El 13 de septiembre de 2012 la Aduana Marítima de Valencia, España, interceptó dos contenedores con un cargamento de cocaína y metanfetaminas escondido entre un pedido de mármol destinado a la empresa de Gonzalo Contreras Rincón, un mexicano que lleva preso casi cuatro años. Su versión “inverosímil”, argumentaron los jueces, fue tomada como un indicio en su contra. Él, en una carta, expuso que los narcotraficantes de México hacen uso de personas inocentes para conseguir sus objetivos lucrativos. Actualmente se encuentra en espera de que una abogada revise el proceso y detecte anomalías que pudieran servir de base para cancelar su sentencia.
Ciudad de México, 24 de mayo (SinEmbargo).– Gonzalo Contreras Rincón, originario de Querétaro, lleva preso en España desde octubre de 2012 acusado de tráfico de drogas. El joven ha comparado su caso con el del ex Gobernador de Coahuila Humberto Moreira Valdez, a quien de acuerdo con el diario El País, el Gobierno de México ayudó a salir de prisión. El priista estuvo libre en menos de un mes. Él, por ya casi cuatro años, sigue viviendo entre barrotes ahora en espera de que la abogada asesora que le asignaron detecte violaciones en el proceso y pueda cancelar la sentencia de nueve años en su contra.
De acuerdo con su madre Iliana Rincón, “por cuestiones burocráticas” el trámite para que la abogada –asignada pos autoridades mexicanas– tuviera acceso a los documentos del expediente del Tribunal Sentenciador de Valencia sobre el caso de su hijo “se tardó mucho”.
Hace dos semanas, la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) le informó que la defensa ya tiene en su posesión toda la documentación. Ahora se encuentra revisando todo el proceso desde el momento de la detención para detectar si hubo violaciones, omisiones o errores que pudieran servir de base para solicitar formalmente una revisión del caso desde un inicio y cancelar la sentencia en su contra.
“Gonzalo se reunió con el cónsul en Madrid y ahí le prometieron que iba a tener una abogada asesora revisando el caso, lo cual ya sucedió. Pero por cuestiones burocráticas se tardó mucho el trámite en que la abogada finalmente tuviera acceso a los documentos del expediente. Hasta el momento está en trámite, pero no se han tenido noticias concretas respecto a si van a ver suficientes motivos como para que el Gobierno mexicano pueda solicitar una revisión del caso ante las autoridades españolas”, expresó la madre de Gonzalo a SinEmbargo.
Hasta el momento está en trámite, pero, informó Iliana, no se han tenido “noticias ni resultados concretos” respecto a si habrán suficientes motivos para que la Cancillería mexicana pueda solicitar una revisión del caso ante las autoridades españolas.
“Nos gustaría pensar que esto [la asignación de una abogada] va a resultar en algo positivo para que Gonzalo vuelva al país este año. Pero todo esto es un proceso tan largo y es tan burocrático que la verdad no queremos hacernos demasiadas esperanzas”, declaró en entrevista telefónica.
Hasta el jueves a las cinco de la tarde, hora de España, Gonzalo tiene un permiso temporal para reunirse hoy o mañana en el Consulado mexicano con el cónsul y los abogados asesores que puso la Cancillería para hablar sobre su caso.
El 2 de marzo pasado también tuvo un permiso de cuatro días para dialogar con autoridades mexicanas de la Embajada en España, quienes prometieron revisar su situación.
Al día siguiente, la Secretaria de Relaciones Exteriores (SRE), Claudia Ruiz Massieu Salinas, rechazó que haya un trato preferencial para alguno de los más de 24 mil mexicanos presos en el extranjero e informó que se activaron los protocolos de protección.
“Nuestra directora general de protección se ha reunido ya con la familia de Gonzalo para darle certidumbre de las acciones que estamos realizando y que podemos darle acompañamiento en su situación, y lo mismo hemos hecho en España a través del personal consular”, dijo.
LE ESCONDIERON LA DROGA EN MÁRMOL
El 13 de septiembre de 2012 la Aduana Marítima de Valencia, España, interceptó dos contenedores con un cargamento de cocaína y metanfetaminas escondido entre un pedido de mármol que tenía como remitente la empresa Profumi ubicada en Jalisco y con destinatario a Developements Opportunities S. L. cuyo único administrador era Gonzalo Contreras.
El valor total de la droga decomisada fue de 3 millones 949 mil 125. 321 euros.
Gonzalo está preso en Madrid desde octubre de 2012 y fue sentenciado el 14 de noviembre de 2013 a nueve años de prisión por el delito de narcotráfico, además se le impuso una multa de 4 millones de euros. Francisco Martín Rivera Báez, de Jalisco, también fue detenido y condenado a seis años y dos multas de 3 millones de euros.
El 21 de octubre de 2015, ya preso, el joven escribió una carta a la Embajada de México en España en la cual, afirma, que fue utilizado por narcotraficantes desconocidos como un “gancho ciego”, que utilizaron su cargamento de mármol para esconder drogas.
“Como sabrá usted muy bien, los cárteles y narcotraficantes de nuestro país, en no pocas ocasiones, hacen uso de personas que nada tienen que ver con el mundo de la droga o la delincuencia, para conseguir sus objetivos lucrativos o de otra índole. Esto es el llamado ‘gancho ciego’. Y precisamente es lo que pasó a mí. Por supuesto ignoro quiénes son los autores de lo que me ha traído hasta aquí, aunque reconozco que, si lo supiera, quizás no estaría dispuesto a decirlo por la seguridad de mi familia en México. Aunque, por otro lado, de saberlo no podría afirmar no ser culpable. Pero en este caso, irónicamente, me enfrentaría a una condena menor de la que pesa sobre mi espalda actualmente”, escribe de puño y letra en la misiva a la que SinEmbargo tuvo acceso.
El caso salió a la luz pública cuando se supo que la presentación diplomática de México en Madrid, estuvo al pendiente de la situación del ex dirigente nacional del Partido Revolucionario Institucional, Humberto Moreira, mientras Gonzalo era ignorado.
“¿Cómo es posible que a una persona que está en el mismo país que yo, más o menos en las mismas circunstancias que yo, que es paisano mío, con autoridades mías como suyas que se muevan a ese nivel y con esa agilidad, cuando por mí no… Si yo no hubiera sabido que eran capaces de hacer eso con alguien como él [Humberto Moreira], yo no estaría pidiendo que hicieran algo por mí, porque al final de cuentas, ¿dónde está la diferencia?, ¿qué he hecho mal para que a él sí lo ayuden y a mí no?”, dijo Gonzalo en entrevista con SinEmbargo vía Skype.
Moreira llegó al aeropuerto de Madrid-Barajas el 15 de enero cuando fue detenido bajo cargos de lavado de dinero, malversación de fondos durante su gobierno en Coahuila y vínculos con el crimen organizado.
Sin embargo, aunque ese mismo viernes fue encarcelado sin derecho a fianza para evitar que huyera del país, días después fue puesto en libertad al no encontrar pruebas en su contra. A pesar de que el político dijo que se quedaría en Barcelona para continuar con sus estudios de maestría, el cuatro de febrero arribó a la Ciudad de México. “Mancharon mi honor”, declaró sobre el proceso judicial bajo el que estuvo durante semanas.