Directivos de ambas empresas celebraron que el nuevo Gobierno esté impulsando los pagos digitales instantáneos a través CoDi, un mecanismo de códigos QR en teléfonos inteligentes que los grandes bancos mexicanos deberán ofrecer a partir de septiembre.
Acapulco (México), 22 mar (EFE).- Directivos de las compañías Visa y Mastercard coincidieron este viernes en la necesidad de desarrollar nuevas tecnologías que permitan expandir las transacciones digitales y erradicar los pagos en efectivo en el mundo.
“El efectivo no va a desaparecer si nosotros no contribuimos a construir una infraestructura de pagos digitales”, dijo el presidente de Visa Internacional, Ryan McInerney, en una charla en la 82 reunión anual de la banca mexicana.
Confesó que su “mayor miedo” es que la industria financiera “no aproveche las oportunidades” que ofrece el comercio electrónico hoy en día, e hizo un llamado para facilitar los pagos a través de las aplicaciones de compra por internet.
El que previamente fue directivo de la firma financiera JPMorgan Chase aseveró que la clave está en “la experiencia del usuario”, puesto que el uso de los mecanismos digitales de pago debe ser “claro e intuitivo” para que los puedan usar personas de todas las edades.
En una charla posterior, el presidente de Mastercard, Ajay Banga, también compartió las preocupaciones expresadas por McInerney e hizo hincapié en que los adultos mayores “creen que los marginamos” con las nuevas tecnologías.
“Se sienten excluidos y eso son malas noticias. Tenemos que incluirlos y encontrar el equilibrio correcto”, aseveró Banga sobre las innovaciones tecnológicas del sector.
El presidente de Mastercard puso como ejemplo el caso de Suecia, donde solo el 5 por ciento de las compras por menudeo se realizan con pagos en efectivo, mientras que la media global supera el 80 por ciento, incluidos países muy desarrollados tecnológicamente como Alemania.
Por eso, aseveró que la eliminación del efectivo no es una cuestión de “desarrollo económico” de los países, sino que se debe a factores culturales y a la aplicación de políticas públicas dirigidas a este fenómeno.
“La mayoría de gobiernos de dan cuenta de que si reduces los pagos en efectivo y aumentas las transacciones digitales, se pueden distribuir beneficios sociales de manera más eficiente”, dijo el presidente de Mastercard.
El que también fue también fue vicepresidente de la Cámara de Comercio Internacional y asesor del presidente estadounidense Barack Obama (2009-2017) opinó que estas transacciones permiten “que menos gente meta sus dedos, haya menos intermediarios y menos robos”.
Precisamente, el nuevo Gobierno mexicano, liderado por Andrés Manuel López Obrador, está emprendiendo una cruzada para que las políticas sociales se entreguen de manera directa a los beneficiarios, evitando la corrupción de intermediarios.
En ese sentido, ambos directivos celebraron que el nuevo Gobierno esté impulsando los pagos digitales instantáneos a través CoDi, un mecanismo de códigos QR en teléfonos inteligentes que los grandes bancos mexicanos deberán ofrecer a partir de septiembre.
“Veo con gran optimismo la nueva administración y el enfoque para la eliminación del efectivo. Aplaudo el trabajo del CoDi como un gran ingrediente para reducir el efectivo”, señaló el directivo de Visa.
Por su parte, Banga admitió que las tecnologías de pagos digitales tienen que afrontar retos en cuanto a la ciberseguridad, pero aseveró que los códigos dinámicos QR que aplicará e CoDI con el mecanismo “más seguro”.
En el caso concreto de México, McInerney también identificó como un gran reto la gran informalidad laboral que existe y puso como ejemplo los taqueros de la calle, a quienes habría que mostrar que “es más fácil que la gente pague sus productos” con el uso de teléfonos inteligentes.
Estos 21 y 22 de marzo se celebra en la ciudad de Acapulco la 82 reunión anual de la banca mexicana, cuyo programa está centrado en las nuevas tecnologías aplicadas en el sistema financiero.
También contará con la presencia del presidente Andrés Manuel López Obrador, quien el año pasado acudió al encuentro como candidato presidencial sin despertar demasiadas pasiones entre los asistentes debido a sus ideas izquierdistas.