A través de una carta dirigida a Mónica Fernádez Balboa, presidenta del Senado de la República, argumentó que la CEAV se convirtió en un negocio en varios niveles y que “se pervirtió la vocación humanista con la que fue creada”.
Ciudad de México, 24 de junio (SinEmbargo).- Mara Gómez Pérez presentó su renuncia a la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV) y subrayó que “no se puede transformar una institución […] si no cuenta con el apoyo necesario, tanto económico como institucional”.
A través de una carta dirigida a Mónica Fernádez Balboa, presidenta del Senado de la República, argumentó que la CEAV se convirtió en un negocio en varios niveles y que “se pervirtió la vocación humanista con la que fue creada”.
“La obligación legal de garantizar, promover y proteger los derechos humanos de las víctimas de violencia fue reemplazada por una fórmula clientelar, centrada en el reparto de recursos económicos, usando el dinero para pagar la falta de verdad y justicia”, escribió en la misiva que también fue dirigida al Presidente Andrés Manuel López Obrador.
“Se convirtió en un negocio para algunos abogados particulares que, indiferentes al dolor, se acercaron a madres que buscan a sus hijos y a otras víctimas para litigar contra la CEAV y así obtener honorarios millonarios”, añadió.
La ahora extitular agregó que no es sorprendente que se haya querido convertir al organismo en un “botín de intereses políticos”.
También dijo que “nadie se ocupó de consolidar una institución” que resulta fundamental y que ello se refleja en el modo improvisado con la que surgió la CEAV.
Denunció que a pesar de que existe desde hace años no cuentan con instalaciones propias, más de la mitad de sus empleados están contratados de manera irregular y que “prácticamente todos los servicios básicos para su funcionamiento, son contratados a provedores particulares”.
“Esas deficiencias de origen permiten hacer negocio con la institución y son la fuente de su enorme vulnerabilidad institucional”, recalcó.
Aseguró que al priorizar la atención de víctimas y querer “corregir los errores y eliminar los privilegios”, encontró resistencia, fue amenazada y atacada por aquellos que “quieren seguir lucrando económica y políticamente con el dolor de las víctimas”.
Por último, agradeció al pleno del Senado por designarla como responsable de la Comisión en diciembre del 2019 y especificó que su renuncia se da para que se atienda a los “24.7 millones de personas que cada año son víctimas de delito y el acumulado de 61 mil personas desaparecidas reconocidas hasta ahora”.
“Las víctimas merecen recuperarse con dignidad de los horrores de la violencia y superar las condiciones de vulnerabilidad y marginación social. Para curar sus heridas resulta indispensable el trabajo coordinado de todo el Estado mexicano”, finalizó.
La renuncia de Gómez Pérez se da luego de que a principios de junio, el Presidente anunciara que habrá un recorte presupuestal para la CEAV. Sin embargo, expuso que éste no afectará a los familiares de las víctimas.
¿EL RECORTE AFECTA A LAS VÍCTIMAS?
Las víctimas de violencia, desaparición, desplazamiento y violaciones de derechos humanos exigieron claridad al Gobierno federal en cuanto al gasto operativo y el destino de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV), institución que gestiona los recursos o fondos que se otorgan y que acompaña a las víctimas.
La principal inquietud de víctimas y colectivos es porque cualquier reducción o cambio en el funcionamiento de la CEAV o incluso su posible desmantelamiento, les repercute a ellos pues son justo sus “usuarios”.
La CEAV es la institución facultada para operar el Fondo de Ayuda y Asistencia y Reparación Integral (FAARI) y el Registro Nacional de Víctimas (RENAVI), según se establece en la Ley General de Víctimas, misma que mandató la creación de este organismo con el “objeto garantizar, promover y proteger los derechos de las víctimas del delito y de violaciones a derechos humanos, en especial los derechos a la asistencia, a la protección, a la atención, a la verdad, a la justicia, a la reparación integral y a la debida diligencia”.
La información es tan confusa e incompleta que incluso a víctimas del estado de Sinaloa, les ha llegado la versión a que presuntamente la CEAV va a desaparecer y será la Secretaría de Gobernación, quien de ahora en adelante operará los recursos que se destinen a las víctimas.
-Con información de Romina Gándara.