determinó el banco.