Una revancha general en 2020 entre Trump y el Presidente Joe Biden se está volviendo cada vez más inevitable.
Por Meg Kinnard y Will Weissert
Charleston, SC, 24 de febrero (AP) — Donald Trump ganó las primarias republicanas de Carolina del Sur este sábado, superando fácilmente a la exembajadora de la ONU Nikki Haley en su estado natal y consolidando aún más su camino hacia una tercera nominación republicana consecutiva.
Trump ahora ha arrasado en todas las contiendas que contaron para los delegados republicanos, sumándose a victorias anteriores en Iowa, New Hampshire, Nevada y las Islas Vírgenes de Estados Unidos. La última victoria del expresidente probablemente aumentará la presión sobre Haley, exrepresentante de Trump ante la ONU y Gobernadora de Carolina del Sur de 2011 a 2017, para que abandone la carrera.
Una revancha general en 2020 entre Trump y el Presidente Joe Biden se está volviendo cada vez más inevitable. Haley ha prometido permanecer en la carrera al menos hasta la tanda de primarias del 5 de marzo, conocida como Supermartes, pero no pudo hacer mella en el impulso de Trump en su estado natal a pesar de celebrar muchos más eventos de campaña y argumentar que las acusaciones contra Trump paralizarán él contra Biden.
Associated Press declaró a Trump ganador cuando las urnas cerraron en todo el estado a las 19:00 horas. Esa decisión se basó en un análisis de AP VoteCast , una encuesta exhaustiva de los votantes primarios republicanos de Carolina del Sur. La encuesta confirmó los hallazgos de las encuestas previas al día de las elecciones que mostraban que Trump superaba con creces a Haley en todo el estado.
“Nunca había visto al Partido Republicano tan unido como lo está ahora”, declaró Trump, subiendo al escenario para su discurso de victoria momentos después del cierre de las urnas. Y añadió: “Se puede celebrar durante unos 15 minutos, pero luego tenemos que volver al trabajo”.
Las primeras primarias del Sur en Carolina del Sur han sido históricamente un referente confiable para los republicanos. En todas las primarias, excepto una, desde 1980, el ganador republicano en Carolina del Sur pasó a ser el candidato del partido. La única excepción fue Newt Gingrich en 2012.
Trump fue dominante en todo el estado, incluso lideró en el condado de Lexington, que Haley representó en la Legislatura estatal. Muchos habitantes de Carolina del Sur que respaldaban a Trump, incluso algunos que anteriormente apoyaron a Haley durante su mandato como Gobernadora, no estaban dispuestos a darle un empujón a su estado natal.
“Ha hecho algunas cosas buenas”, dijo Davis Paul, de 36 años, sobre Haley mientras esperaba a Trump en un mitin reciente en Conway. “Pero simplemente no creo que esté preparada para enfrentarse a un candidato como Trump. No creo que mucha gente pueda”.
En la sede de Haley el sábado por la noche, sus seguidores agitaron sus carteles frente a una gran pantalla de proyección que mostraba el discurso de Trump, bloqueándolo de la vista. Eso, por supuesto, no hizo que la derrota fuera menos aplastante.
Haley insistió en los últimos días en que se dirigiría directamente a Michigan para las primarias del martes, la última contienda importante antes del Súper Martes. Aún así, enfrenta preguntas sobre dónde podría ganar un concurso o ser competitiva.
Trump y Biden ya se están comportando como esperan enfrentarse en noviembre.
Trump y sus aliados argumentan que Biden ha debilitado a Estados Unidos y señalan la caótica retirada de Afganistán y la decisión de Rusia de lanzar una invasión a gran escala de Ucrania. Trump también ha atacado repetidamente a Biden por la alta inflación a principios de su mandato y su manejo de los cruces récord de migrantes en la frontera entre Estados Unidos y México.
Trump ha cuestionado, a menudo en términos duramente personales, si Biden, de 81 años, es demasiado mayor para cumplir un segundo mandato. El equipo de Biden, a su vez, ha destacado los errores del propio Trump, de 77 años, durante la campaña electoral.
Biden ha intensificado sus recientes viajes de recaudación de fondos por todo el país y ha atacado cada vez más directamente a Trump. Ha llamado a Trump y su movimiento Make America Great Again amenazas terribles a los principios fundacionales de la nación, y la campaña de reelección del Presidente últimamente ha centrado la mayor parte de su atención en que Trump sugiera que usaría el primer día de una segunda presidencia como un dictador y que le diría a Rusia que ataque a los aliados de la OTAN que no cumplan con las obligaciones de gasto en defensa exigidas por la alianza.
Haley también criticó a Trump por sus comentarios sobre la OTAN y también por cuestionar por qué su esposo no estuvo en la campaña electoral con ella, incluso cuando la exprimera dama Melania Trump no apareció con él. El mayor Michael Haley está desplegado en el Cuerno de África en una misión con la Guardia Nacional del Ejército de Carolina del Sur.
Pero los votantes republicanos de Carolina del Sur se alinean con Trump en cuanto a que tienen sentimientos tibios hacia la OTAN y el continuo apoyo de Estados Unidos a Ucrania, según datos de AP VoteCast de las primarias del sábado. Alrededor de seis de cada 10 se oponen a seguir ayudando a Ucrania en su lucha contra Rusia. Sólo alrededor de un tercio describió la participación de Estados Unidos en la OTAN como “muy buena”, y un mayor porcentaje dijo que es sólo “algo buena”.
Haley ha recaudado grandes cantidades de dinero para su campaña y está previsto que comience una gira de campaña por todo el país el domingo en Michigan antes del Súper Martes el 5 de marzo , cuando muchos estados ricos en delegados celebran primarias.
Pero no está claro cómo puede impedir que Trump consiga suficientes delegados para convertirse en el presunto candidato del partido por tercera vez.
El Senador Lindsey Graham, RS.C., felicitó a Haley mientras hablaba con los periodistas en la fiesta de la noche electoral de Trump en Columbia, pero sugirió que era hora de que abandonara.
“Creo que cuanto antes lo haga, mejor para ella y para el partido”, dijo Graham. Posteriormente, el Senador fue recibido con abucheos luego de que Trump lo llamara al escenario para dirigirse a los reunidos.
La fuerza política de Trump ha perdurado a pesar de enfrentar 91 cargos penales relacionados con sus esfuerzos por revertir su derrota electoral de 2020 ante Biden, el descubrimiento de documentos clasificados en su residencia de Florida y las acusaciones de que organizó en secreto sobornos a una actriz porno.
