De Latinoamérica, El agente topo de la chilena Maite Alberdi, un conmovedor relato sobre un octogenario contratado como espía novato para investigar si la madre de una clienta es maltratada en el asilo, se mide por el premio al mejor documental. Y tres ingenieros mexicanos — Carlos Cortés, Jaime Baksht y Michelle Couttolenc — compiten por el premio al mejor sonido por su trabajo para Sound of Metal (El sonido del metal), una película sobre un baterista de heavy metal que está perdiendo la audición, cuya mezcla de sonido hicieron en el campo, en el estado mexicano de Morelos.
Por Jake Coyle
NUEVA YORK, 25 de abril (AP).- El agente topo de Chile, un trío de ingenieros de sonido mexicanos y la estrella de la música Laura Pausini competirán en unos Oscar como ningunos otros el domingo por la noche, cuando muchos podrían hacer historia en un espectáculo adaptado a los tiempos de pandemia.
La ceremonia de los Premios de la Academia, en su 93ra edición, se transmitirá a las 8 p.m. de Nueva York por la cadena ABC desde la estación de tren Union Station en Los Ángeles en lugar del usual Teatro Dolby. No habrá anfitrión ni púbico en vivo, los candidatos no tendrán que usar tapabocas (han guardado cuarentena y se han sometido a pruebas de COVID), y a diferencia de otras premiaciones como los Globos de Oro no habrá discursos vía Zoom; quienes no pudieron viajar se conectarán vía satélite desde distintos centros internacionales establecidos.
Habrá alfombra roja, pero sólo con un puñado de medios de comunicación en el lugar. Un espectáculo pregrabado con actuaciones de las cinco nominadas a mejor canción — incluidas Pausini y Diane Warren con “Io sì” de “La vida ante sí” — se transmitirá a las 6:30 pm, también por ABC. Los suscriptores también podrán ver la ceremonia por Hulu Live TV, YouTubeTV, AT&T TV, FuboTV y ABC.com.
Los productores de la gala, liderados por el cineasta Steven Soderbergh, prometen un espectáculo más parecido a una película, rodado en 24 fotogramas por segundo en lugar de los típicos 30 y con un “elenco” de presentadores que incluye a Brad Pitt, Halle Berry, Reese Witherspoon, Harrison Ford, Rita Moreno y Zendaya.
¿Bastará eso para evitar una anticipada caída abrupta en los ratings? Con la mayoría de los cines cerrados, los actuales nominados — filmes más pequeños y modestos transmitidos principalmente en servicios de streaming — no despertaron el mismo interés de megaproducciones pasadas. Y la transmisión del Oscar del año pasado, en la que triunfó Parasite (Parásitos), ya había registrado su menor índice de audiencia: 23,6 millones de espectadores en Estados Unidos, según la empresa Nielsen.
Netflix domina este año la lista de nominados con 36 candidaturas, incluyendo con Mank de David Fincher, un drama en blanco y negro sobre el guionista de Citizen Kane (El ciudadano Kane) Herman J. Mankiewicz. El servicio aún no ha ganado el Oscar a la mejor película, y podría lograrlo con The Trial of the Chicago 7 (El juicio de los 7 de Chicago) de Aaron Sorkin.
Pero la favorita al premio parece ser Nomadland de Chloé Zhao, un estudio de carácter contemplativo sobre una mujer itinerante (Frances McDormand) en el oeste estadounidense. Sería una de las películas de más bajo presupuesto en lograrlo: con un elenco de actores mayormente no profesionales, costó apenas 5 millones de dólares.
Zhao es también la favorita en la categoría de mejor dirección, que por primera vez incluye a dos cineastas mujeres. La otra es Emerald Fennell por el mordaz drama de venganza Promising Young Woman (Hermosa venganza). Zhao, de origen asiático, sería apenas la segunda mujer reconocida con el premio en casi un siglo de Oscars — después de Kathryn Bigelow por The Hurt Locker (Vivir al límite) en 2010 — y la primera mujer de color.
También podría hacerse historia en las categorías de actuación. Si los ganadores de los Premios de la Academia coinciden con los de los Premios SAG del Sindicato de Actores de la Pantalla, Chadwick Boseman ganaría como mejor actor y Viola Davis como mejor actriz, ambos por Ma Rainey’s Black Bottom’s (La madre del blues); Yuh-Jung Youn como mejor actriz de reparto por Minari y Daniel Kaluuya como mejor actor de reparto por Judas and the Black Messiah (Judas y el mesías negro). Sería la primera vez que todos los actores galardonados sean de color, un cambio importante tras los recientes años de críticas por unos #OscarTanBlancos (#OscarsSoWhite).
Boseman, cuya victoria parece segura, sería el tercer actor en recibir un Oscar póstumamente, luego de Peter Finch y Heath Ledger.
El premio a la mejor actriz es el que parece menos seguro. Davis, ganadora de un Oscar por Fences (Barreras) de 2016, enfrenta la mayor competencia de Carey Mulligan (Promising Young Woman) y McDormand, galardonada ya con dos Premios de la Academia.
Pausini, por primera vez nominada, y Warren, por 12ma, podrían hacer historia con el primer tema en italiano en recibir el Oscar a la mejor canción original, tras haber triunfado en los Globos de Oro.
De Latinoamérica, El agente topo de la chilena Maite Alberdi, un conmovedor relato sobre un octogenario contratado como espía novato para investigar si la madre de una clienta es maltratada en el asilo, se mide por el premio al mejor documental. Y tres ingenieros mexicanos — Carlos Cortés, Jaime Baksht y Michelle Couttolenc — compiten por el premio al mejor sonido por su trabajo para (El sonido del metal), una película sobre un baterista de heavy metal que está perdiendo la audición, cuya mezcla de sonido hicieron en el campo, en el estado mexicano de Morelos.
Aunque los estudios convencionales pospusieron sus grandes estrenos de 2020 debido a la pandemia, un par de películas prominentes todavía podrían ser premiadas el domingo. Soul de Pixar probablemente se lleve el galardón a la mejor cinta animada, y Tenet de Christopher Nolan el de mejores efectos visuales.
Una vez que pase la pandemia, Hollywood — y los Oscar — quizás no vuelvan a ser iguales. Como dijo el director ejecutivo de WarnerMedia Jason Kilar al anunciar los planes de pasar los estrenos del estudio al streaming, citando un famoso diálogo de The Wizard of Oz (El mago de Oz): “Ya no estamos en Kansas”.