La filmografía de Snyder está repleta de referencias tanto mitológicas como bíblicas, incluyendo representaciones religiosas en el Universo DC -construido a partir de la creencia en falsos dioses representada en Superman- que han influido en la estética de la foto.
Madrid, 19 de marzo (Europa Press).- El Joker de Jared Leto está de vuelta en Liga de la Justicia de Zack Snyder. Pero ya no es el desequilibrado psicópata con maneras de gánster que se presentó en Escuadrón Suicida. Ahora el payaso Príncipe del Crimen encarna a una retorcida suerte de Mesías que llega dispuesto a dar una importante lección de vida a Batman en la secuencia Knightmare. ¿A qué se debe este radical cambio en su personalidad?
Vanity Fair publicó un extenso reportaje en el que se desgranan muchas de las novedades de Liga de la Justicia de Zack Snyder. Junto al texto, se revelaron nuevas imágenes de la producción, incluyendo una en la que el Joker posa, literalmente, como el Jesucristo de Caravaggio, ostentando una corona de espinas. Una representativa imagen de su papel en la secuencia Knightmare del filme.
La filmografía de Snyder está repleta de referencias tanto mitológicas como bíblicas, incluyendo representaciones religiosas en el Universo DC -construido a partir de la creencia en falsos dioses representada en Superman- que han influido en la estética de la foto. Pero más allá, la imagen es una declaración del nuevo rol e influencia en la historia que tendrá la némesis de Batman.
Hay que tener en cuenta que la secuencia Knightmare, en la que aparece el Joker, es en realidad una ensoñación del Caballero Oscuro, en la que ve cómo sería el futuro si Darkseid saliese victorioso. Al igual que se representa a Superman como una mera marioneta del villano, Batman hace una representación mental de su némesis. Y es aquí donde entra el complejo mesiánico del Payaso.
BATMAN NECESITA AL JOKER
Tal y como dijo la versión del villano de Heath Ledger en aquella icónica escena de El Caballero Oscuro: “Tú me completas”. El Joker no podría existir sin Batman, del mismo modo el Batman no podría existir sin Joker. Son dos caras de la misma moneda, y como toda la secuencia Knightmare ocurre en la mente de Bruce Wayne, su némesis se representa como una suerte de salvador.
Esto explica la nueva apariencia y carácter del Joker, ya que en la secuencia Knightmare, Batman recurre a él como última persona a la que pediría consejo, pero a su vez el único que puede dejarle las cosas claras.
Un “mantén cerca a tus amigos, pero más a tus enemigos”, con el que Snyder pretende indagar en la psique del Caballero Oscuro, regalando de paso a los fans (y al propio Jared Leto) la versión del Joker que siempre merecieron.
EL NIHILISMO DEL JOKER Y EL RENACIMIENTO DE JARED LETO
Por otro lado, las teorías apuntan a que, de alguna forma -dentro de la lógica interna de la secuencia Knightmare- el Joker es inmune a la ecuación anti-vida de Darkseid, que hace que los individuos se replanteen el libre albedrío como algo absurdo, quedando a merced de la voluntad del villano.
La inmunidad del Joker a su poder se explica porque siempre ha sido un representante puro del caos. Un nihilista radical que se ha abandonado tanto a la aleatoriedad que ha olvidado la idea de libre albedrío hasta el punto de no llegar a reformulársela. Esto daría sentido a por qué Batman recurre a él en su sueño, ya que puede ser la clave para derrotar a Darkseid, o al menos un valioso aliado.
Por último -y sin abandonar el simbolismo profundo de la imagen promocional de Leto como la corona de espinas- no hay que olvidar que su incorporación al Snyder’s Cut es un renacimiento del vilipendiado Joker del actor en Escuadrón Suicida. Una última oportunidad de reconectar con los fans y evitar que su versión del payaso Príncipe del Crimen sea considerada por muchos la peor de la historia.
Liga de la Justicia de Zack Snyder se estrena en HBO el 18 de marzo.