El acusado, arrestado sin derecho a fianza, era un ex trabajador de una planta petrolífera de Colorado que, según su propia confesión, el pasado 13 de agosto asesinó a su mujer en un “ataque de rabia”, luego de que ésta hiciera lo mismo a las dos hijas al interior del domicilio, ubicado en Frederick.
Denver (Estados), 20 de agosto (EFE).- La Fiscalía de Colorado (Estados Unidos) acusó hoy a Chris Watts de matar a su esposa embarazada y a sus dos hijas, por lo que enfrenta hasta nueve cargos criminales, tres de ellos de asesinato en primer grado y uno por terminación ilegal de un embarazo.
La acusación se da poco más de una semana después de que un amigo de la familia reportara la desaparición de Shanann Watts, de 34 años, y de las hijas Bella, de 4 años, y Celeste, de 3, lo que llevó a las autoridades a una investigación y al arresto de Watts el pasado miércoles como principal sospechoso.
El acusado, arrestado sin derecho a fianza, era un ex trabajador de una planta petrolífera de Colorado que, según su propia confesión, el pasado 13 de agosto asesinó a su mujer en un “ataque de rabia”, luego de que ésta hiciera lo mismo a las dos hijas al interior del domicilio, ubicado en Frederick, una ciudad de 8 mil 600 habitantes unos 50 kilómetros al norte de Denver.
De acuerdo al parte policial, los cuerpos fueron hallados por agentes y perros policiales la semana pasada en dos emplazamientos diferentes dentro de un terreno de extracción de petróleo en el que trabajaba Watts hasta su despido, ocurrido el mismo día en que fue arrestado.
Según el testimonio del acusado, Watts mantenía una relación extramarital con una compañera de trabajo y había hablado con su esposa de separarse.
Rourke enfatizó que las investigaciones continúan, por lo que se negó a brindar más detalles del caso, excepto que las niñas habían fallecido antes que la madre, probablemente un día antes, cuando Shanann Watts estaba fuera de Colorado por razones laborales.
La pareja, que enfrentaba dificultades financieras desde 2015, cuando se declaró en bancarrota, había preparado una fiesta para el sábado pasado con motivo del anuncio a sus amigos y familiares del sexo del bebé en gestación.
El fiscal Rourke indicó que los cuerpos de las niñas presuntamente estuvieron “durante varios días en un tanque lleno de petróleo crudo”.
“Se debe tener en cuenta que estas acusaciones son solamente eso, acusaciones y cargos formales. Watts sigue siendo inocente hasta que se demuestre lo contrario”, declaró el fiscal, quien reveló que su oficina ha asignado tres investigadores para este caso.
El acusado comparecerá el martes ante un juez federal en la ciudad de Greeley.
Rourke tiene poco más de 60 días para determinar si pedirá la pena de muerte, un recurso raramente empleado en Colorado, estado que lo usó sólo una vez en los últimos 40 años.
Medios internacionales han puesto atención a la forma en la que el sujeto y su esposa compartían sus vidas en redes sociales.