De acuerdo con testigos de la matanza que dejó 14 víctimas mortales en Minatitlán, Veracruz, “Becly Ryn” era el blanco de la agresión. Se llamaba Julio César González Reyna, y la relación con su bar “La esquina del Chakal” es una de las líneas de investigación del caso.
Medios locales reportaron que las sepulturas de las víctimas ya iniciaron en la entidad, la mayoría de estas personas serán enterradas en el cementerio municipal de la colonia Hidalgo luego de una misa realizada en la iglesia Cristo Rey.
Por Ignacio Carvajal
Minatitlán, Veracruz, 21 de abril (SinEmbargo/Blog Expediente).– Glamorosa, de fiesta en fiesta, con muchas amistades y siempre en el ambiente, hablando de la importancia de la humildad, así era la vida de “Becly Ryn“, transgénero asesinada el viernes en el ataque armado en un salón de fiestas de la colonia Obrera en Minatitlán, Veracruz.
“Becly Ryn” habría sido ubicada por la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) como el blanco del ataque. Sujetos armados llegaron a buscarlo, en un comunicado la dependencia señaló que en el lugar habrían sido asesinados siete hombres, cinco mujeres y un menor de edad, además, tres hombres y una mujer resultaron heridas.
“Becly Ryn“, era conocida como una famosa trans del sur de Veracruz y su nombre ha sido difundido en medios de comunicación por su supuesta búsqueda por parte del grupo del grupo armado durante la celebración de una una fiesta de cumpleaños.
Entre las víctimas se encontraba Santiago, un niño de un año de edad cuyo padre fue asesinado, y su madre lucha contra los estragos causados por cinco balas.
El menor de edad cumplió años el pasado 17 de abril y murió por un balazo en la carótida, arterias que llevan sangre desde el corazón hacia el cerebro.
A las 6 de la mañana del sábado no se conocía la identidad de “Becly Ryn”. Para esa hora se contaban cinco mujeres entre las 14 víctimas.
QUIÉN ES BECLY RYN
“Becly Ryn”, famosa trans de Minatitlán se ganó la fama y el cariño de diversos sectores populares. Legalmente Julio César González Reyna, vivía para las fiestas, los eventos sociales y la compañía de sus amistades. Participaba en eventos de modelaje y concursos.
Pero en lo que invertía más tiempo, y resultaba su pasión, era en el cuidado de su bar “La Esquina del Chakal”, ubicado en el corazón de su pueblo, Minatitlán.
En el negocio se realizaban presentaciones y bailes de hombres, espectáculos que convocaba a intérpretes incluso de otros estados de la república o a mujeres trans inspiradas en los artistas del momento.
El espacio era popular entre la comunidad LGBT de la entidad.
Quienes lo conocieron lo ubican con una persona seria y trabajadora. De carácter fuerte, quien no permitía que nadie lo agrediera, y lo describen como alguien que siempre estaba dispuesto apoyar a la comunidad cuando se trataba de discriminación.
Desde hace algunos años se había sometido a tratamientos hormonales para cambiar su aspecto físico. Entre las mujeres trans de la región era respetada por los notables cambios en su cuerpo.
Amigos cercanos contaron que desconocían que tuviera problemas con algún grupo de la delincuencia. Aunque medios locales han señalado versiones versiones sobre la posible venta de sustancias prohibidas en su negocio.
Otra versión apunta a que un grupo le habría cobrado “derecho de piso” por su bar, mismo que se habría negado a pagar, incluso señalan que se trataría de una venganza.
Otro pasaje lamentable en la vida de Becly Ryn se presentó en septiembre del 2014: Ivonne Alejandra González, de 34 años, su hermana, fue privada de la libertad al salir de una fiesta de quince años.
La joven dijo a sus familiares que acudiría a un antro llamado “Bora Bora” y desde entonces no se supo más de ella. Días después, en avanzado estado de putrefacción, fue encontrada en un camino rumbo a la zona rural de Cosoleacaque con huellas de violencia sexual.
“Otro más, no puedo con esto, otro más no, por favor. Esto no…”, gritaba un familiar de “Becly Ryn” y de su hermana Ivonne al recordar a sus parientes asesinadas.
De momento la Fiscalía General del Estado dijo en un comunicado que no se soslayarían ninguna línea de investigación y que cuentan con 18 entrevistas a testigos. De las 13 víctimas, siete presentaban impactos de bala en el cráneo, lo que confirmaría lo dicho por testigos de la escena del crimen, que algunos los agresores habrían regresado para asegurarse de asesinar a sus víctimas.