El Consejo Ciudadano para la Seguridad y Justicia de la Ciudad de México detectó hasta 686 aplicaciones que estaban operando bajo el esquema de “montadeudas”, y aunque el número disminuyó tras el operativo realizado por la Fiscalía capitalina, algunas aplicaciones han vuelto a aparecer con otro nombre o en otras plataformas, por lo cual siguen operando 313 de ellas.
Ciudad de México, 23 de agosto (SinEmbargo).– La cifra de reportes diarios contra los llamados “montadeudas”, quienes se dedicaban a extorsionar y amenazar a ciudadanos que habían solicitado un préstamo financiero, pasó de 48 a 74, del martes pasado, cuando se registró un operativo judicial en su contra en la Ciudad de México, al día de ayer.
Ahora, las denuncias suman 10 mil 286 desde que en junio de 2021 se empezaron a presentar, informó el Consejo Ciudadano para la Seguridad y Justicia de la Ciudad de México. De éstas, el 5.6 por ciento inició una carpeta de investigación o denuncia digital en el Ministerio Público, es decir 583.
Aunque la cifra disminuyó a partir del operativo registrado el pasado 16 de agosto, la realidad es que varias de estas aplicaciones solamente se han mudado de plataforma. Al inicio, la cifra de 686 aplicaciones disminuyó a 265, según un corte al 21 de agosto. En las últimas 48 horas, el dato repuntó a 313.
“En todas las redes sociales hay, y en todas las formas: puede ser por SMS (mensajería tradicional), Google, Facebook, en todos lados”, explicó Guerrero Chiprés. “Puede ser que cesen [operaciones] y aparecen con otro nombre, reaparecen con el mismo nombre, o aparecen desde otra plataforma. Por ejemplo, apk.app, que se ha estado utilizando en los últimos cinco días. Entonces, ya no estaban en Google Play, se van a otros espacios y lo único que puede contenerlos es los centros de operación y la capacidad nacional e internacional de darles seguimiento”, comentó el presidente del Consejo Ciudadano.
MODUS OPERANDI
El Consejo Ciudadano explicó que —a partir de los reportes recibidos— el modus operandi de las aplicaciones “montadeudas es el siguiente: personas ofertaban préstamos de dinero “fáciles”, rápidos y con requisitos mínimos, de manera presencial con volantes o a través de redes sociales e Internet. Estos préstamos se concretaban por medio de aplicaciones digitales que necesitaban descargarse en el celular.
Las aplicaciones pedían acceso a los contactos, archivos e información bancaria. A los clientes, podían solicitar adelantos monetarios, pero después depositaban una cantidad menor a la solicitada o incluso no llegaban a depositar el préstamo solicitado.
En caso de que fuera depositado el préstamo, rápidamente se acumulaban intereses altos que hacían la deuda impagable. En ese momento, los trabajadores recurrían a métodos como extorsión, intimidación o extorsión para exigir el cobro de la deuda.
Guerrero Chiprés ejemplificó este modo de funcionamiento con algunas de las denuncias que recibió el Consejo Ciudadano.
“Comienzan a comunicarse con sus contactos indicando que la persona se dedica a robarle a la financiera. Les envían a los contactos fotografía de la INE (credencial de elector) y le piden a esos contactos ayudarles a pagar y amenazan con presentar fotografías de su familia”, detalló el presidente del Consejo. “[Amenazan con filtrar] Fotos desnudas, con otras personas y diciendo que están cometiendo cierta práctica, y amenazan con difundir esas fotografías, etcétera”.
A raíz de estas tácticas, las víctimas decidían entregar el dinero solicitado para que cesara el hostigamiento, pero el organismo llegó a detectar graves repercusiones a la salud mental a partir de la experiencia.
“Tuvimos registradas dos tentativas de suicidio, dos mujeres, que estuvieron en un proceso de tentativa suicida precisamente por la abrumadora presencia e intervención de las llamadas telefónicas de cobro, y la amenaza cernida sobre ellas, su familia y su reputación. Hay temas de depresión profunda, de depresión y ansiedad”, apuntó Guerrero Ciprés.
¿QUIÉNES FUERON LAS VÍCTIMAS?
El perfil de las víctimas varía, según los datos demográficos obtenidos a partir de los reportes: el 58.2 por ciento fueron mujeres, y el restante 41.8 de las denuncias fueron hechas por hombres. Más del 76.5 por ciento de la población afectada tenía entre 21 y 50 años de edad.
De acuerdo con el Consejo, el 54 por ciento de las denuncias fueron hechas por personas ubicadas en la Ciudad de México. Del resto de las entidades, mil 746 reportes fueron hechos desde el Estado de México, seguido por Coahuila con 496, Veracruz con 253, Jalisco con 210, Puebla con 193 y Guanajuato con 131.
En el caso particular de la capital del país, reconoció Guerrero Chiprés, las denuncias provenían principalmente de sitios con mayor densidad poblacional: las alcaldías Iztapalapa, Gustavo A. Madero y Álvaro Obregón. “Corresponde con la densidad demográfica”, indicó.
De los cinco mil 550 reportes hechos desde la Ciudad de México, el 17.3 por ciento correspondió a la Alcaldía Iztapalapa, 10.6 por ciento a la Gustavo A. Madero, 7.4 por ciento a Álvaro Obregón, 6.4 por ciento en tanto Cuauhtémoc como Tlalpan, 5.3 por ciento en Coyoacán, 5.2 por ciento en Azcapotzalco, 4.5 por ciento en Venustiano Carranza, 4.1 en Miguel Hidalgo, 4.0 en Iztacalco y en Xochimilco, cada uno; 3.5 por ciento en Benito Juárez y en Tláhuac; 2.0 por ciento en la Magdalena Contreras, 1.8 por ciento en Cuajimalpa y 0.7 por ciento en Milpa Alta.