Con el anuncio de Trump se cancelarán, a partir del 20 de mayo, los aranceles a las importaciones de acero y aluminio originarios de México, impuestos en junio de 2018, bajo la Sección 232 de su Ley Comercial.
En junio del pasado año entraron en vigor aranceles a aceros planos, lámparas, piernas y paletas de puerco, embutidos, preparaciones alimenticias, manzanas, uvas, arándanos y diversos quesos, entre otros.
México, 20 de mayo (EFE).- El Gobierno de México celebró el levantamiento de los aranceles a su acero y aluminio por parte de Estados Unidos, que se hizo efectivo este lunes, y publicó un decreto oficial para a su vez cancelar las medidas recíprocas vigentes desde junio de 2018.
“El Gobierno de Estados Unidos ha emitido la proclamación para exceptuar de aranceles al aluminio y acero mexicanos a partir del 20 de mayo”, indicó la titular de la Secretaría de Economía (SE), Graciela Márquez, en Twitter.
En un boletín, la SE aplaudió la proclamación “hecha por el Presidente de EU (Donald Trump) para eliminar aranceles a importaciones de acero y aluminio provenientes de México”.
Con el anuncio de Trump, dado a conocer a finales de la pasada semana, se cancelan a partir del 20 de mayo los aranceles a las importaciones de acero y aluminio originarios de México, impuestos en junio de 2018, bajo la Sección 232 de su Ley Comercial.
En reciprocidad a esta decisión, la Secretaría de Economía publicó un decreto para eliminar las represalias impuestas el 5 de junio de 2018 a ciertos productos estadounidenses.
En junio del pasado año entraron en vigor aranceles en decenas de productos como aceros planos (lámina caliente y fría, incluidos recubiertos y tubos diversos), lámparas, piernas y paletas de puerco, embutidos, preparaciones alimenticias, manzanas, uvas, arándanos y diversos quesos, entre otros.
Estos gravámenes se aplicaban hasta “un monto equiparable al nivel de afectación” de los aranceles al acero y al aluminio mexicano en Estados Unidos.
Según la SE, el acuerdo de eliminación de aranceles entre México y Estados Unidos anunciado el viernes 17 de mayo fue posible gracias a la “firme postura” que mantuvo en todo momento Márquez de “no aceptar cuotas como solución y de que la única opción aceptable para México era la eliminación de la medida”.
Asimismo, consideró que la estrategia de “represalias” puesta en marcha por la Secretaría de Economía a ciertos productos estadounidenses entre los que destacaban los agrícolas, fue “determinante” para que los tomadores de decisión en Estados Unidos “presionaran a la administración Trump”.
Se espera que esta suspensión arancelaria permita avanzar hacia la ratificación del nuevo tratado comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).