La prueba de coronavirus se realizó utilizando una muestra fecal para que los animales no tuvieran que ser sometidos a anestesia, como fue el caso de la tigresa malaya.
Nueva York, 22 de abril (EFE).- El virus del COVID-19 se extiende en el Zoo del Bronx puesto que, además del tigre afectado hasta el momento, los funcionarios del centro de animales salvajes han certificado que otros cuatro tigres han sido contagiados, así como tres leones africanos.
El pasado 5 de abril, la institución que gestiona el zoo neoyorquino, la Wildlife Conservation Society, informó que un tigre había dado positivo de coronavirus, en lo que fue la primera infección de COVID-19 conocida de un animal en Estados Unidos.
Se trataba de una tigresa malaya de 4 años, si bien ya se explicó que su hermana Azul, dos tigres siberianos más y tres leones africanos habían desarrollado una persistente tos seca, a la espera de análisis.
Los funcionarios del zoológico informaron hoy que finalmente otros cuatro tigres y tres leones africanos dieron positivo para COVID-19. Esa prueba se realizó utilizando una muestra fecal para que los animales no tuvieran que ser sometidos a anestesia, como fue el caso de la tigresa malaya.
Los ocho felinos están bien y los funcionarios del zoológico dicen que se comportan normalmente, comen bien y su tos se ha reducido considerablemente.
"Nos aseguraremos de que cualquier conocimiento que obtengamos sobre COVID-19 contribuirá a la comprensión continua del mundo sobre este nuevo coronavirus", dijeron las autoridades del Zoo. "Las pruebas de estos felinos se realizaron en laboratorios veterinarios y los recursos utilizados no se tomaron de los que se utilizan para las pruebas en humanos".
Todavía se cree que los animales fueron infectados por un miembro del personal que estaba infectado asintomáticamente o que tuvo contacto con los animales antes de desarrollar síntomas.
Precisamente hoy ha trascendido que otros dos felinos, en este caso dos gatos domésticos del estado de Nueva York, dieron positivo de COVID-19, convirtiéndose en los primeros casos de mascotas detectados en Estados Unidos.
Ambos animales viven en zonas distintas del estado de Nueva York, epicentro actual de la pandemia no solo en EE.UU sino a nivel mundial; presentan problemas respiratorios leves, y se espera que se recuperen pronto, según un comunicado de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC) y los Laboratorios de los Servicios Nacionales de Veterinaria del Departamento de Agricultura.