El informe indica que algunos microplásticos encontrados en agua potable pueden provenir de sistemas de tratamiento y distribución de agua del grifo y del proceso de embotellamiento de agua.
Ciudad de México, 22 de agosto (RT).- Un exhaustivo informe publicado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) examina los potenciales riesgos para la salud humana derivados de la ingestión de microplásticos presentes en el agua potable.
Los microplásticos, pequeñas piezas de plástico que contaminan el medioambiente, se han detectado en agua marina, aguas residuales, alimentos, aire, lluvia e incluso en el agua potable (embotellada y del grifo), según el informe.
Los microplásticos ingresan en el agua potable de diversas formas, siendo la principal por medio de escorrentías o aguas que rebosan de cauces artificiales y el efluente de aguas residuales. Igualmente, lo hacen a partir de desbordamientos de alcantarillas, efluentes industriales y deposición atmosférica.
El informe indica que algunos microplásticos encontrados en agua potable pueden provenir de sistemas de tratamiento y distribución de agua del grifo y del proceso de embotellamiento de agua. El agua potable consumida por los seres humanos es tratada antes de ser distribuida, bien sea agua corriente o embotellada y, aunque estos tratamientos eliminan la mayor parte del microplásticos, no se logra su total eliminación, reza el texto.
Según el estudio, los riesgos potenciales asociados con los microplásticos se presentan de tres formas: a partir de las partículas mismas, de los químicos que los componen y de microorganismos que pueden adherirse y colonizarlas, conocidos como biopelículas.
El informe muestra, además, que los microplásticos de mayor tamaño (aquellos que miden más de 150 micras), no mayores que el diámetro de cabello, en los niveles actuales, no parecen representar un riesgo para la salud ya que podrían pasar directamente a través del cuerpo humano. Sin embargo, las partículas de plástico más pequeñas podrían pasar a través de las paredes del tracto digestivo y quedarse estancadas. Si bien los investigadores de la OMS creen que es poco probable que se acumulen en cantidades nocivas para el ser humano el informe agrega que se necesita mucha más investigación para descartar cualquier tipo de daño a la salud.
"Aunque no hay información suficiente para sacar conclusiones firmes sobre la toxicidad de las nanopartículas, ninguna información fiable sugiere que sea una preocupación", dice el informe. Sin embargo, los investigadores instan a la comunidad científica a estudiar más a fondo el impacto del consumo de microplásticos en la salud humana y hacen un llamamiento a atajar la contaminación plástica a escala mundial.