Ciudad de México, 23 de febrero (SinEmbargo).– La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) aseguró un total de 101 animales a la Unidad de Manejo para la Conservación de la Vida Silvestre (UMA) denominada “Club de los Animalitos”, entre los que destacan 40 grandes carnívoros, por hacinamiento y faltas al trato digno.
El aseguramiento se dio realizó tras una inspección efectuada a la UMA ubicada en Tehuacán, Puebla, y cuyo propietario es el Diputado de Acción Nacional (PAN), Sergio Emilio Gómez Olivier.
La revisión se hizo en atención a diversas denuncias ciudadanas, donde constararon que el lugar contaba con diminutas jaulas apiladas en un espacio reducido, maltrato, e incluso que la heces de unos caían sobre otros animales.
El personal de la Profepa acudió a las instalaciones de esta Unidad de Manejo con el propósito de verificar con los responsables de ese zoológico, las condiciones de confinamiento y la legal procedencia de los ejemplares, así como el registro de la UMA, así como el Plan de manejo de especies y su cumplimiento.
El pasado 29 de enero, la organización internacional Igualdad Animal (IA), con sede en México, documentó con fotografías y datos sobre la situación de más de 400 animales que habitan en el zoológico “El Club de los animalitos”.
En esa ocasión, el médico veterinario Carlos Eguibar Zenteno, dijo a SinEmbargo que el zoológico se deslindaba de cualquier comentario, ya que es el Diputado del PAN quien maneja toda esa información por tratarse de un asunto “político”.
“Tenemos 30 años de experiencia trabajando en zoológicos, no hay nada como maltrato animal, entonces es totalmente incierto. Como es año electoral, es un ataque político, por consiguiente los animales y nosotros no tenemos nada que ver”, dijo Eguibar Zenteno.
Ahora, funcionarios e inspectores de la Subprocuraduría de Recursos Naturales constataron que en dicho zoológico existe nula ambientación en los recintos, no hay cuartos de noche y ni pisos adecuados, situaciones que provoca en algunos ejemplares conductas violentas estereotipadas, lesiones y peleas entre ellos, por la falta de espacio y compatibilidad.
En total se verificaron 240 ejemplares de vida silvestres (entre los quie sobresalen felinos, herbívoros, primates y aves), de los cuales 101 fueron asegurados de manera precautoria: 92 por faltas graves al trato digno y respetuoso y nueve debido a que durante la inspección no se acreditó su legal procedencia.
Se trata de un 15 tigres de bengala (Panthera tigris); nueve jaguares (Panthera onca); cinco pumas (Puma concolor); siete leopardos (Panthera pardus); cinco leones africanos (Panthera leo); dos osos grizzli (Ursus arctos); tres antílopes Black Buck (Antilope cervicapra); y tres bisontes (Bison bison) y un tigrillo (Leopardus wiedii).
También se aseguraron un dromedario (Camelus dromedarius); tres ejemplares de guanaco (Lama guanicoe); tres linces (Linx rufus); dos mapaches (Procyon lotor); tres martuchas (Potos flavus); tres ejemplares de mono araña (Ateles geoffroyi); tres de mono capuchino (Cebus apella) y 12 de orix cimitarra (Orix dammah).
Finalmente se encuentran en la lista de animales asegurados a la UMA, dos ejemplares de papión sagrado (Papio hamadryas); seis seretes (Dasyprocta mexicana); dos venados temazate (Mazama americana); tres tepezcuintle (Agouti paca); tres wapiti (Cervus canadensis); un cotorro cabeza negra (Nandayus nenday); un perico frente escarlata (Aratinga wagleri); un tucán (Ramphastos sulfuratus); un búho virginiano (Bubo virginianus) y una Guacamaya roja (Ara macao).
Una de las principales faltas al trato digno y respetuoso que se detectaron es el hacinamiento de los ejemplares en espacios muy reducidos, toda vez que los encierros no cuentan con los requerimientos mínimos necesarios para su bienestar.
Existe nula ambientación en los recintos, no hay cuartos de noche y se cuenta con pisos inadecuados, lo que ha provocado conductas estereotipadas en algunos ejemplares, lesiones y peleas entre ellos por la falta de espacio y compatibilidad.
La Profepa detectó que no existe seguridad para el público visitante y para los propios animales, al no haber una barrera que aísle a unos de otros, ya que es posible acceder a los ejemplares de vida silvestre con tan solo meter la mano al encierro.
Aunado a lo anterior, la UMA presentó diversas irregularidades en lo que respecta al Plan de Manejo, entre las que destacan las siguientes: no está actualizado; no incluye a todas las especies que debieran estar bajo manejo; hay incumplimiento a lo establecido en el mismo Plan; y su responsable técnico no cuenta con registro ante la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
También existen carencias en las áreas de cocina y veterinaria, y se carece del personal necesario para la buena atención de la colección animal.
Los 101 ejemplares asegurados quedaron depositados en las instalaciones de la UMA inspeccionada, a resguardo del responsable técnico que atendió la diligencia.
La Subprocuraduría de Recursos Naturales de la Profepa buscará canalizarlos a lugares que cuenten con las condiciones adecuadas para su recuperación, resguardo y manutención.