Kabul, 20 nov (EFE).- La organización no gubernamental Human Rights Watch (HRW) denunció hoy que “miles” de refugiados afganos están siendo deportados de Irán, donde están sufriendo abusos que violan el compromiso internacional de Teherán con los asilados.
“Las fuerzas de seguridad iraníes deportan a miles de afganos de manera sumaria, sin darles la oportunidad de probar su derecho a permanecer en Irán o de solicitar asilo”, subrayó HRW en un comunicado sobre un informe publicado también este miércoles.
La ONG recoge historias de cabezas de familia expulsados tras años residiendo legalmente en el país a los que no se permitió siquiera informar a sus parientes o de menores abandonados en la frontera pidiendo limosna para tomar un autobús hacia Afganistán.
El subdirector de HRW en Oriente Medio, Joe Stark, criticó que Teherán deporta a estos ciudadanos a un país “donde hay un peligro real y serio”, dado el deterioro de la seguridad a medida que finaliza el repliegue de las tropas de la OTAN.
“Afganistán es tal vez más peligroso hoy que cuando muchos de estos refugiados huyeron por primera vez. Este no es el momento para que Irán los mande a casa”, argumentó el activista.
Stork reconoció que las autoridades iraníes “han cargado con la losa de una de las poblaciones de refugiados más grandes del planeta durante más de tres décadas”, pero instó a Teherán a “respetar los estándares internacionales” en el trato a este colectivo.
Según Human Rights Watch, entre los abusos sufridos por los refugiados afganos figuran “maltratos físicos, detenciones en condiciones inhumanas e insalubres, pago forzoso por transporte, trabajos forzados y reclusión en campos de deportados”.
Durante la ocupación soviética de Afganistán de la década de 1980 y en los turbulentos años de conflicto civil posteriores, millones de afganos emigraron de su país en dirección sobre todo a los vecinos Pakistán e Irán.
En noviembre de 2012 el Gobierno iraní aprobó una regulación para poder expulsar a 1,6 millones de extranjeros “residentes ilegales en Irán” antes de finales de 2015.
De acuerdo con HRW, esta normativa daba pie además a facilitar el regreso voluntario de unos 200 mil afganos con estatus de refugiado y a poner fin a esa condición que tenían otros 700.000 ciudadanos de ese país. EFE