En la conferencia de prensa del pasado 18 de diciembre, Irma Eréndira Sandoval llegó escoltada por sus dos subsecretarios, según las fotografías oficiales. Ya frente a cámaras, a su derecha se sentó Tania de la Paz Pérez, quien luego de un año en el Gobierno federal, es ya su brazo derecho en la Secretaría de la Función Pública, a pesar de los lazos políticos que la unen al periodo salinista.
Ciudad de México, 23 de diciembre (SinEmbargo).- Una de las alas salinistas en la Secretaría de la Función Pública (SFP), fue la encargada de realizar la investigación de Manuel Bartlett Díaz: la Subsecretaría de Responsabilidades Administrativas y Contrataciones Públicas, a cargo de Tania de la Paz Pérez Farca, concluyó que el funcionario no incurrió en falla alguna.
SinEmbargo le ha dado seguimiento a esta funcionaria de la SFP. Tania de la Paz Pérez, fue asociada senior de la empresa Vázquez Nava y Consultores, propiedad de la ex funcionaria salinista María Elena Vázquez Nava.
Pérez Farca es la encargada de una de las oficinas con más importancia en cuanto a la revisión y gerencia de las compras del Gobierno de México y en el despacho de Vázquez Nava trabajó en el área de transparencia, rendición de cuentas, cierres de administración, evaluación de políticas públicas, contratación pública, financiamiento público y proyectos de energía e infraestructura.
Y justo entre las tareas de la ahora funcionaria, está emitir criterios de interpretación y de proporcionar asesoría en materia de adquisiciones, arrendamientos, obras públicas, contrataciones y designación de testigos sociales.
Quien realizó la investigación a Bartlett Díaz fue la oficina que se desprende de esa Subsecretaría, que es la Dirección General de Denuncias e Investigaciones.
“Que quede claro, en la nueva Función Pública no defendemos ni protegemos a nadie. Lo único que hemos defendido con nuestras actuaciones, es el adecuado funcionamiento de la administración pública federal y luchamos férreamente en la erradicación de la corrupción y de la impunidad para lograr un ambiente libre de corrupción en todos los ámbitos de la vida pública”, dijo el pasado jueves Irma Eréndira Sandoval.
El 6 de septiembre la dependencia recibió una denuncia anónima por posibles faltas administrativas sancionables en términos de la Ley General de Responsabilidades Administrativas atribuibles al Director General de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), por conflicto de interés, tráfico de influencias y enriquecimiento oculto u ocultamiento del conflicto de interés.
Todas las denuncias fueron motivadas por el patrimonio de Bartlett Díaz, sus dos hijos (Alejandra Bartlett Álvarez y León Manuel Bartlett Álvarez), su pareja sentimental (Julia Elena Abdala Lemus) y el hijo de esta última (Julio Antonio de Regil Abdala).
Tania de la Paz, en entrevista con Milenio, explicó que la SFP es centró la investigación en el sujeto, que era Manuel Bartlett a partir del 1 de diciembre de 2018 hasta la fecha en que se presentó la primera denuncia.
“Se giró una investigación muy exhaustiva, con más de 50 diligencias a diferentes autoridades como la Contraloría Interna del Senado, el SAT, el Registro Público de la Propiedad, Secretaría de Economía, notarías públicas, entre otras. Con todas estas evidencias que pudimos corroborar con documentos oficiales, dan la conclusión de que el licenciado fue congruente en su declaración patrimonial tanto en la inicial como en la modificación”.
“Nosotros partimos de la base de empezar la investigación con las declaraciones y hacia atrás, cinco años, porque también corroboramos declaraciones fiscales. Esa fue la línea base para verificar el periodo en que él es funcionario público […] Verificamos que lo que declaró el señor es congruente con lo que tiene presentados en sus declaraciones”, comentó luego de la conferencia de prensa que desató fuertes críticas contra la SFP.
Tania de la Paz representa a su vez, un posible lazo con la administración del expresidente Carlos Salinas de Gortari; formó parte del despacho de María Elena Vázquez Nava, que tan solo un año después de dejar el Gabinete de Carlos Salinas de Gortari, fundó Vázquez Nava y Consultores, despacho que se mantiene en operación hasta la fecha.
María Elena Vázquez Nava, quien fue titular de la Contraloría General de la Federación de 1988 a 1994, fundó la firma especializada el desarrollo y estructuración de proyectos. De acuerdo con su portal en Internet, proveen “las mejores prácticas de transparencia, rendición de cuentas y anticorrupción”.
Comunicación Social de la SFP, publicó ayer junto con el comunicado de prensa, una fotografía de la Secretaria Eréndira Sandoval llegando a donde sería el encuentro con medios. Llegó escoltada por De la Paz y por el maestro Roberto Salcedo Aquino, quien es Subsecretario de Control y Auditoría de la Gestión Pública de la actual SFP, que omitió poner en su declaración de conflictos de interés que actualmente su hijo, Armando Salcedo Cisneros, trabaja en el despacho Vázquez Nava y Asociados.
LA LIGA SALINAS Y BARTLETT
A Manuel Bartlett Díaz y a Carlos Salinas de Gortari los une uno de los eventos más bochornosos en la historia moderna de México. El ex Presidente llegó al poder justo cuando la oposición tomó impulso en México después de décadas de poner absoluto del Partido Revolucionario Institucional. Tanto la izquierda, representada por Rosario Ibarra de Piedra, Heberto Castillo y Cuauhtémoc Cárdenas, así como la derecha, que tenía como líder a Manuel J. Clouthier, alegaron fraude electoral. Y como operador, señalaron Bartlett.
El ahora director de la Comisión Federal de Electricidad era el Secretario de Gobernación en tiempos de Miguel de la Madrid Hurtado y, por lo tanto, el encargado de garantizar equidad y transparencia en los comicios. El órgano electoral (Comisión Federal Electoral) dependía de Gobernación en esos años. Pero la noche de la elección, y un evento que el viejo político ha rechazado como intencional, el sistema de cómputo se vino abajo, es decir, “se cayó”, como se dice en la jerga de los analistas de sistemas.
La oposición dijo que Bartlett estaba entregando el país a Carlos Salinas de Gortari, miembro de su partido, a través de un fraude electoral. El priista asumió la Presidencia de México pero ni él ni Bartlett pudieron quitarse la mancha elección de 1988, que, según los analistas políticos independientes, dada el triunfo a Cárdenas.
Bartlett ha negado haber operado el fraude y tener ese vínculo con Salinas. Incluso ha rechazado la frase de “se cayó el sistema”, que se atribuye erróneamente a él, y no a Diego Fernández de Cevallos, panista.
Aunque se presenta como rebelde y de izquierda, Bartlett nunca ha dejado el PRI, donde hizo carrera y, al menos en apariencia, dinero. Fue precandidato a la Presidencia por el PRI en noviembre de 1999. Fue Senador de la República por el PRI desde 2000 y hasta 2006. Pero ese año, por diferencias con Roberto Madrazo, tuvo un gran atino: llamó al “voto útil” a favor del entonces candidato Andrés Manuel López Obrador. Y relanzó su carrera.
Para 2012 sería Senador plurinominal ahora por el Partido del Trabajo. Y el 27 de julio de 2018, López Obrador dijo que sería el próximo titular de la Comisión Federal de Electricidad. Le cumplió.