De acuerdo con el IMSS, del 2017 a 2021 otorgó en promedio 23 mil 344 incapacidades para el trabajo, lo que implicó en último año un impacto económico de 20 mil 128 millones de pesos.
Ciudad de México, 24 de abril (SinEmbargo).- El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) dio a conocer este domingo que la pandemia de COVID-19 dejó al descubierto que al menos 10 millones de trabajadores en México padecen enfermedades como hipertensión arterial, diabetes, sobrepeso y obesidad, lo que además de la repercusión física y de vulnerabilidad a enfermedades respiratorias, particularmente la que causa el virus SARS-CoV-2, impacta a las empresas en su competitividad y a la economía del país.
El IMSS destacó que de acuerdo con la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2018-2019, en la etapa pre-pandemia en el país, existían 8.6 millones de personas mayores de 20 años que vivían con Diabetes Mellitus, 15.2 millones con Hipertensión Arterial y el 75.2 por ciento de la población entrevistada refirió vivir con sobrepeso u obesidad.
Además, detalló que durante la pandemia se han otorgado 4.6 millones de incapacidades por COVID-19, las cuales representaron cerca de 44 millones de días laborables perdidos; durante 2021 se registraron 70.6 millones de días de incapacidad por enfermedades y accidentes autorizados para los trabajadores afiliados al IMSS.
Añadió que de 2017 a 2021, otorgó en promedio 23 mil 344 incapacidades para el trabajo, lo cual provocó que tan sólo el último año el impacto económico para el IMSS por este concepto fuera de 20 mil 128 millones de pesos.
El IMSS reveló que los motivos más comunes por los que un trabajador solicitó una incapacidad para el trabajo fueron: enfermedades respiratorias, del sistema osteomuscular y del tejido conjuntivo, luxaciones, esguinces y torceduras. Mientras que las fracturas representaron el mayor gasto en materia de subsidios por incapacidad temporal para el trabajo.
Ante este escenario, el IMSS anunció que, junto con el sector empresarial, prepara una estrategia con el fin de promover acciones preventivas de salud y riesgos de trabajo en las empresas, en las cuales el patrón tiene la responsabilidad de colaborar en la aplicación de las normas para proteger la salud de los empleados.
La estrategia, agregó, se basa en favorecer centros de trabajo con un enfoque saludable para fortalecer la cultura de prevención, ya que la fuerza laboral es el pilar que sostiene la salud, la economía y la sociedad.