El Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal criticó la postura del Gobierno actual, pues consideró que México es el país con más ciudades violentas como resultado de “políticas fallidas aplicadas en lo que va del siglo”, siendo la de López Obrador “la peor”, ya que no hay un Gobierno en el mundo que adopte como política de seguridad “dar manos libres a los criminales”.
Ciudad de México, 21 de febrero (SinEmbargo).- El Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal publicó su ranking anual de las 50 ciudades más violentas del mundo, en donde México aparece como el país con más ciudades en el recuento: 17. Colima figura como la urbe más violenta del mundo por sexto año consecutivo.
De acuerdo con la organización, la tasa de 181.94 homicidios por cada 100 mil habitantes de Colima es la tercera mayor registrada desde que en 2009 se inició la investigación de las 50 ciudades (de más de 300 mil habitantes) más violentas del mundo. El récord de la tasa de homicidios lo tiene Ciudad Juárez, Chihuahua, cuando en 2010 alcanzó los 229 homicidios por cada 100 mil habitantes.
Asimismo, en 2022 de las diez ciudades más violentas del mundo, nueve fueron mexicanas: Colima, Zamora, Ciudad Obregón, Zacatecas, Tijuana, Celaya, Ciudad Juárez, Uruapan y Acapulco. En el recuento total son 17 de las 50 ciudades más violentas.
La distribución de las 50 ciudades del ranking 2022 es de la siguiente manera: en México, 17; en Brasil, 10; en Estados Unidos, siete; en Colombia, seis; en Sudáfrica, cuatro; en Honduras, dos; y hay una de Puerto Rico; una de Haití; una de Ecuador; y una de Jamaica.
En el informe del Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal se señaló que el que México sea el país con más ciudades violentas, es el resultado de “políticas fallidas aplicadas en lo que va del siglo” porque ha consistido en “tolerar la violencia de los grupos criminales y la existencia misma de sus milicias privadas, que desafían el monopolio del Estado sobre la violencia”.
“Pero la peor de esas políticas es la vigente, la del Presidente Andrés Manuel López Obrador: ‘abrazos, no balazos’. No existe antecedente en el mundo de un Gobierno nacional -como hoy ocurre en México- [que] haya adoptado como política de seguridad pública la de dar manos libres a los criminales para que ejerzan violencia y encima lo proclame abiertamente”, señala la organización.
Asimismo, el Consejo compara la “estrategia” de “abrazos, no balazos” con la política de Guatemala, El Salvador y Brasil, quienes “no han seguido políticas complacientes con los criminales”.
“Las ciudades de Guatemala y El Salvador siguen fuera del ranking. Brasil tiene cada vez menos ciudades y con tasas más bajas. Las tasas de ciudades hondureñas siguen a la baja, mientras que en los años 2011 a 2014 San Pedro Sula estuvo en el primer lugar con elevadas tasas de homicidio”, argumentó la organización.
Para sacar la tasa de violencia, se tomó en cuenta que las ciudades en cuestión debían tener 300 mil o más habitantes, según datos demográficos de fuentes oficiales. De igual forma, los homicidios debían corresponder a las definiciones universalmente aceptadas de los homicidios dolosos u homicidios intencionales o muertes por agresión y que además de ser datos oficiales se pudieran constatar en Internet.