México, 23 Oct. (Notimex).- Por su destacada trayectoria e invaluables aportaciones al conocimiento y al desarrollo de las ciencias sociales, así como a su mérito académico en México y a nivel internacional, El Colegio de México (Colmex) entregó hoy aquí el Premio “Daniel Cosío Villegas” al sociólogo mexicano Pablo González Casanova.
En la ceremonia, realizada en la Sala Alfonso Reyes de dicha institución, Javier Garcíadiego, presidente de El Colmex, fue el encargado de entregar el citado galardón y un cheque, cuyo monto se desconoce, al también profesor emérito por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Al evento, que lució abarrotado, asistieron el politólogo Octavio Rodríguez Araujo; el director del Fondo de Cultura Económica (FCE), Joaquín Díez-Canedo; el sociólogo y antropólogo Rodolfo Stavenhagen, y el periodista Carlos Payan, entre otros intelectuales.
En su intervención, el galardonado agradeció el premio y recordó a sus maestros como el propio Daniel Cosío Villegas, Alfonso Reyes y Ramón Villegas, entre otros; asimismo, centró su discurso en la defensa de la identidad de los pueblos indígenas de América Latina.
El también Premio Internacional “José Martí” 2003, recordó cómo Fray Bartolomé de las Casa defendió a los indios y cómo legó a éstos que tenían derecho por ley divina y humana, usar las fuerzas y armas para echar a los invasores de su tierra.
Al respecto, Javier Garcíadiego recordó que tanto el Premio Alfonso Reyes y el Cosío Villegas, ambos instaurados por la institución a su cargo, “son premios de académicos para académicos y que los proponentes sólo pueden ser profesores investigadores de El Colmex, al igual que los jurados”.
Comentó que el Premio Alfonso Reyes es para humanistas, mientras que el Cosío Villegas es para científicos sociales o quienes se han distinguido en la solución de graves problemas sociales de México y el mundo.
“El Premio Cosío Villegas lo recibe hoy don Pablo por sus dos acepciones: por ser seguramente el principal científico social en el país y por haber combatido algunas de las mayores lacras nacionales como son el autoritarismo, la discriminación, la ignorancia y la injusticia social”, sostuvo.
Calificó de atinada y acertada la decisión del jurado, “pues no hay nada más justo que entregar a don Pablo este premio. Así pues, quedan unidos los nombres de los autores, de los libros de análisis social más importantes de la segunda mitad del siglo XX, en tanto certeros, leídos y conocidos; Cosío Villegas como autor del sistema político mexicano y Pablo como autor de la Democracia en México”.
Manifestó que premiar a Pablo es reconocer a la educación pública mexicana, aunque lamentó que este sector no es muy satisfactorio en todos sus aspectos, pues es terriblemente disparejo.
“Premiar a don Pablo es reconocer que si es compatible hacer obra científica rigurosa y tener un profundo compromiso social y moral, la condición es hacer ambas cosas bien, intensamente como antes lo hizo Cosío Villegas y como hoy lo sigue haciendo González Casanova”, indicó.
En su oportunidad, Arturo Alvarado, director del jurado calificador, elogió la prolífica obra en materia de sociología del galardonado, su contribución a la formación y a la consolidación de la disciplina de la sociología en México, particularmente, durante la primera mitad del siglo XX, y su extensa labor docente que influyó en diversas generaciones de profesionales.