Las críticas alcanzaron su apogeo cuando Francisco ofició un servicio religioso en los jardines del Vaticano con estatuas de mujeres desnudas embarazadas, que habían sido un regalo para el Papa. Sectores conservadores denunciaron que las figurillas de la “Pachamama” eran paganas; según el Vaticano, simbolizan la vida y la fertilidad.
Por Nicole Winfield
CIUDAD DEL VATICANO, 21 de octubre (AP) .— Ladrones se robaron estatuillas amazónicas simbólicas de fertilidad de una iglesia del Vaticano y las tiraron al río Tíber, justo cuando se celebra una conferencia convocada por el Papa Francisco para debatir el tema amazónico.
El video del robo en la iglesia Santa María de Traspontina fue subido a internet y recibió elogios por parte de sectores conservadores. El Secretario de Comunicaciones del Vaticano, Paolo Ruffini, lo calificó de “un juego” que poco conduce al diálogo.
Incluso antes del inicio del sínodo sobre el Amazonas, los sectores más conservadores y tradicionalistas de la Iglesia lo condenaron por considerarlo una exhibición herética del paganismo, en vista del respeto que le otorga a las culturas indígenas y su espiritualidad.
Las críticas alcanzaron su apogeo cuando Francisco ofició un servicio religioso en los jardines del Vaticano con estatuas de mujeres desnudas embarazadas, que habían sido un regalo para el papa. Sectores conservadores denunciaron que las figurillas de la “Pachamama” eran paganas; según el Vaticano, simbolizan la vida y la fertilidad.
Las estatuas fueron colocadas en una capilla al lado de la iglesia de la Traspontina, ubicada a poca distancia de la Plaza de San Pedro y que ha sido el punto de encuentro para las tribus autóctonas que participan en el sínodo.
Nadie se atribuyó oficialmente el acto de vandalismo, pero un autor estadounidense de tendencia conservadora, Taylor Marshall, emitió un comunicado y tuiteó un video del hecho.
“Les informo con gran júbilo: los ídolos de la Pachamama que profanaron a la iglesia de Santa María Traspontina han sido lanzadas al río Tíber como acto de obediencia hacia Nuestro Señor Salvador Jesucristo en reparación de Su Sagrado Corazón herido por el pecado”, tuiteó Marshall.
Francisco convocó el sínodo para analizar maneras de cuidar mejor al Amazonas y sus pueblos, víctimas de pobreza, explotación y pérdida de viviendas por la minería y la tala ilegal.
Uno de los temas más controversiales en el sínodo es si los hombres casados pueden ejercer como curas y si las mujeres pueden ejercer como diáconos, ante una escasez clerical tan grave que muchas comunidades pasan meses sin escuchar misa.
Las propuestas han encolerizado a los sectores tradicionalistas, que consideran el sínodo un esfuerzo de los progresistas para transformar siglos de doctrina católica, según la cual los sacerdotes deben ser célibes. Temen que Francisco esté usando el sínodo para ocultar otras intenciones, y que cualquier relajamiento de las normas del celibato en el Amazonas podría contagiarse a lugares como Alemania, donde también han surgido pedidos de permitir que ministren hombres casados.
El sínodo concluirá este fin de semana y los obispos aprobarán una serie de propuestas que deberán pasar a consideración del Papa Francisco. El pontífice entonces podrá decidir si hacer suyas algunas de esas propuestas en un futuro documento.