Este próximo 21 de noviembre, Venezuela tendrá unas elecciones masivas en el país, en medio de críticas por transparencia electoral y una oposición dividida.
Caracas, 19 de noviembre (RFI).– Este domingo se eligen en Venezuela 23 gobernaciones, 335 alcaldías, además de legisladores regionales y concejales. Son unas elecciones que generan dudas sobre la transparencia electoral y la unidad de la oposición.
MEJORES CONDICIONES
Se trata de los primeros comicios de una lenta recuperación del camino electoral, con los principales partidos opositores participando en la contienda luego de cinco años optando por la abstención como modo de protesta.
El candidato opositor a la gobernación del estado de Lara por la Mesa de la Unidad Democrática, Luis Florido, dijo que aún queda un largo camino por recorrer, pero reconoce que hay mejoras en las condiciones electorales.
“Mi jefe electoral ha sido el jefe de la MUD durante muchos años. Él me decía ‘Luis, de verdad, hay mejores condiciones en muchos aspectos’, del punto de vista de la dinámica electoral, de la información, de la arquitectura electoral, de lo que significa además la presencia de los fiscales. Ahora, hay otros temas que todavía están por verse: los coordinadores de los centros de votación siguen siendo funcionarios del CNE, y casi siempre han sido militantes del PSUV”, explicó Florido.
¡Votar para Avanzar! El pueblo venezolano que salga a sufragar el domingo #21Nov, votará por la Paz, la democracia y por Venezuela. Vamos a ejercer nuestro derecho al sufragio con fe, optimismo, alegría y esperanza por la nueva etapa de prosperidad que viene. pic.twitter.com/VQq2gmQmno
— Nicolás Maduro (@NicolasMaduro) November 20, 2021
La jornada está siendo guiada por una autoridad electoral escogida este año y que incluye a dos opositores entre sus cinco directivos, parte de la llamada reinstitucionalización del voto en Venezuela que también incluye la presencia de observadores internacionales de la Unión Europea, el Centro Carter y de una misión de expertos de Naciones Unidas.
Durante los meses previos se ha denunciado abuso de poder y uso de recursos públicos por parte de los candidatos del oficialismo, desequilibrio en los medios de comunicación del Estado, inhabilitaciones de candidatos y especialmente de disidentes del chavismo, así como decisiones del Consejo Nacional Electoral que favorecerían al sector que encabeza Nicolás Maduro.
OPOSICIÓN DIVIDIDA
Eugenio Martínez, especialista en temas políticos y miembro del Consejo de Expertos electorales de Transparencia Electoral, opinó que las próximas elecciones no serán muy diferentes a las de los años anteriores.
“Lo que ha cambiado un poco en relación a los últimos años son unas nuevas garantías del punto de vista técnico, para el sistema automatizado de votación, que para algunos ciudadanos pueden ser insuficientes. La clave de esta elección no es cuántas gobernaciones o cuántas alcaldías pueda obtener una fuerza política. Las elecciones convocadas por gobiernos autoritarios tienen otro tipo de enfoque y en este caso es tratar que la oposición recupere lo que ha perdido en los últimos tres o cuatro años. Recuperar la conexión con los ciudadanos y recuperar estructuras político-partidistas”, comentó Martínez.
Hay una certeza después del #21N: Maduro seguirá siendo ilegítimo, desconocido y además investigado por la CPI. Ya él y su régimen saben las consecuencias de burlar las reglas democráticas
Estamos en dictadura, debemos salir de ella y el llamado es a luchar unidos hasta lograrlo pic.twitter.com/tOSow6aMFt
— Juan Guaidó (@jguaido) November 19, 2021
En esta oportunidad la oposición acude atomizada en varios bloques que se enfrentan entre ellos, además en el marco de una diatriba aún no resuelta sobre si votar vale la pena o no.
Según Luis Florido, no es verdad la llamada división de la oposición ya que la gran mayoría de los opositores están en la Mesa de la Unidad Democrática. Por su parte, el exalcalde de Caracas y vocero nacional del movimiento REDES, Juan Barreto, quien también fue vocero de Hugo Chávez, se refirió a una indudable división de la oposición que, según él, les costará algunos votos.
“La oposición se ha dado desde trompadas hasta descalificaciones, maniobras y zancadillas. Es un triste espectáculo el que está dando la oposición y el Gobierno va a terminar cobrando favorablemente todas estas incoherencias. Paradójicamente, un Gobierno que no tiene más del 20 por ciento de apoyo en los sectores populares va a terminar ganando, porque con una abstención de entre el 45 y 60 por ciento, un 20 por ciento se multiplica en la misma medida que baja el caudal electoral”, estimó Barreto.
Las principales encuestadoras vaticinan un triunfo del oficialismo en más del 75 por ciento de los casi tres mil cargos en disputa, con una reducida participación de entre un 45 y 50 por ciento de electores en promedio nacional. Las campañas electorales de todos los sectores han consistido principalmente en ofrecer que habrá agua por el grifo.