Durante la contingencia sanitaria desatada por la pandemia del nuevo coronavirus, expresó el presidente de la Coparmex, los empleadores dieron su apoyo a la propuesta de regulación del sistema de pensiones.
“Celebramos que el diálogo de las organizaciones de trabajadores y empleadores, haya derivado en una propuesta que apoye el Gobierno de México”, expresó la patronal.
Ciudad de México, 22 de julio (SinEmbargo).- La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) expresó su apoyo a la Reforma de Pensiones presentada esta mañana por el Presidente Andrés Manuel López Obrador, empresarios y miembros de las Cámaras legislativas del país.
La agrupación empresarial aseguró que desde inicios de 2019 planteó la necesidad de reformar el sistema de retiro en el país, con el fin de entregar una pensión digna para el sector laboral mexicano. “Celebramos que el diálogo de las organizaciones de trabajadores y empleadores, haya derivado en una propuesta que apoye el Gobierno de México”, expresó la Coparmex en un mensaje en redes sociales.
“Nos permitirá garantizar un retiro digno a los mexicanos”, aseguró la Coparmex en una rueda de prensa que dio después de la presentación de la reforma estructural.
Desde inicios de 2019, la @Coparmex ha postulado la necesidad de una #ReformaPensionaria que garantice una pensión digna para los mexicanos. Celebramos que el diálogo de las organizaciones de trabajadores y empleadores, haya derivado en una propuesta que apoye el @GobiernoMX pic.twitter.com/jtLtivNXkS
— Coparmex Nacional (@Coparmex) July 22, 2020
Gustavo de Hoyos, presidente de la Coparmex, reconoció “el gran compromiso de los empleadores”, que durante la contingencia sanitaria desatada por la pandemia de la COVID-19, “el momento mas complejo que han vivido las empresas en mucho tiempo” dieron su apoyo a la propuesta de regulación del sistema de pensiones.
Recalcó que pese a que las aportaciones patronales pasarán del 5.15 por ciento actual al 13.8 por ciento, esta será una modificación gradual que se dará en un periodo de ocho años, con el fin de que no represente un golpe para el sector empresarial.
La Coparmex no espera una afectación en los precios al alza ni un impacto en la evolución salarial.
La tan anunciada reforma que propone el Gobierno de México al Sistema de Ahorro para el Retiro (SAR) recibió la aprobación del mayor sindicato (la CTM, que pertenece al PRI) obrero y del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), la mayor agrupación de la iniciativa privada. Además contó con el visto bueno de los dos grupos mayoritarios, en el Senado y la Cámara de Diputados.
Esta mañana, en la conferencia del Presidente López Obrador, el titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, Arturo Herrera, dijo que el sistema actual tiene deficiencias como el bajo nivel de aportaciones que genera tasas de reemplazo insuficientes; ahora se elevará esa tasa.
“Había dos problemas centrales”, dijo Herrera; el primero, el ahorro y las aportaciones no eran suficientes que resultaban en una pensión mínima. El segundo problema es que México sigue siendo “un país con un alto grado de informalidad”.
Detalló que “se va a elevar la tasa de reemplazo de los trabajadores en un promedio de 40 por ciento y los trabajadores que menos recibían, que tenían hasta cinco salarios mínimos, van a aumentar de un 31 por ciento a un 54 por ciento su tasa de reemplazo”.
Habrá un aumento de 70 por ciento en lo que se aportaba a los trabajadores cuando se retiraban; se ajusta el límite para una pensión, de 25 a 15 años, y esta cifra subirá gradualmente para reconocer a los que hayan laborado gran parte de su vida y no tengan el mínimo para tener una pensión garantizada.
“A partir de esta reforma, pasarán dos cosas. No se afectan los derechos de los trabajadores, por eso la edad mínima para recibir la pensión siguen siendo 60 años. Pero se necesitan únicamente 15 años de cotización y el monto de la pensión será del monto ahorrado”, puntualizó el Secretario de Hacienda.
También señaló que las son aportadas hoy por tres entres: trabajadores, empresarios y Gobierno, que da su parte a través del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE ), 700 mil millones de pesos al año, y vía Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), más de 300 mil millones al año.
La aportación del ahorro de los trabajadores no cambia. La aportación del Gobierno será una cuota social sobre todo para trabajadores de menores ingresos. La parte de los patrones se eleva.
En cuanto al aporte del Estado mexicano, la cuota social se va a recomponer. El monto será idéntico, pero irá dirigido fundamentalmente a trabajadores con hasta cuatro salarios mínimos. “Hay dos ideas detrás de esto: la primera es que hay que proteger a los trabajadores que ganan menos. Pero la segunda es que hasta en cinco salarios mínimos está el 80 por ciento de trabajadores en México”, añadió el Secretario.