El compromiso de las sombras forma parte de la selección Ahora México del Festival Internacional de Cine Universidad Nacional Autónoma de México (FICUNAM). El documental de Sandra Luz López muestra la importancia del duelo después de la muerte de un ser querido. Una despedida que muchos no han tenido la oportunidad de experimentar desde la llegada del coronavirus, sin velorios ni funerales.
Ciudad de México, 22 de marzo (SinEmbargo).– La relación de los mexicanos con sus muertos está impregnada a lo largo de su historia, y por supuesto el proceso del duelo es parte de esta cultura que se ha ido transformado con los años. El documental El compromiso de las sombras, de la directora Sandra Luz López que es parte de la selección FICUNAM, explora esta respuesta emocional ante la partida de un ser querido.
Sandra Luz, también antropóloga, viajó a Costa Chica en el estado de Guerrero y Oaxaca por allá del año 2004 cuando en la zona aún no arreciaba la violencia. A su llegada se sorprendió con la gran comunidad de afromexicanos que habitan la región. Entre ellos conoció a Doña Cata Noyola, una mujer que la inspiró y que falleció tres años después, lo que significó un duro golpe para cineasta.
“Mi acercamiento con la Costa Chica tiene que ver más con las personas, con la lazos afectivos que yo he construido a lo largo de estos años ahí, y como estudiante de antropología. Yo soy oaxaqueña, y yo no sabía que había personas afrodescendientes en mi país”, explica en entrevista con SinEmbargo.
El motor para acercarse cada vez más fue la de visibilizar a esta comunidad que, justo hace unos días, fue censada por primera vez por Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
“Yo no sabía que en mi estado había afromexicanos o una comunidad amplia de afroamericanos. Tiene que ver con esta necesidad de conocer, de visibilizar esta parte de nuestra cultura y que sea vista en la historia con ‘H’ mayúscula”.
En 2007 volvió a viajar a esta región, pero para asistir la velorio de Doña Cata. En ese momento tan triste conoció a Lizbeth, el personaje principal de su documental.
“Yo estaba muy triste. Estaba llorando en el velorio, y Lizbeth se acercó y me puso su mano en mi hombro y me dijo ‘llora todo lo que tengas que llorar, tranquila’, pero no la vi, sólo la escuché. Yo conocí a Lizbeth cuando ella me consoló. Cuando salgo al patio donde se estaban llevando a cabo los nueve días de rezos, la escucho cantar y la escucha rezar, y fue como un consuelo a mi corazón”.
Lizbeth es una mujer trans conocida en San Nicolás, Guerrero, por su labor de llevar el proceso de duelo con las familias que han perdido a un ser querido. Desde el velorio y a través de los nueves días de rezos, ella realiza una serie de rituales que ayudan a las familias a encontrar un consuelo.
El compromiso de las sombras sigue cada uno sus pasos como guía y acompañamiento de las familias en duelo.
“La forma, el sentimiento, y al amor con que el que hace esas despedidas creo que es muy entrañable y nos ayuda mucho a los que estamos ahí. Siento que tiene que ver con eso, como ella misma lo dice: ‘mi compromiso con el pueblo’. Es un gran compromiso que tiene. Ella dice que no se puede ir de ahí porque si se muere una persona ‘¿quién la va enterrar?’”.
Su labor se vuelve única. Sus cantos penetran hasta el alma de los dolidos y cada uno de sus rituales permiten participar a la familia entera en una despedida que irán asimilando día a día.
En una forma personal, Sandra Luz vio que al grabar la labor de Lizbeth, que alguna vez la consoló, la ayudaría a sobrellevar la muerte reciente de su padre en 2016. La antropóloga y cineasta decidió tomar la cámara para estar cerca de los rituales de despedida y poder sentir y mirar de cerca lo que sucede en cada uno de ellos.
La ausencia de una despedida cuando un ser querido muere es algo que muchas personas han tenido que soportar a un año de la llegada de la COVID a nuestro país. Muchas de ellas han llevado hasta las puertas del hospital a un familiar enfermo sin saber que ya no lo verían más y que ya no podrían decirle un adiós.
Sin velorios ni funerales se ha vuelto más difícil para las familias asimilar la partida y lidiar con el dolor.
“No dimensiono la lectura que tiene hoy esta película después de vivir una pandemia y después de que en este país haya tantas personas que se fueron, y de las que no pudimos despedirnos como estamos acostumbrados. Siento que esta película puede ser, o mi deseo sería, que fuera como un consuelo para esas despedidas o acompañar a esas despedidas, pero creo que debemos hacer nuestros propios rituales. Tendremos que construir desde otro lugar estas despedidas porque son necesarias. Nos han negado los rituales a partir de esta pandemia, entonces creo que hay que repensarlo, reimaginarlo, porque es muy necesario la parte del duelo, porque justo yo hice esta película porque no me puede despedir de mi papá. Necesitaba también esta sensación en la que uno se despide de la gente que quiere”.
De Lizbeth sabemos poco en este documental, pero de su labor aprendemos mucho. El compromiso de las sombras es una mirada hacia estos rituales de despedida tan importantes para hallar consuelo.
“La intención es poder llevar al espectador a eso momento, a esos rituales, a acompañar esta despedida y que tú puedas mirar la muerte con una dimensión más profunda y compleja desde Lizbeth”.
El compromiso de las sombras forma parte de la selección Ahora México del Festival Internacional de Cine Universidad Nacional Autónoma de México (FICUNAM), y estará disponible de forma gratuita en línea.
