La funcionaria de la ONU explicó que México no está en recesión pese a que durante cuatro trimestres (en 2019) el PIB nacional tuvo descensos. Además aseguró que “hay un dinamismo económico que se espera para este año, asociado por otra parte a los programas sociales”, así como al aumento salarial, aseguró.
Por Pedro Pablo Cortés
México, 25 de febebro (EFE).- Aunque en el resto de la región “hay un poco de desencanto”, en México “todavía hay esperanza” y por ello se han evitado protestas como las que Suramérica vive desde el año pasado, afirmó este martes la secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y El Caribe (Cepal), Alicia Bárcena.
En entrevista con Efe, la funcionaria de Naciones Unidas argumentó que en México la gente “tiene expectativa de movilidad social” con programas sociales enfocados a adultos mayores, pueblos indígenas y jóvenes, lo que ha prevenido un estallido similar al de países como Chile, Colombia y Ecuador.
“Esto que está pasando en México es lo que están pidiendo en los otros países, entonces aquí hay una respuesta con este nuevo Gobierno (de Andrés Manuel López Obrador), hay una expectativa de mayor movilidad social, de crecimiento, de una mejoría importante”, aseveró Bárcena.
Sin embargo, la titular de Cepal reconoció que la economía mexicana tuvo “un bajo crecimiento en 2019”, cuando el PIB se contrajo en -0.1 por ciento, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). Aun así, explicó que México no está en recesión porque “todavía” no ha habido una caída en la economía durante tres trimestres consecutivos.
MAYOR CERTIDUMBRE
El organismo internacional prevé un crecimiento de 1.3 por ciento de la economía mexicana para este año motivado por las exportaciones, las inversiones y el consumo.
“Hay un dinamismo económico que se espera para este año, asociado por otra parte a los programas sociales, que yo creo que son de gran importancia, el incremento del salario mínimo, que por lo menos ha aumentado en 36.5 por ciento desde que llegó (en diciembre de 2018) el Presidente (Andrés Manuel) López Obrador”, aseveró Bárcena.
Como señales de inversión, la funcionaria indicó que hay cerca de 60 proyectos anunciados por el Gobierno mexicano de los que 15 ya tienen presupuesto, como carreteras y obras en el sur, incluyendo el corredor del istmo de Tehuantepec, la zona más estrecha que une al Pacífico con el Atlántico.
También destacó la mayor certidumbre para la inversión extranjera ante la próxima firma del nuevo tratado comercial de México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
“Creo que el tema migratorio también ha tenido cierta estabilidad, aunque con costos muy altos, por cierto, sociales. Creo que el tema de Plan de Desarrollo de Centroamérica y México es una perspectiva importante de que la migración sea una opción y no una obligación”, comentó sobre la relación con Estados Unidos.
La secretaria ejecutiva de Cepal informó que hay “mucho avance” en este Plan de Desarrollo, impulsado por el organismo y secundado por México para atender las causas de la migración en Guatemala, Honduras y El Salvador, que tiene casi 110 propuestas concretas y la participación de 19 agencias de la ONU.
Entre los proyectos, resaltó eliminar barreras no arancelarias entre los países, atender los problemas en plantíos de café y maíz exacerbados por la crisis climática, y proyectos de infraestructura como el gasoducto que llegará de Texas al suoriental estado de Chiapas con posibilidad de extenderse a Centroamérica.
OTRA DÉCADA PERDIDA
América Latina ha tenido “un crecimiento muy mediocre” desde 2014, con apenas un crecimiento regional promedio del 0.5 por ciento en ese periodo y de 0.1 en 2019, comentó Bárcena.
Aunque para 2020 prevé un crecimiento regional de 1.3 por ciento, la funcionaria internacional expresó preocupación porque Latinoamérica podría experimentar otra “década perdida”, como se le conoce al periodo de estancamiento que padeció la región en los 80.
“Es un crecimiento absolutamente insuficiente para poder cubrir las necesidad sociales, de infraestructura, en fin, de una región como la nuestra. Entonces claro, nosotros decimos, nos acercamos a esa situación, si no somos capaces de que se dinamice el crecimiento”, manifestó.
La titular de Cepal precisó que 18 de las 20 economías latinoamericanas han experimentado una “ralentización”, con la excepción de Perú y Colombia, que han mantenido estables sus niveles de inversión.
Indicó que un factor del estancamiento es la incertidumbre que han experimentado los países que más pesan en el promedio regional, como Argentina, Brasil y México.