La fuga en el ducto de Tula (estado de Hidalgo) a Salamanca (estado de Guanajuato), fue localizada en una zona remota de Teocalco, municipio de Tlaxcoapan, a 10 kilómetros de Tlahuelilpan, informó el Gobierno estatal.
Una patrulla del Ejército Mexicano apoyado por la Policía Federal cercó el lugar para impedir que se aproximara los habitantes de esta localidad al tiempo que personal de Petróleos Mexicanos (Pemex) hacía trabajos de reparación.
Ciudad de México, 21 de enero (EFE/SinEmbargo).– Una fuga en un ducto de combustible fue descubierta y cercada hoy por el Ejército mexicano en las proximidades de Tlahuelilpan, donde viernes pasado una explosión de combustible ha dejado al momento 91 muertos y 52 heridos.
La fuga en el ducto de Tula (estado de Hidalgo) a Salamanca (estado de Guanajuato), fue localizada en una zona remota de Teocalco, municipio de Tlaxcoapan, a 10 kilómetros de Tlahuelilpan, informó el Gobierno estatal.
Una patrulla del Ejército Mexicano apoyado por la Policía Federal cercó el lugar para impedir que se aproximara los habitantes de esta localidad al tiempo que personal de Petróleos Mexicanos (Pemex) hacía trabajos de reparación.
#Hidalgo | FUGA DE COMBUSTIBLE EN TEOCALCO ⚠️
Al momento se registra fuga de hidrocarburo en Teocalco cerca de las vías del tren, el chorro del combustible supera los 7 metros de altura.
En el lugar ya resguardan Ejército, Policía Federal, Estatal y Seguridad Física de @Pemex pic.twitter.com/OGywJMguY8
— MARFECA (@MARFECA_HIDALGO) January 21, 2019
Un video difundido en redes sociales muestra la fuga de combustible a lo lejos, mientras que al menos cuatro vehículos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y dos patrullas vigilan el lugar.
El combustible alcanzó una altura de cuatro metros y poco a poco fue perdiendo fuerza hasta ser controlada por el personal de la empresa estatal.
La tarde del pasado viernes 18 de enero, una toma clandestina colocada en un ducto de Tlahuelilpan explotó mientras los pobladores recogían combustible con baldes y bidones, hecho que ha dejado ya un total de 91 víctimas fatales y 52 heridas, tras el fallecimiento este día de varios de los ingresados en hospitales.
Los habitantes de Tlahuelilpan ignoraron las advertencias de un grupo de militares que había llegado tras ser informados del ducto reventado y se dedicaron a sustraer la gasolina, que luego de unas dos horas explotó.
El Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, quien llegó al poder el 1 de diciembre pasado, comenzó un combate frontal al robo de hidrocarburos a través de los ductos de Pemex, que genera pérdidas millonarias para la compañía.
Para tal fin, se reforzó con miles de agentes la seguridad en los ductos y se transportó más gasolina con pipas, lo que ha causado una crisis de desabastecimiento en 10 estados del país, con estaciones de servicio cerradas y compras de pánico.
El director de Pemex, Octavio Romero Oropeza, informó esta mañana en conferencia de prensa que el municipio de Tlahuelilpan lo cruzan cuatro sistemas de transportes de ductos. Y ahí se repararon seis tomas clandestinas en 2016; 38 en 2017; 23 en 2018; tres en lo que va de 2019. Suman, en los últimos años, un total de 70 tomas clandestinas.
Precisó también que, desde 2016 a la fecha, el 80 por ciento de las tomas clandestinas se han concentrado en Hidalgo, Puebla, Guanajuato, Jalisco, Veracruz, Estado de México y Tamaulipas.
LA CIFRA DE MUERTOS SUBE A 91: FAYAD
Omar Fayad, Gobernador de Hidalgo, actualizó el número de víctimas por la explosión de la toma clandestina en Tlahuelilpan, el cual se elevó a 91, luego de que un paciente perdiera la vida en el Hospital Magdalena de las Salinas y otro en el Hospital 20 de Noviembre de la Ciudad de México.
En entrevista con diversos medios nacionales, el mandatario de la entidad reportó que otras 52 personas siguen hospitalizadas para continuar con su atención médica. Algunas de ellas, dijo, presentan un estado de salud grave, por lo que no descarta que en las próximas horas pueda volver a incrementar la cifra de muertos.
Asimismo, aseguró que en la zona del estallido fueron hallados al menos 68 restos humanos, de éstos, 10 ya fueron identificados y otros ocho se entregaron a sus familiares. Ante dicha situación, los demás se cometerán a pruebas de ADN con la finalidad de saber quiénes son, pero el proceso podría llevar meses.