El mandatario estatal afirmó que el domicilio del imputado no cuenta con las condiciones de seguridad y, a su vez, el Gobierno del estado no tiene el personal requerido para garantizar que el procesado no evadirá su proceso judicial.
Ciudad de México, 23 de enero (SinEmbargo).- El Gobernador de Oaxaca, Salomón Jara Cruz, criticó el cambio de la medida cautelar para el presunto agresor de la saxofonista María Elena Ríos.
A través de un video publicado en sus redes sociales, el mandatario estatal señaló que la resolución de Juan Antonio Vera Carrazal “no cumplió con el requisito de tomar en cuenta la perspectiva de género y los derechos de la víctima”, por lo que instruyó a la Secretaría de Seguridad del estado para “realizar un diagnóstico específico del caso” y el cambio de la medida cautelar.
Esta es mi posición sobre el caso de María Elena Ríos. El combate a la violencia de género y a la corrupción, son ejes de nuestro gobierno. https://t.co/xGux0ksYb5
— Salomón Jara Cruz (@salomonj) January 23, 2023
“No existen las condiciones materiales para dar cumplimiento al cambio de medida cautelar [de prisión preventiva a arresto domiciliario]”, dijo en el video, agregando que el domicilio del imputado no cuenta con las condiciones de seguridad y, a su vez, el Gobierno del estado no tiene el personal requerido para garantizar que el procesado no evadirá su proceso judicial.
Asimismo, solicitó a través de la Secretaría de Seguridad Pública la reevaluación del cambio de la medida cautelar por parte del impartido de justicia; así como también solicitó al Magistrado Presidente del Tribunal Superior de Justicia y presidente del Consejo de la Judicatura del estado de Oaxaca, el inicio de los procedimientos para evaluar y garantizar que “la actuación del Juez estuvo apegada al derecho y, en caso de que sea lo contrario, aplicar las sanciones correspondientes.
Una vez publicado el video, la propia María Elena Ríos comentó en su cuenta de Twitter que ni ella ni su abogada Diana Cristal González han recibido algún tipo de notificación formal sobre lo anteriormente mencionado por el Gobernador del estado.
“Las formalidades al respecto son por escrito. Un video no dice nada”, agregó.
Entonces que sea el mismo secretario @jesusromerooax el que ahonde, amplíe y remita el informe. La @FISCALIA_GobOax, abogada @DianaCristal290 y yo no lo hemos recibido en ningún momento Gobernador @salomonj. Las formalidades al respecto son por escrito, un video no dice nada. https://t.co/e5o6fZKtcc
— •𝐄𝐥𝐞𝐧𝐚 𝐑í𝐨𝐬 🎷 (@_ElenaRios) January 23, 2023
Este fin de semana, la saxofonista María Elena Ríos —quien fue atacada con ácido en 2019— reveló que su supuesto agresor, Juan Antonio Vera Carrizal, recibió prisión domiciliaria luego de una “audiencia maquillada” y un “acuerdo pactado”.
“Con una audiencia maquillada y un acuerdo pactado hoy, mi agresor a quedado libre. Esto es México”, señaló en sus redes sociales, donde durante el viernes por la noche y a lo largo de la madrugada del sábado relató minuto a minuto la desesperación con que vivió el proceso.
Antes, Ríos había relatado que el Juez Teódulo Pacheco Pacheco “está aprobando todos los medios de prueba falsificados y sin metodología de mi agresor los cuales pretenden hacerlo pasar por ‘enfermo’”.
“La legalidad no importa para la corrupción”, denunció.
Desde hace tres años María Elena busca justicia, pero el proceso contra los presuntos responsables del ataque en su contra que ha sido un camino muy largo. Los avances en su caso habían sido pocos y muy lentos, debido a que, asegura, su agresor tiene vínculos en el Gobierno estatal.
“Han permitido muchos amparos a Juan Antonio Vera Carrizal”, declaró el pasado mes de noviembre, cuando, hasta entonces, no había tenido una audiencia intermedia, de lo que responsabilizó a la “corrupción del Gobierno del estado de Oaxaca”.
Incluso, la saxofonista María Elena Ríos acusó en su momento que el entonces Gobernador oaxaqueño, Alejandro Murat, ha emprendido una campaña para desprestigiarla, por lo que también lo responsabilizó de lo que pudiera pasarle a ella o a su familia en un futuro, porque, dijo, “son los únicos a los que no les conviene mi existencia, a los que no les conviene lo que tenga que decir”.