Ciudad de México, 25 de mayo (SinEmbargo/ElDiario.es) Son los niños mimados de Cannes, directores que han estrenado y triunfado en un festival que tiene debilidad por los provocadores y los iconoclastas.
Gaspar Noé: Love
Yorgos Lanthimos: The Lobster
Después de Canino ( Kynodontas, 2009), una revisión agridulce y estilizada de El castillo de la pureza, el joven Yorgos Lanthimos se ganó un lugar en el top 5 de las jóvenes promesas del cine independiente europeo. Su próxima aventura suena exactamente apropiada y, al mismo tiempo, loquísima: un futuro distópico en el que los solteros son capturados y encerrados en un hotel, donde tienen 45 días para buscarse pareja. Los que se niegan o no lo consiguen son transformados en un animal y liberados en el bosque. Con Lea Seydoux, Olivia Colman, Ben Whishaw, Colin Farrell y Rachel Weisz.
Justin Kurzel: Macbeth
Justin Kurzel rindió tributo a la obsesión nacional con los serial killers en la difícil -de hecho, horripilante- Snowtown, sobre una pequeña localidad situada a 140 kilometres de Adelaide (Australia) que se hizo famosa gracias a unos brutales asesinatos. Este año, Kurzel reincide con una adaptación de Macbeth, uno de esos dramas shakespearianos con un body count espectacular. “¿Por qué siempre solo, acompañándoos de tristes pensamientos y acosado por ideas que debieron morir con los que las engendraron? Debe darse al olvido lo que no tiene remedio. Lo hecho, hecho está”. El ambicioso matrimonio que riega de sangre su camino de la conquista está protagonizado por los atractivos Michael Fassbender y Marion Cotillard.
Diablo Cody: Ricki and the Flash
Técnicamente, Diablo Cody no es la directora sino la guionista de esta historia de una mujer que abandona a su familia para convertirse en estrella del rock y vuelve para pagarlo con sus rencorosos hijos. Y todo suena a melodrama de miércoles a medianoche si no fuera porque el director es Jonathan Demme y la descarriada punk-rocker, la divina Meryl Streep. Que lleva sufriendo como una madre desde La decisión de Sophie (1982).
Matteo Garrone: The Tale of Tales
Su adaptación de Gomorra, el libro de Roberto Saviano, le puso en el mapa pero Garrone ya había demostrado su talento para la crónica con L’Imbalsamatore, una fábula oscura basada en el caso real de un taxidermista homosexual que fue asesinado por su protegido, Armando Lovaglio, en 1990. The Tale of Tales, su primera gran superproducción, es un relato de fantasía con elementos de horror y está basado en el Pentamerón de Giambattista Basile, una colección de cuentos de hadas napolitanos del siglo XVII. Con Salma Hayek, Vincent Cassel y Toby Jones.