Una vida ordenada, en la que las personas puedan alcanzar sus metas requiere más que fuerza de voluntad. El secreto podría esconderse en el uso que hacemos del tiempo en las mañanas.
Por R. L. Adams
Ciudad de México, 22 de octubre (SinEmbargo/HuffingtonPost).— Las rutinas se describen como conjuntos de comportamientos que se repiten con regularidad, por lo general en el mismo tiempo y lugar.
Están inmersas en el hábito. Y la mayor parte de ellas han sido parte de los rituales diarios de las personas durante años, si no es que décadas.
La calidad de vida se deriva de las rutinas. Pero de todas las rutinas, son las de la mañana, posiblemente, las más importantes. Porque lo que se hace en la mañana ayuda a marcar el ritmo del día.
Y aunque a la gran mayoría les encantaría empoderarse de las rutinas de la mañana, que pueden incluir 30 minutos de ejercicio, comer un desayuno saludable y escribir cosas por las cuales dar gracias, está claro que no siempre funciona de esa manera.
De hecho, la mayor parte de rutinas al comienzo sólo pueden ser tildadas de caóticas. Debido a que por lo general, se trata de una frenética carrera para estar listo para lo que viene.
Si la persona tiene hijos, entonces su rutina por la mañana es probablemente aún más repleta de tareas. Sin embargo, esta es la parte más importante del día. Ayuda a dar forma a la trayectoria de las vidas, define prioridades, y ayuda a determinar la verosimilitud de lograr objetivos.
Estos cinco pasos para una mejor rutina de la mañana y por ende la vida en general.
ORGANIZACIÓN
Cuando surge el caos en la mañana, por lo general, es porque falta organización. Si se está organizado, se puede dejar espacio para el desarrollo personal. Pero, cuando hace falta, sucede todo lo contrario.
Si bien, es más fácil decirlo que hacerlo. A menudo, organizarse se trata de realizar una revisión completa de los horarios, incluso, de la casa.
Estudios recientes han confirmado que el desorden crea caos. Los investigadores del Instituto de Neurociencias de la Universidad de Princeton determinaron que el desorden impide que la mente se enfoque correctamente, y por lo general, termina en frustración.
Y cuando las personas se frustran, a menudo optan por la resignación silenciosa, permitiendo que las cosas que no controlan los aborden a la ofensiva.
Específicamente, el estudio señaló lo siguiente: “Múltiples estímulos en el campo visual al mismo tiempo compiten por el mismo lugar de representación neural “.
Entonces, la persona debe empezar por la organización de su casa, una sección a la vez, para que no se sienta abrumado.
TIEMPO ADMINISTRADO
La gestión del tiempo es una habilidad que algunos podrían incluso llamar una forma de arte.
Si se está haciendo malabarismos con múltiples responsabilidades, entonces lo que se necesita es implementar un sistema eficaz de gestión del tiempo.
El más popular es el Sistema de Cuadrante, introducido inicialmente por el Presidente Dwight Eisenhower, pero más tarde popularizado por Stephen R. Covey en su libro Los 7 Hábitos de la Gente Altamente Efectiva.
En ese sistema las tareas pendientes se dividen en cuatro cuadros. En el primero se ubican las urgentes e importantes; en el segundo, las urgentes, pero no importantes; en el tercero, las importantes pero no urgentes; y en el último las que no son ni urgentes ni importantes.
Clasificar los pendientes y tareas puede dar un fuerte sentido al uso que se hace del tiempo. Y una mejor gestión del mismo puede librar a una persona del estrés y la ansiedad.
LEVANTARSE TEMPRANO
No hace falta decir que a fin de desarrollar una mejor rutina de la mañana, la persona tiene que levantarse temprano.
Quien quiera mejorar necesita entrenar su cuerpo y su mente para levantarse temprano.
¿Qué tan temprano? Eso depende del individuo. Pero debe dejarse al menos una hora de silencio antes que las cosas se pongan agitadas.
¿Cómo despertar al menos una hora antes? Se puede comenzar con incrementos de 10 minutos.
Por ejemplo, se puede configurar el despertador 10 minutos más temprano durante los tres primeros días, y luego agregar otros 10 minutos en los próximos tres días, y así sucesivamente.
Los hábitos se construyen lentamente con el tiempo. El proceso puede semejarse al del fortalecimiento de la tensión en una cuerda de guitarra o piano. Al hacer demasiadas cosas demasiado rápido, la cadena puede romperse. Pero, si se aprieta lentamente, poco a poco, la cadena se adapta. Y la mente trabaja de una manera similar.
METAS
Si se ha fijado algunas metas en su vida, entonces despertarse temprano debe convertirse en una prioridad.
Pero uno no puede fijar metas en la mente; se necesita ponerlas por escrito. El acto de escribir hace una diferencia significativa en alcanzarlas.
Establezca metas específicas, medibles, y basado en el tiempo. Vamos con algunas razones suficientes fuertes sobre por qué usted debe alcanzar dichos objetivos.
Mientras que las razones sean lo suficientemente profundas, le persona va a hacer lo que se necesita para seguir adelante. Metas fuertes le ayudarán a inspirarse a seguir adelante y poco a poco crear un impulso.
BIENESTAR
La rutina de la mañana también se debe centrar en la salud y el bienestar. Debe haber un componente de ejercicio involucrado, por muy pequeño que sea. Incluso 10 minutos de caminata rápida es suficiente para desarrollar el hábito más profundo de ejercicio con el tiempo.
Otro componente de la rutina de la mañana debe involucrar gratitud. Encuentre todo lo que pueda para estar agradecido con la vida, y anótelo en la mañana.
¿Nada que agradecer? Siempre hay cuando verdaderamente se busca.
El acto de escribir las cosas por las cuales dar gracias, incluso durante cinco minutos por la mañana ayuda a cambiar el enfoque de las carencias, por lo que sí se tiene.
Otras cosas como comer un desayuno saludable, meditar durante 15 minutos y la creación de un plan de acción masiva para el día debe ocupar un lugar central.
Pero nada de esto se puede hacerse sin despertar temprano, y en parte sin garantizarse que se duerma lo suficiente.
La construcción de una rutina de la mañana no sucede durante la noche. Pero, con el tiempo, la inserción de pequeños cambios evolucionan en algo maravilloso. El mayor obstáculo es permitir que los malos hábitos arrastren a la persona de nuevo y evitar caer en viejas costumbres.
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