María Rojo no se ve en el retiro, por el contrario desea seguir haciendo cine y mantenerse alejada de la política.
San Miguel de Allende, 22 de septiembre (SinEmbargo).– La primera actriz María Rojo fue homenajeada en el marco del Festival Internacional de Guanajuato (GIFF) por las Mujeres en el Cine y la Televisión con el premio Musas.
"Yo creo que como así el 68 abrió para que empezáramos a decirnos las mujeres compañeras, y que pudiéramos dejarnos de pelear de quién está más bonita, más guapa, quién le va quitar el marido, y todo eso, que de eso trataban las películas mexicanas; y esto es lo que adoro de mi generación, que mi generación llegó a decir: 'no es cierto'. Las mujeres pueden decir, como lo hacen en el Apando, '¿Te gusta mi chavo, pues llégale?'", sonrió Rojo mientras recibía el reconocimiento desde el jardín principal del Pueblo Mágico.
María Rojo, aseguró en un encuentro con mujeres periodistas previo a la ceremonia, que "la fuerza femenina es esperanza".
La actriz de cine, teatro y televisión con más de 50 años de trayectoria, destacó la participación de las mujeres en el panorama actual, en el que aún hay camino por recorrer:
"No acabamos de entender que el mundo ahorita está a cargo de mujeres. Las mujeres que son ministras han hecho mejor todo en la pandemia, la política, el cambio climático, la generación es la transformación. En manos de ustedes está la transformación, ¿qué podemos esperar de los presidentes que están ahora? ¿Ustedes le creerían a otro hombre? Créanles para hacer el amor", dijo.
La carrera de María Rojo inició en el teatro, para luego extenderse en 1975 en el cine con El Apando, su primer éxito en el pantalla grande y la que le abriría las puertas para filmes emblemáticos de la filmografía mexicana como Las Poquianchis (1976) de Felipe Cazals o la icónica Rojo Amanecer (1989) sobre la masacre del 2 de octubre.ç
Asegura que el cine la ha salvado y ahora este reconocimiento vuelve a despertar en ella el entusiasmo en medio del encierro por la COVID que ha paralizado momentáneamente su carrera.
"A mí me ha salvado mucho cuando me deprimo. He tenido varias depresiones, he tenido mala suerte con muertes de mis compañeros pero sí, yo siento que lo único que me salva es eso".
NI POLÍTICA NI RETIRO
La actriz recordó su paso por la política, cuando fue Diputada federal plurinominal y promovió leyes en favor del cine mexicano.
“Hice ‘La 226’ famosa, que cuando la saqué mi corazoncito se hizo así (palmpitando de emoción) porque me costó tres años, tres años y que todos los partidos la votaran porque sí logré consenso, porque si yo dejaba de hacer cine no era para no sacar nada, pero bueno la situación actual".
Aseguró que prefiere ya no meterse en ello porque afectó su salud mental y emocional.
"Ya no me meto mucho porque si tuve una depresión cuando estuve en la política porque no es mi carrera, lo hice, no temo nada, me pueden revisar de arriba para a bajo, pero si me dan una escenita en una película me importa más que cualquier otra cosa".
Por ahora la actriz está a la expectativa, terminó de hacer un filme con Fernando Bonilla titulado Amor perdido, basa en la obra de teatro Las ruinas de la memoria y pronto filmará un cortometraje del que no quiso dar detalles.
"Hay una época en la que te tienes que retirar pero todavía me sÉ aprender mis papeles y no soy mala actriz y tengo todos mis dientes. No me he hecho una liposuction no me he arreglado nada entonces digo porque mientras pueda a veces el olor de un set me cambia la vida pero sí está difícil para las jóvenes que están ahorita triunfando imagínense para mi que mucha gente ha de decir quién es María de mi corazón'".