El rescate se llevó a cabo en una zona crítica del Refugio para la Vaquita Marina. Es la misma zona en donde hombres en pequeñas embarcaciones dispararon contra un buque de Sea Shepherd a principios de mes.
Por Peter Orsi
CIUDAD DE MÉXICO (AP).— Rescatistas en México lograron liberar a ballena jorobada que quedó atrapada en una red de pesca ilegal colocada en un refugio para la vaquita marina una especie en peligro de extinción en costas de Baja California, informó el lunes un grupo de protección animal.
Los rescatistas trabajaron durante varias horas para cortar la red y liberar a la ballena.
Hacia la tarde, su cabeza y cuerpo fueron liberados y desapareció en lo profundo.
#PorSiTeLoPerdiste Personal Naval en coordinación con @PROFEPA_Mx y @CONANP_mx ayer liberaron una ballena tipo Minke que se encontraba enredada en un arte de pesca en el área del Refugio para la Protección de la Vaquita Marina. #GuardiaCostera pic.twitter.com/ZPX5jEgt7N
— SEMAR México (@SEMAR_mx) February 22, 2020
Sin embargo, Sea Shepherd advirtió que quedaron algunos remanentes de la red enredados en su cola, posiblemente una futura amenaza.
El rescate se llevó a cabo en una zona crítica del Refugio para la Vaquita Marina. Es la misma zona en donde hombres en pequeñas embarcaciones dispararon contra un buque de Sea Shepherd a principios de mes.
Se cree que sólo queda una decena de vaquitas marinas en el Golfo de California, su único hábitat natural. Están en peligro de extinción por la pesca con red ilegal del totoaba, una especie cuya vejiga natatoria se cotiza en miles de dólares en China.
Como muestra el reciente rescate, la vaquita marina no es la única especie amenazada por la pesca ilegal en el refugio.
Sea Shepherd señaló que rescató y desenredó a una ballena jorobaba ahí en 2016 y el siguiente año descubrió una ballena de Bryde muerta que también se enredó en las redes.
“Este enredo de ballena es otro ejemplo de porqué es tan importante seguir protegiendo de la pesca ilegal al refugio de la vaquita marina”, dijo en un comunicado el capitán Octavio Carranza. “También es un triste recordatorio de aquello con lo que tiene que lidiar la vaquita todos los días en su intento por sobrevivir”.