El Gobernador Eruviel Ávila Villegas llega al fin de su ciclo sin haber descifrado cómo reducir la violencia. En la víspera de la entrega de estafeta, el próximo 16 de septiembre, la violencia se ha salido de control en el Estado de México; el fin de semana registraron 21 muertos por hechos relacionados.
El Partido Revolucionario Institucional se mantuvo en el poder el pasado 4 de junio, esta vez con el voto de tres de 10 electores. La desatención a las causas de la violencia, en la entidad con mayores índices de delitos en el país, marcó a una administración en la que también desapareció del discurso oficial la presencia del crimen organizado, indicaron especialistas.
Ciudad de México, 17 de julio (SinEmbargo). —El Gobernador del Estado de México Eruviel Ávila Villegas termina su gestión sin haber cumplido su promesa de llevar seguridad a la ciudadanía. Especialistas acusaron al mandatario del Partido Revolucionario Institucional (PRI) de callar los problemas heredados por su antecesor, Enrique Peña Nieto.
“Ha llegado el momento de evaluar los resultados del estado de Eruviel Ávila, si habría que resumir su fracaso en la política pública, el mayor rubro puede ser la seguridad pública. De principio a fin el Gobierno de Eruviel Ávila se ha distinguido por tener problemas en el manejo que representa la inseguridad”, dijo Osmar León, de la organización México Suma.
El Estado de México tuvo una semana marcada por incidentes violentos. Al menos 21 muertos se registraron entre el viernes y el sábado.
Una ola que ha dado paso al terror, en Polotitlán, fueron hallados con signos de tortura y el tiro de gracia. En Nezahualcóyotl el cuerpo de un hombre apareció con una manta alusiva a la disputa de plazas. Y en el basurero de ese municipio el cuerpo de un pepenador fue hallado.
Por su parte, en Tecámac fueron hallados los cuerpos de una mujer y un hombre en una casa donde se presume hubo una fiesta. Asimismo, en la la localidad se hallaron los cuerpos de tres hombres en las colonias Mi Champán, San Francisco Cuautliquixca y Santa María Ajoloapan.
“Una de las actitudes del crimen es generar el miedo y enfrentamientos, de esta forma domina los espacios. Pues están siendo los benefactores de la venta del narcotráfico, extorsiones, secuestros, etcétera ”, dijo René Jiménez Ornelas, investigador de la Instituto de Investigaciones Sociales de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), sobre la aparición de estos cuerpos.
Sin embargo, de quién perpetúa estos crímenes poco se habla.
En septiembre del 2011 un recién llegado a la gubernatura, Eruviel Ávila, se reunió con el entonces Presidente Felipe Calderón Hinojosa. Del encuentro, la Presidencia refirió que el Gobernador había reiterado su compromiso de colaborar contra el crimen organizado.
Pero con el transcurso de su mandato, Ávila no sólo limitó sus pronunciamientos sobre las disputas de cárteles, sino de cualquier alusión a su antecesor en el cargo, hoy Presidente Enrique Peña Nieto.
Se obvia porque es un discurso más alentado por la política, en términos de no querer asumir el tamaño de problema. Se supondría que se ha dejado crecer y que hay responsabilidad del Gobernador anterior Enrique Peña Nieto. Estos fenómenos no crecen de un día para el otro”, dijo Édgar Cortez Morales, investigador del Instituto Mexicano de Derechos Humanos y Democracia A.C.
En noviembre del 2014 el entonces titular de la Secretaría de Seguridad, Salvador Neme Sastré confirmó al rotativo El Universal la presencia de cuatro cárteles en la entidad: La Familia Michoacana, Caballeros Templarios, Cártel Jalisco Nueva Generación, Los Zetas.
“La presencia del crimen está a la vista, enfrentamientos en municipios, Ecatepec, por ejemplo. Y en la Ciudad de México Mancera nos dice que no, pero estamos viendo que sin llegar a las cifras del Estado de Méxic , sí se da una cifra fuerte de homicidios. ¿Quién nutre los narcomenudista [en la capital]?”, dijo Ornelas.
De acuerdo con los entrevistados, así es como se explica una parte de que las cifras de violencia que indican que no haya descendido.
En el primer semestre del año en el Estado de México se registraron mil 26 carpetas por homicidio doloso; un total que representó seis y 29 carpetas de investigación menos que en el primer semestre del 2016 y 2015, de forma correspondiente.
Ávila Villegas cierra el primer semestre del último año de su gobierno con 309 carpetas de investigación por homicidio más que Enrique Peña Nieto, quien en el 2011 terminó el mismo periodo con 717 carpetas por homicidio doloso.
Los feminicidios en el que Ávila no logro descensos considerables, dijo León. El año pasado el Gobierno del Estado de México sumó 65 carpetas de investigación por feminicidio. Un conteo que dejó de publicar en el 2017.
En el 2015 se registraron 51 carpetas de investigación por este delito; en el 2014 fueron 61; en 2013 hubo 40; en el 2012 sumaron 46; y 2011 inauguró el mandato con 43.
¿Por qué se duplicaron los asesinatos?
“No hubo un cambio de partido, pero tampoco de renovación en términos de la estrategia y de acción. El gobernador ha seguido los mismos procesos, no ha habido muchas novedades que puedan plantear un cambio de resultados, si sigues haciendo las mismas cosas, pues evidentemente terminas teniendo un empeoramiento con el paso del tiempo”, dijo Cortez.
Pero también debido al sigiloso seguimiento de las cifras de Peña Nieto, planteó Ornelas, un cuidado que continuó en la presidencia.
El Gobierno federal no ha hecho mención clara del deterioro de la seguridad, pese a que mayo ha sido el mes con más asesinatos intencionales en el registro del Sistema Nacional de Seguridad Pública, iniciado en 1997.
ERUVIEL DEJA MAYOR POBREZA
La falta de combate a la pobreza también explica el repunte de las cifras de incidencia delictiva, dijo León: “La inseguridad, no se podría entender sólo analizando la violencia”.
En el 2012 el Gobierno de Eruviel Ávila reportó a un 15.09 por ciento de la población debajo de la línea de bienestar mínimo, o lo que es igual a que estas personas no logren pagar por alimentos que les den lo indispensable. Este porcentaje pasó a 20.1 en el 2014.
“Nuestra predicción, porque todavía el Coneval no nos muestra 2016, es que vamos a estar a en un 22 por ciento de personas debajo de bienestar mínimo en los datos 2016”, dijo León, de acuerdo con una proyección hecha por México Suma.
De la misma manera en que hubo más personas debajo de la línea del bienestar mínimo, también hubo más debajo de la línea del bienestar en esos años.
En el 2012 era el 53.1 por ciento de la población estaba debajo de esta línea de bienestar, en el 2014 fue del 58.9 por ciento: “Nuestro cálculo nos da 60.5 por ciento, para el 2016”, previó León.
Conforme aumentó la pobreza aumentaron los problemas de inseguridad.
“Más pobres se hicieron pobres extremos. Eso genera deserción escolar, y jóvenes ingresando a las filas del crimen organizado, desesperación en hogares donde habría que llevar de comer y la única alternativa es robar, vamos a encontrar que los salarios mal pagados con menor valor”, dijo León.