México registró sólo en julio 2 mil 980 homicidios dolosos, una cifra 3.9 por ciento mayor a los 2 mil 867 casos del sexto mes del año.
Por Martí Quintana
México, 20 ago (EFE).- En plena reactivación económica, México reportó un alza en los homicidios dolosos en julio con 2 mil 980 casos en un mes marcado por la ola de violencia que vivió el estado de Guanajuato previo a la detención de José Antonio “N”, conocido como el “Marro”.
“Hemos logrado, no ha sido fácil, muy forzadamente una línea de contención en el homicidio doloso. Llevábamos ya cuatro cifras ligeramente a la baja al hilo pero el mes de julio sube” el número de asesinatos, dijo en conferencia de prensa el Secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Alfonso Durazo.
Según los datos oficiales presentados este jueves, el mes de julio registró 2 mil 980 homicidios dolosos, una cifra 3.9 por ciento mayor a los 2 mil 867 casos del sexto mes del año.
Si se comparan los 20 mil 176 homicidios dolosos de enero a julio de 2019 frente a los 20 mil 494 del mismo lapso de este 2020 el alza es de 1.6 por ciento. Lo que evidenciaría, según las autoridades, una “desaceleración de crecimiento” frente a periodos anteriores.
Ello llevó al ministro de Seguridad a hablar, una vez más, de una “línea de contención” establecida, luego de que 2019 se convirtiera en el año más violento para México desde que se tiene registro con 34 mil 608 homicidios dolosos y mil 012 feminicidios.
Además en marzo, cuando comenzó el confinamiento –si bien no obligatorio– por la pandemia, se reportaron 3 mil 033 asesinatos y fue el mes más violento desde que Andrés Manuel López Obrador asumió la Presidencia de México en diciembre de 2018.
“Ya no se sigue llenando el vaso pero este sigue lleno. No hemos logrado revertir el problema, sigue creciendo, aunque marginalmente”, dijo a Efe Juan Carlos Montero, investigador del Tecnológico de Monterrey y especialista en seguridad.
En términos epidemiológicos, el especialista en seguridad definió la situación de violencia actual como una “meseta”, donde persisten los crímenes sin llegar a dispararse los niveles.
LOS FEMINICIDIOS
En perspectiva, en el mes de junio el Gobierno mexicano reportó 2 mil 867 homicidios una caída mensual frente a las 2 mil 921 del mes anterior, pero un aumento de más del 35 por ciento en los feminicidios con 101 víctimas.
En el séptimo mes del año el efecto fue contrario, si bien aumentaron los homicidios dolosos, los asesinatos de mujeres por razón de género pasaron de 101 a 74.
Pero este tipo de crímenes sigue al alza al pasar de 537 casos de enero a julio de 2019 a 566 en el mismo periodo del presente año.
Además, este dato es visto por suspicacias por expertos y ONG, que llevan meses alertando de un posible auge de la violencia familiar debido al confinamiento por la pandemia de coronavirus. Y por ende, más violencia contra la mujer.
¿UN PAÍS MÁS SEGURO?
Aunque la violencia más mortífera continúa al alza, las autoridades reflejan otro tipo de delitos que han caído sustancialmente en lo que va de año.
Sin ir más lejos, el secuestro se redujo el 40.2 por ciento interanual de enero a julio, el robo se desplomó un 22.5 por ciento, las lesiones dolosas un 14.7 por ciento, la violación un 8.2 por ciento y la extorsión otro 8.2 por ciento.
Pero para Montero, si bien el dato es positivo se deben tener en cuenta dos factores: la cifra negra y el confinamiento.
“Esta tendencia es consecuencia de la cuarentena, cuando la actividad económica se redujo sustancialmente”, apuntó el experto en seguridad.
En los meses de abril y mayo, el país canceló todas las actividades productivas no esenciales e instó a la gente a quedarse en casa para enfrentar la pandemia de coronavirus, que hoy suma casi 60 mil muertos y más de 537 mil muertos.
Además, puso en duda los datos oficiales a la luz de recientes eventos muy mediáticos como varios secuestros en el occidental estado de Jalisco.
“Quizás hay una cifra negra muy amplia”, remarcó el experto.
Es por ello, que vaticinó que en los próximos meses van a resurgir todos estos tipo de delitos, azuzados además por la crisis económica que empujaría a más gente a delinquir.
En cambio, los delitos más graves, como los homicidios, se mantendrán estables porque la guerra entre cárteles continuó pese a la cuarentena.
EL EFECTO GUANAJUATO
El central estado de Guanajuato lleva meses siendo el epicentro de la violencia en el país debido, en buena medida, a una cruenta guerra entre el cártel Santa Rosa de Lima y el Cártel Jalisco Nueva Generación, quienes chocan a su vez con las fuerzas de seguridad.
En cifras absolutas, Guanajuato suma 2 mil 695 homicidios dolosos entre enero y julio. Y en el séptimo mes del año fueron 402 crímenes.
“La explicación. Julio fue un mes muy tenso, derivado fundamentalmente de todas las acciones de seguridad pública en el estado de Guanajuato que concluyeron con la detención del líder del cártel de Santa Rosa de Lima, que es la organización criminal principalmente generadora de violencia en el estado”, dijo Durazo.
El pasado 2 de agosto, tras semanas de una creciente presión por parte de las fuerzas de seguridad, se logró la detención del capo José Antonio, alias “El Marro” y líder del Cártel Santa Rosa de Lima.
Según cifras esgrimidas hoy, la violencia ya ha caído en el estado y son “alentadoras”, pues se acumulan 132 homicidios en la primera quincena del octavo mes del año. Aunque el propio Durazo instó a “no cantar victoria”.
Para Montero, el panorama no es tan positivo para Guanajuato, pues consideró que este polo industrial mexicano puede vivir en las próxima semanas un recrudecimiento de la violencia por la sucesión del Marro y posibles nuevos enfrentamientos entre los dos cárteles que ocupan la región.