De acuerdo con la Coordinadora Morelense de Movimientos Ciudadanos, Graco Ramírez desvió recursos a través de un préstamo que solicitó al Congreso del estado de Morelos, el cual fue autorizado en tan solo cinco días y con irregularidades administrativas. Gerardo Becerra, vocero de la misma organización, aseguró en entrevista que la solicitud del crédito impidió que Morelos gozara de una estrategia integral de seguridad para combatir delitos como robo, extorsión y secuestro.
Por José Luis Montenegro
Ciudad de México, 21 de abril (RT).– El 10 de mayo de 2013, el Gobernador de Morelos, Graco Ramírez, envió un oficio al Congreso del estado en el cual solicitaba un crédito para la entidad y sus 33 municipios por casi 2 mil 300 millones de pesos (cerca de 125 millones de dólares). La petición únicamente fue justificada con las solicitudes de cuatro municipios que deseaban integrarse a dicho crédito.
Autorizado en tan solo cinco días, la contratación del crédito tuvo serias irregularidades, entre ellas la violación de la Ley de deuda pública del estado de Morelos, debido a que el financiamiento del crédito debió destinarse a obras de inversión pública y no al pago de gasto corriente (tales como sueldos, salarios o cualquier otro concepto de consumo de bienes y servicios del estado).
Meses después de autorizado el préstamo de más de 2 mil 300 millones de pesos, Graco Ramírez modificó las prioridades en materia de inversión pública y presentó nuevas necesidades, como la construcción del nuevo recinto legislativo, lo que implicaba ampliar la suma del crédito en 2.806 millones de pesos, es decir, más de 500 millones de pesos adicionales.
La Coordinadora Morelense de Movimientos Ciudadanos (CMMC) le otorgó a RT en Español copia fiel de cada uno de los documentos anteriormente mencionados. Por su parte, Gerardo Becerra, vocero de la misma organización, aseguró en entrevista que la solicitud del crédito impidió que Morelos gozara de una estrategia integral de seguridad para combatir delitos como robo, extorsión y secuestro.
"Graco Ramírez endeudó al estado por esta inmensa cantidad de dinero [2.806 millones de pesos] y dicha acción no se vio reflejada en el desarrollo económico del estado. Al contrario, en los últimos años Morelos ha permanecido en los niveles más bajos de crecimiento y también de inseguridad. Todos los días somos 'nota roja' a nivel internacional", afirmó Becerra.
De acuerdo con una denuncia interpuesta por la CMMC ante el Congreso estatal, el actual Gobernador de Morelos desvió mil 853 millones de pesos (casi 100 millones de dólares) por "ejercicio de obras y acciones improcedentes". Asimismo, un informe presentado por la Secretaría de Hacienda de Morelos, del cual RT tiene copia, confirma que el mandatario "dañó seriamente la economía estatal debido al mal manejo de los recursos económicos".
Por su parte, Gerardo Becerra asegura que "el espíritu del crédito –aprobado según el decreto 936 de la Ley de deuda pública del estado–habla de que el préstamo se estableció con fines productivos para ayudar a los municipios pertenecientes al estado, sin embargo el Gobernador los malversó".
Tan solo en 2013 y 2014, Graco Ramírez destinó parte del préstamo para pagar sueldos, bonos y aguinaldos del Instituto de Educación Básica del Estado de Morelos. Dichos conceptos representan casi 209 millones de pesos (cerca de 12 millones de dólares) y son considerados 'gasto corriente', lo cual funge como una clara violación a la Ley de deuda pública estatal.
En ese mismo año, en 2014, los diputados locales del Partido de la Revolución Democrática (PRD) desmantelaron la Auditoría Superior de Fiscalización y destituyeron a su titular, Luis Manuel González Velázquez, quien acusó públicamente al actual Gobernador de Morelos de planear su despido por revelar dichos desvíos.
En entrevista con RT, González Velázquez aseguró que "al Congreso le interesaba removerme, precisamente porque la legislatura vigente quería proteger a Graco Ramírez. El Gobernador dijo que no me tenía miedo, pero resulta que sí, en los hechos le dio miedo que se revelara su mala actuación".
En el informe elaborado por el ex auditor González Velázquez también se anexó un listado de obras y proyectos aprobados con el crédito de 2 mil 806 millones de pesos que, hasta ahora, no se han ejecutado, y a las cuales se les asignó parte del préstamo millonario. Por ejemplo, la Secretaría de Obras Públicas de Morelos requirió un programa de cómputo para el control de las obras públicas, con un presupuesto de casi un millón 500 mil pesos (casi 80 mil dólares), el cual no ha sido concluido.
El presidente de la Comisión de Hacienda del Congreso de Morelos, Alberto Mújica, ha declarado en diversos medios de comunicación que existen proyectos ejecutivos desde 80 mil hasta 3 o incluso 4 millones de pesos. "Si la obra se realiza, estamos hablando de que el proyecto ejecutivo es un gasto de inversión, pero si la obra no se inició, entonces hablamos de un desvío de recursos", aseguró.
Los proyectos ejecutivos fueron pagados con recursos del crédito y ascienden a casi 20 millones de pesos, y fueron presupuestados en 2011 y 2012, años en que Graco Ramírez aún no había asumido el cargo como Gobernador, es decir, el mandatario se dedicó a pagar o abonar deudas o proyectos atrasados.
El crédito de 2.806 millones de pesos del estado de Morelos será refinanciado por diferentes instituciones bancarias durante 18 años. Se estima que BBVA Bancomer cobre, además de la suma inicial, intereses por 660 millones de pesos (más de 35 millones de dólares); y Banamex, por casi 719 millones de pesos (casi 40 millones de dólares). Sumando el monto del crédito solicitado y los intereses que este generó, los ciudadanos de Morelos tendrán que pagar más de 4 mil millones de pesos (cerca de 212 millones de dólares).
En noviembre de 2016, la CMMC expidió una solicitud de juicio político al Congreso de Morelos para que destituyeran al actual Gobernador del estado. Hasta ahora, no se ha dado una explicación clara de la utilización de los recursos del crédito millonario.