En Reino Unido, una joven de 20 años abusó de un menor de edad al que cuidaba, aunque negó la acusación, una prueba de ADN de su bebé sacó a relucir la verdad.
Reino Unido, 20 de mayo (La Opinión).- Una joven de 20 años, originaria de Berkshire, en Reino Unido, llamada Leah Cordice ha sido condenada esta semana a 2 años y medio en prisión tras encontrarla culpable de haber violado de un menor de edad al que cuidaba y además, embarazarse de él.
Según lo informado por Daily Mail, fue en enero de 2017 cuando un amigo de la propia Leah, quien en ese entonces también era menor de edad, interpuso una demanda en su contra luego de enterarse de que había abusado sexualmente del menor de la casa en la que trabajaba como niñera.
En ese entonces, la víctima tenía 13 años y narró ante un juez cómo su niñera, un día, ingresó a su habitación mientras jugaba Xbox, le bajó el pantalón y le realizó sexo oral.
POCO TIEMPO DESPUÉS, CORDICE SE CASÓ Y TUVO UN HIJO.
12 meses más tarde, en el verano de 2018, el menor al que cuidaba se presentó ante las autoridades para dar más detalles de los abusos sexuales a los que fue sometido por parte de su niñera; la mujer fue citada a declarar pero negó todas las acusaciones; incluso dijo que fue el menor quien la había violado en repetidas ocasiones.
El juez la obligó a hacerse una prueba de ADN, así como a su hijo, y este comprobó que, en realidad, el bebé era del niño al que cuidaba y no de su marido, lo cual le costó el divorcio.
Un jurado dictaminó que Leah era culpable de abuso sexual, recibiendo así dicha condena acusada por múltiples incidentes de actividad sexual con un niño.