Las Empresas Productivas Subsidiarias, Pemex Transformación Industrial y Pemex Fertilizantes, no sólo no fueron rentables, sino que destruyeron valor económico en su operación, por lo que la consolidación de Pemex como empresa productiva del Estado es un proceso de mediano y largo plazo que requiere de la revisión integral de los planes y las estrategias a seguir, concluyó la Auditoría Superior de la Federación.
Ciudad de México, 20 de febrero (SinEmbargo).– Petróleos Mexicanos (Pemex) pagó un total de 516 millones 674 mil pesos para las reparaciones permanentes de tomas clandestinas en diferentes ductos durante 2017, un año donde el robo de combustible registró una cifra récord de 10 mil 363 tomas.
De acuerdo con el Auditor Superior de la Federación, David Rogelio Colmenares Páramo, las Empresas Productivas Subsidiarias, Pemex Transformación Industrial y Pemex Fertilizantes, no sólo no fueron rentables, sino que destruyeron valor económico en su operación.
En la presentación de la Tercera Entrega de Informes Individuales y del Informe General Ejecutivo Fiscalización Superior de la Cuenta Pública 2017, dijo que en el caso de Pemex Transformación su costo de ventas fue superior en 4.6 por ciento a sus ingresos debido a la subutilización de su capacidad instalada y a que registró pérdidas netas por 44 millones 599 mil 75 pesos, que se explican por el incremento, en 851 por ciento, del número de tomas clandestinas, que pasaron de mil 323, en 2011 a 12 mil 581, en 2018.
“A lo anterior habría que agregar que sólo el pasivo laborar de Pemex Transformación fue mayor 0.3 veces a sus activos totales”, dijo.
La Auditoría Superior de la Federación (ASF) detectó que Pemex Logística contrató, por medio de adjudicaciones directas, los servicios de tres empresas: Bufete Constructor América, S.A. de C.V, Ram-100 del Sureste, S.A. DE C.V, y Técnica de Remediaciones Ambientales Sistemáticas y Avanzadas, S.A. de C.V, para la reparación de ductos que fueron dañados por la proliferación de tomas clandestinas
El primer contrato (PLOG-003/2016) se adjudicó a la empresa Bufete Constructor América por un monto total de 14 millones 889 mil pesos para el desarrollo de ingeniería y bajado de tubería en el Gas 48″ en el cruce con el río Misantla (Veracruz).
De acuerdo con la ASF, al cierre de 2017 se habían ejercido 14 millones 889 mil pesos; y a la fecha de la revisión (junio de 2018) la obra se encontraba concluida y finiquitada.
El seguro contrato (PLOG-018/2016) se otorgó a la empresa Ram-100 del Sureste por un monto de 46 millones 917 mil para la atención de 30 reparaciones permanentes de tomas clandestinas en diferentes ductos y DDV del sector de ductos Nuevo Pemex./AD.
La ASF señaló que al cierre de 2017 se habían ejercido los 46 millones 917 mil de pesos; y a la fecha de la revisión (junio de 2018) la obra se encontraba concluida y finiquitada.
El tercer contrato (DOPA-OP-SCAR-ST-GTMSD-A-15-16) lo recibió la empresa Técnica de Remediaciones Ambientales Sistemáticas y Avanzadas por un monto de 454 millones 868 mil pesos para la atención a la emergencia por impacto al medio ambiente con motivo del derrame de diésel y gasolina derivado de una toma clandestina descontrolada en el poliducto de 12″ Minatitlán-Villahermosa, ocurrido el 24 de agosto de 2014 en el Ejido Pico de Oro, Cuarta Sección, en el municipio de Huimanguillo, Tabasco.
La Auditoría constató que al cierre de 2017 se habían ejercido los 454 millones 868 mil pesos; y a la fecha de la revisión (junio de 2018) la obra se encontraba concluida y finiquitada.
LA CAÍDA DE PEMEX
Por lo que corresponde a Pemex Fertilizantes, éste tuvo pérdidas por 21 millones 174 pesos (79.7 por ciento) de su patrimonio inicial, principalmente, por el deterioro contable de los activos adquiridos de Fertinal y ProAgro que tenían más de 14 años sin operar.
En cuanto a Pemex Exploración y Producción, si bien en 2017 generó valor económico, éste se redujo en 72.1 por ciento, respecto de 2016, y la empresa no fue rentable debido a la carga fiscal. Asimismo, la ASF determinó que Pemex Exploración y Pemex Transformación se encontrarían en situación de quiebra técnica, si fuesen totalmente autónomas e independientes.
La fiscalización de la Reforma Energética en materia de hidrocarburos, implementada en el periodo 2013- 2017, evidenció que los resultados observados por la ASF no reflejaron un avance en el cumplimiento de sus fines, dado que la inversión en el sector se redujo 59.7 por ciento en 2017, al igual que la extracción de crudo, ya que en el periodo 2013-2017, disminuyó 6.2 por ciento en promedio anual.
La ASF también detectó que se incrementaron significativamente los precios de los combustibles a los usuarios finales, y no se cuenta con datos fidedignos respecto del daño ambiental.
En cuanto a la infraestructura, ésta decreció 14.6 por ciento, al pasar de 9 mil 379 pozos en 2013 a 8 mil 8 en 2017; de igual forma destaca la disminución en 13.7 por ciento de los campos de producción; 47.4 por ciento, en terminales de distribución; 18.2 por ciento, en complejos petroquímicos; 35.2 por ciento en unidades de servicios a pozos, y 37.6 por ciento en equipos de perforación y reparación de pozos.
Lo anterior, expuso la ASF, provocó que la extracción de crudo, en el periodo 2013-2017, disminuyera a una tasa media anual de 6.2 por ciento, al pasar de 921.6 a 711.2 millones de barriles.
“La consolidación de Pemex como empresa productiva del Estado es un proceso de mediano y largo plazo que requiere de la revisión integral de los planes y las estrategias a seguir, así como de las correcciones pertinentes en la gestión de largo plazo de las actividades petroleras”, concluyó David Rogelio Colmenares Páramo, titular de la ASF.