Los mini hígados en 3D, el primer paso para la incorporación de órganos impresos a los trasplantes

25/04/2013 - 12:00 am
Foto: Friki.net
Foto: Friki.net

Ciudad de México, 25 de abril (SinEmbargo).- Aunque la humanidad aún está lejos de llegar a fabricar un órgano viable para un trasplante, los esfuerzos de algunos investigadores se orientan a las impresiones tridimensionales como una alternativa viable.

La compañía Organovo, de San Diego, conocida por su tecnología de impresión 3D NovoGen, logró crear réplicas completamente funcionales de un hígado humano. Sin embargo, aún existe un pequeño problema al respecto: estas impresiones son miniaturas.

No obstante, a pesar de ser sólo de un milímetro de profundidad y cuatro milímetros, estos hígados pueden realizar la mayoría de las funciones de un hígado real, lo que representa un gran avance para determinar con precisión los efectos de drogas y algunas enfermedades en este órgano, según publicó la revista New Scientist.

Para crear este tipo de hígados, la impresora prepara alrededor de 20 capas de hepatocitos y células perisinusoidales, pero también agrega células que pertenecen al revestimiento de los vasos sanguíneos.

Foto: Wikimedia Commons
Foto: Wikimedia Commons

Por su parte, el "material" original con el que se imprimen estos órganos presentados en la conferencia de Biología Experimental, en Boston, proviene de tejido que fue retirado en intervenciones quirúrgicas previas.

En la actualidad, las impresiones en 3D representan un importante avance y su potencial ha sido comprobado al momento de remplazar huesos e incluso rostros. Sin embargo, poder construir un órgano sería un salto gigante comparado con los logros ya obtenidos.

El avance que esto representa radica en que actualmente los análisis hepáticos sólo son capaces de durar pocos días, ya que se basan en pocas capas de células que ni siquiera son capaces de realizar muchas de las funciones de un hígado real.

Por su parte, Organovo ahora planea crear órganos de tamaño natural que puedan ser trasplantados. Sin embargo, antes tenían que resolver el problema de cómo imprimir las ramas de los vasos sanguíneos que fueran capaces de alimentar un órgano entero. No obstante, comprobar el perfecto funcionamiento de los hígados a escala fue la luz verde esperada para que dar el siguiente paso a un tamaño real.

en Sinembargo al Aire

Opinión

Opinión en video