El Ichmujeres enfatizó que la muerte de Yessica Silva no se trató de un accidente porque la Guardia Nacional intervino durante la protesta de agricultores que se realizó e inicios de mes.
Ciudad de México, 19 de septiembre (SinEmbargo/AP).– El Instituto Chihuahuense de las Mujeres (Ichmujeres) rechazó que la muerte de Yessica Silva se tratara de “desgraciado y lamentable accidente”, como aseguró ayer Luis Rodríguez Bucio, Comandante de la Guardia Nacional, al hablar sobre las protestas en la presa La Boquilla.
“Manifestamos nuestro desacuerdo con estas expresiones, pues no puede tratarse de un accidente cuando, en el contexto de un conflicto social, interviene la Guardia Nacional y el resultado es una persona fallecida y otra gravemente lesionada”, expuso el instituto en un comunicado.
Manifestantes se enfrentaron con miembros de la Guardia Nacional el 8 de julio y tomaron posesión de una presa que ha sido usada para liberar agua para cubrir una deuda con Estados Unidos, como parte de un tratado de 1944. Muchos agricultores del estado de Chihuahua, en el norte de México, aseguran que necesitan el agua para sus cultivos.
Yessica Silva participó con su esposo en la toma de la presa La Boquilla, en el municipio de San Francisco de Conchos.
Rodríguez Bucio dijo ayer, durante la conferencia matutina del Presidente Andrés Manuel López Obrador, que la muerte de la mujer fue un “lamentable accidente”.
El Ichmujeres condenó la muerte de Yessica Silva y exigió a las autoridades realizar una investigación objetiva para que la víctima y sus familiares tengan justicia.
Rodríguez Bucio, dijo ayer que después de que sus elementos se retiraron de la presa, algunos manifestantes tomaron materiales de grado militar que quedaron en el lugar, entre ellos “granadas”, posiblemente refiriéndose a los proyectiles de gases lacrimógenos o de humo que se utilizaron para dispersar a los inconformes.
Comentó que después de la retirada, tres sospechosos se acercaron a un destacamento de la Guardia Nacional y los amenazaron con arrojarles granadas. Los guardias detuvieron a los sospechosos, los subieron a vehículos de la unidad y se disponían a trasladarlos a una ciudad cercana para entregarlos a fiscales civiles.
En ese momento, detalló el comandante, vehículos conducidos por manifestantes interceptaron al convoy de la Guardia Nacional en el que se trasladaba a los sospechosos.
Los agentes escucharon disparos —no quedó claro de dónde provenían— y uno de los elementos de seguridad abrió fuego, impactando una camioneta en la que viajaban la mujer y su acompañante, que resultó gravemente herido.
Rodríguez Bucio dijo que los agentes pensaron que los manifestantes interceptaban el convoy e intentaban liberar a los sospechosos. Miembros de la fiscalía e investigadores militares abrieron una pesquisa de los hechos.
A México le queda poco tiempo para cubrir su deuda de agua antes del plazo del 24 de octubre. Los manifestantes tomaron el control de la presa de Chihuahua para evitar que se transfiera agua a agricultores y localidades ubicadas a lo largo del fronterizo río Bravo (conocido como río Grande en Estados Unidos).
De acuerdo con el tratado, Estados Unidos abastece cuatro veces más agua a México desde el río Colorado, ubicado más al oeste, por lo que a México le preocupa la posibilidad de perder ese suministro.
–Con información de AP.