La demostración de vuelo durará hasta un año, periodo durante el cual Maxar tendrá la propiedad y operación total de la nave. Tras una demostración exitosa, la NASA tendrá la opción de adquirir la nave espacial para usarla como el primer elemento de Gateway, con un lanzamiento en un cohete comercial a finales de 2022.
Madrid, 24 de mayo (EuropaPress).- La NASA ha dado luz verde al desarrollo del elemento de energía y propulsión del futuro puesto avanzado Gateway en órbita lunar, que servirá como enlace para el retorno de astronautas a la Luna.
"Será el componente clave sobre el que construiremos nuestro puesto de avanzada Gateway, la piedra angular de la arquitectura de exploración sostenible y reutilizable Artemisa de la NASA en y alrededor de la Luna", explicó en un comunicado Jim Bridenstine, administrador de la agencia espacial.
Encomendada a Maxar Technologies con un presupuesto de 375 millones de dólares, se trata de una nave de propulsión eléctrica solar de alta potencia de 50 kilovatios, tres veces más potente que las capacidades actuales. Como módulo de comando y servicio móvil, Gateway proporciona un relé de comunicaciones para las expediciones humanas y robóticas a la superficie lunar, comenzando en el Polo Sur de la Luna.
El diseño de la nave espacial se completará antes de doce meses, seguida de fases de desarrollo, lanzamiento y demostración en vuelo en el espacio. La demostración de vuelo durará hasta un año, periodo durante el cual Maxar tendrá la propiedad y operación total de la nave. Tras una demostración exitosa, la NASA tendrá la opción de adquirir la nave espacial para usarla como el primer elemento de Gateway, con un lanzamiento en un cohete comercial a finales de 2022.
"Estamos muy contentos en demostrar nuestra tecnología más nueva en el elemento de potencia y propulsión. La propulsión solar eléctrica es extremadamente eficiente, por lo que es perfecta para Gateway", dijo Mike Barrett, gerente de proyectos de energía y elementos de propulsión en el Centro de Investigación Glenn de la NASA. "Este sistema requiere mucho menos propelente que los sistemas químicos tradicionales, lo que permitirá a Gateway mover más masa alrededor de la Luna, como un sistema de aterrizaje humano y grandes módulos para vivir y trabajar en órbita".
Encargados de regresar a la Luna dentro de cinco años, los planes de exploración lunar de la NASA se basan en un enfoque de dos fases: el primero se enfoca en la velocidad, aterrizando en la Luna para 2024, mientras que el segundo establecerá una presencia humana sostenida en y alrededor del Luna para 2028. La NASA aprovechará la experiencia para enviar astronautas a Marte.