Esta película presenta una disputa familiar entre Andrea y Héctor, hermanos aunque Héctor señala ser adoptado, que inicia al leer el testamento en el que su padre les pone tres requisitos para recibir la herencia: hacerse cargo de la empresa, casarse y tener hijos; de no cumplir ninguno de estos aspectos su tía permanecerá como heredera universal.
Ciudad de México, 23 de agosto (SinEmbargo).- La película mexicana Locos por la herencia protagonizada por Julieta Egurrola, Alberto Guerra, Paulette Hernández y Tiaré Scanda, llega este fin de semana a las salas de cine de nuestro país con una propuesta que no tiene el mejor resultado.
Esta comedia trata de la disputa por la herencia familiar entre los hermanos Andrea y Héctor, este último adoptado, que inicia al leer el testamento en el que su padre les pone tres requisitos para recibir la herencia: hacerse cargo de la empresa de chocolate, casarse y tener hijos; si no cumplen ninguno de estos aspectos su tía permanecerá como heredera universal.
Locos por la herencia sigue con la línea de cine mexicano de comedia que ha imperado desde hace algunos años, sin embargo, el resultado de esta película no es el mejor y aunque tratan de hacer reír al espectador, durante la mayor parte de la cinta, no todas las escenas funcionan.
La cinta, que se filmó en 2016, presenta varios giros en la historia para aclarar la situación entre los hermanos y revelar varios secretos familiares: ¿Realmente son hermanos o no? ¿Héctor sí es adoptado?. Giros que se hacen necesarios al presentar una relación extraña y nada común entre sus protagonistas.
Esta es una de esas películas que eliges para ver en cine cuando no hay otra opción o que ves pero sin muchas expectativas.
