En los últimos dos años, el Tesoro ha sancionado a más de 300 objetivos por su participación en actividades de tráfico de drogas en cada etapa de la cadena de suministro, desde cabecillas importantes de los carteles hasta laboratorios bajo del radar, redes de transportación y suministradores de químicos.
Ciudad de México, 19 de noviembre (SinEmbargo).— La crisis de opioides que azotó a Estados Unidos en la década de los noventa tiene nombres y apellidos, según señaló este martes el Departamento del Tesoro, al anunciar sanciones contra una red de nueve mexicanos, actualmente miembros del Cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG), pero que tuvieron un papel histórico en el tráfico de fentanilo, heroína, otras drogas mortales y lavado de dinero.
Entre ellos se encuentran los hermanos Iván Atzayacatl Castañeda Meza, Giovanni Castañeda Meza y Juan Carlos Castañeda Meza, precursores del tráfico de opioides a finales del siglo pasado, y que posteriormente exportaron fentanilo al territorio norteamericano.
“La acción de hoy subraya nuestro compromiso de señalar a las redes de proveedores y facilitadores que permiten el flujo ilícito de drogas letales hacia los Estados Unidos, poniendo en peligro las vidas de nuestros ciudadanos”, dijo el Subsecretario interino del Tesoro para Terrorismo e Inteligencia Financiera, Bradley T. Smith.
“Estados Unidos, en estrecha coordinación con nuestros socios del Gobierno mexicano, seguirá aprovechando todas las herramientas disponibles para desmantelar estos esquemas criminales y proteger a nuestras comunidades”, agregó. Algunos de los individuos sancionados hoy jugaban un papel destacado en las etapas previas de crisis de opioides en los Estados Unidos, las cuales sentó las bases a la crisis moderna de fentanilo para los Estados Unidos.
El CJNG es una organización de tráfico violenta establecida en México responsable por una importante porción del fentanilo y otras drogas traficadas en los Estados Unidos.
En los últimos dos años, el Tesoro ha sancionado a más de 300 objetivos por su participación en actividades de tráfico de drogas en cada etapa de la cadena de suministro, desde cabecillas importantes de los carteles hasta laboratorios bajo del radar, redes de transportación y suministradores de químicos. El año pasado, la Secretaria Yellen lanzó la Fuerza de Choque Contra Fentanilo del Tesoro, la cual trae pegado la experiencia y los recursos del Tesoro en el combate al crimen financiero, liderado por la Oficina de Terrorismo e Inteligencia Financiera (TFI, por sus siglas en inglés) y el Servicio de Impuesto de Estados Unidos, Investigaciones Criminales (IRS-CI, por sus siglas en inglés).
La Secretaria Yellen también se ha involucrado con socios internacionales para luchar contra el tráfico de fentanilo, incluso durante su viaje a México el año pasado. En abril de 2024, Secretaria Yellen también anunció el lanzamiento de un intercambio con la República Popular de China para aumentar cooperación en combatir el lavado de dinero asociado con el tráfico de drogas y otros crímenes.
¿QUÉ ES LA CRISIS DE OPIODES EN LOS ESTADOS UNIDOS?
Según el informe final de la Comisión estadounidense bipartidista para combatir el tráfico de opioides sintéticos, creada por el Congreso y publicada por la Corporación RAND en febrero de 2022, el aumento del uso indebido ilícito de fentanilo y otros opioides sintéticos y las muertes relacionadas tiene su origen en la aprobación por parte de la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos del analgésico opioide de venta con receta OxyContin en 1995.
A partir de mediados de la década de 1990, el OxyContin y otros opioides de venta con receta se comercializaron falsamente como tratamientos no adictivos para el dolor. Como resultado, la dependencia y la adicción a los opioides de venta con receta aumentaron drásticamente en Estados Unidos. Esta dependencia creó una oportunidad de mercado para que los traficantes y otros delincuentes la explotaran, ya que las personas con trastornos por consumo de sustancias, incapaces de seguir obteniendo medicamentos de venta con receta, a menudo recurrían a la heroína.
En particular, los traficantes de heroína, como los “Hermanos Bonques” del municipio de Xalisco, Nayarit, fueron de los primeros en explotar con éxito el mercado de adicción a los opioides en Estados Unidos en la década de 1990. Xalisco se encuentra cerca de la costa del Pacífico, donde crecen bien las amapolas.
En menos de una década, los mercados ilegales de drogas de Estados Unidos, que alguna vez estuvieron dominados por opioides recetados y heroína desviados, se saturaron con opioides sintéticos fabricados ilegalmente, como el fentanilo. Los opioides sintéticos son más baratos y fáciles de producir que la heroína y no requieren temporadas de cultivo, lo que los convierte en alternativas atractivas para los delincuentes que los mezclan con heroína y otras drogas ilícitas o los introducen en píldoras falsificadas, a menudo mortales.
El Departamento del Tesoro indica que hoy los cárteles mexicanos como el CJNG y el Cártel de Sinaloa son responsables de una proporción significativa del fentanilo y otras drogas mortales que se trafican a los Estados Unidos. Los cárteles mexicanos fabrican fentanilo en laboratorios clandestinos con productos químicos precursores provenientes en gran parte de la República Popular China.
¿QUIÉNES SON LOS HERMANOS BONQUES?
El Departamento del Tesoro sostiene que los “Hermanos Bonques” son un influyente grupo de traficantes de heroína y cocaína de Nayarit, liderado por Roberto Castellanos Meza (Castellanos Meza) (alias Beto Bonques) e integrado por los hermanos Iván Atzayacatl Castañeda Meza, Giovanni Castañeda Meza y Juan Carlos Castañeda Meza.
Como miembros del CJNG, los “Hermanos Bonques” son socios cercanos de los designados por la OFAC, Rubén Oseguera Cervantes (alias “El Mencho”) y Audias Flores Silva (alias “El Jardinero”), líder del CJNG y comandante regional del CJNG de Nayarit, respectivamente. Los “Hermanos Bonques” estaban entre las prominentes familias de traficantes de heroína de Xalisco, México, que se habían abierto camino hacia California a principios de la década de 1990 y, por lo tanto, estaban bien posicionados para explotar un mercado estadounidense expandido por los medicamentos recetados.
Castellanos Meza es dueño de campos de opio en las montañas de Nayarit y produce heroína. Tal como los “Hermanos Bonques” tienen gran influencia sobre la heroína traficada en el área Xalisco y son abastecedores de la mayoría las familias traficantes de heroína establecidas en Xalisco, así como una cantidad importante de la cadena de distribución de heroína que operan en ciudades en todo los Estados Unidos.
Además, la heroína de los “Hermanos Bonques” están relacionadas con el tráfico de cocaína. Castellanos Meza ha estado relacionado en la mediación de ventas de cocaína y la transportación de cocaína desde Colombia a través de aviones y botes.
En noviembre de 2007, Iván Atzayacatl Castañeda Meza y Juan Carlos Castañeda Meza fueron relacionados en un altercado con las autoridades mexicanas que estaban respondiendo a un llamado de un presunto laboratorio de drogas clandestino en Xalisco, Nayarit. El altercado escaló hacia un tiroteo que resulto en el arresto de Iván Atzayacatl Castañeda Meza, la hospitalización de Juan Carlos Castañeda Meza y el decomiso de heroína.
OFAC designó a Roberto Castellanos Meza, Giovanni Castaneda Meza, Ivan Atzayacatl Castaneda Meza y Juan Carlos Castaneda Meza de conformidad a la O.E. 14059 por haber comprometido o intentado comprometerse en actividades u operaciones que hayan materialmente contribuido, o constituyan un significante riesgo material para contribuir a la proliferación internacional de drogas ilícitas o sus medios de producción.
IMPEDIR FACILITADORES DE FENTANILO
El 15 de noviembre de 2023, un Gran Jurado de la Corte de Distrito estadounidense de Colorado fincó cargos contra Navarro Quezada, con cargos en 108 delitos, incluyendo múltiples cargos relacionados a la distribución de más de 3.240 gramos de fentanilo ente el 3 de abril de 2023 y el 14 de noviembre de 2023.
Otros cargos de Navarro Quezada incluyen la distribución de heroína, metanfetaminas y cocaína, así como lavado de ganancias provenientes de fentanilo y otras drogas. De acuerdo con la acusación, miembros relacionados en la conspiración movieron ganancias de drogas de Colorado a Navarro Quezada en México a través de trasferencias, usando diferentes nombres y direcciones para conciliar sus identidades.
