En el marco del Sistema Nacional Contra el Hambre, los Comedores Comunitarios fueron una de las principales medidas que llevarían a la administración de Enrique Peña Nieto, acabar con la pobreza alimentaria que padecen 27.4 millones de mexicanos. Pero como sucedió con el programa Prospera y con la Cruzada Nacional contra el Hambre, los resultados se ven lejanos al objetivo. Por su desarrollo e implementación en 2015, este programa se hizo acreedor a siete sanciones administrativas de parte de la ASF, esto por información tergiversada y por un daño a la hacienda pública federal por poco más de 65 millones de pesos.
Ciudad de México, 19 de febrero (SinEmbargo).– La Auditoría Superior de la Federación (ASF) detectó varias faltas en el programa federal de Comedores Comunitarios durante el año fiscal de 2015. Por fallas en los reglamentos, ausencia de información sobre los montos otorgados a cada comedor, inconsistencias en la operación, instalaciones peligrosas y un desfalco por 66 millones 157 mil 062 pesos, la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) enfrentará siete sanciones administrativas por un monto de 33 millones 062 mil pesos.
Esa cantidad que la ASF prevé recuperar es apenas el 1.04 por ciento del presupuesto total que el programa recibió en 2015, que fue de 3 mil 155 millones 740 mil pesos a pesar de que hubo comedores que registraron atender a cero personas o de una a 11.
Lejos están los días en que el actual gobierno, que arrastra en el último año los niveles más bajos de popularidad, presentó en las comunidades pobres su política social contra la pobreza. Dos años después se supo que la pobreza había sumado 2 millones de personas para tener un país con 55.3 millones en esa condición.
Ante la alerta de una nueva ola de pobreza, las organizaciones civiles que trabajan en materia han insistido en que urge una revisión de la gama de programas sociales del Gobierno federal. La ASF hizo la revisión de Comedores Comunitarios 2015 y el resultado son siete sanciones administrativas para Sedesol.
El 22 de enero de 2013, se publicó en el Diario Oficial de la Federación (DOF) el Decreto por el que se establece el Sistema Nacional para la Cruzada contra el Hambre, y como parte de esta estrategia, por conducto de la Secretaría de Desarrollo Social, se instrumentó el Programa Comedores Comunitarios para mejorar las condiciones de acceso a la alimentación de la población ubicada en Zonas de Atención Prioritaria Rurales y Urbanas.
El programa gira en proporcionar el equipamiento de cocinas por única vez hasta por un monto de 150 mil de pesos y brindar mensualmente los productos alimenticios no perecederos hasta por un monto de 61 mil pesos, lo que incluye la adquisición, suministro, almacenamiento y distribución hasta la localidad donde se ubique el comedor.
Los comedores iniciaron operaciones en el ejercicio 2013 con motivo de la instrumentación de la estrategia de la Cruzada Nacional contra el Hambre, y tiene incidencia en 14 mil 517 municipios urbanos y 10 mil 295 municipios rurales y siempre ha sido responsabilidad de la Sedesol.
ADEMÁS
LA LISTA DE FALLAS
Primero fueron los gastos de operación. De acuerdo con lo reportado a la Auditoría, los gastos de operación para el programa fueron de 207 millones 941.5 mil pesos de pesos, que representaron el 6.6 por ciento del presupuesto total asignado al programa, cuando la proyección para ese rubro era de cero por ciento, según lo autorizado para gastos de operación establecido en los lineamientos específicos del programa.
El desfalco se dio por 529 casos que corresponden a 163 comedores por un monto de 32 millones 269.0 mil pesos y 33 millones 062 mil pesos, ya que no se localizó el formato “Abasto de Comedores Comunitarios”.
“Se presume un probable daño o perjuicio, o ambos, a la Hacienda Pública Federal por un monto de 33 millones 062 mil pesos por la falta de 529 formatos “Abasto de Comedores Comunitarios” correspondientes a 163 comedores ubicados en la Ciudad de México y en el Estado de México por 32 millones 269 mil pesos, y de 13 casos, correspondientes a 11 comedores por 793 mil pesos que no contaron con la firma de autorización mensual del responsable del comedor; además incluyen 201 casos que no contaron con el formato “Kardex, entradas y salidas” y 223 casos que carecen del formato “Listas de Asistencia””, dice el informe.
La ASF instó al Órgano Interno de Control en la Secretaría de Desarrollo Social para que realice las investigaciones pertinentes y, en su caso, inicie el procedimiento administrativo correspondiente por los actos u omisiones de los servidores públicos que en su gestión no verificaron que los expedientes técnicos de los Comedores Comunitarios.
Durante el año evaluado, en 2015 existieron 4 mil 916 comedores comunitarios en operación, los cuales tuvieron incidencia en la población de 429 municipios o delegaciones de 16 estados. Cada comunidad beneficiada contó con un Comité Comunitario, una Mesa Directiva, un secretario, un tesorero, vocales de comisiones de trabajo, y un vocal de control y vigilancia, los cuales fueron seleccionados mediante Asamblea General.
Sin embargo, 36 comedores se registraron como “en construcción”, “en proceso”, “inactivo”, “no está en operación” y “por aperturar”, pese a que registraron operaciones; 49 carecieron de la fecha de inicio de operación no obstante que en 12 se registraron personas atendidas y en 304 comedores se encontraron inconsistencias como no tener datos del encargado de supervisar las operaciones, información de la institución pública, académica u organización de la sociedad civil que realizó la capacitación de la vocalía de alimentación y del grupo de voluntarios de preparación de alimentos, en 219 se registró la cantidad de “0”, y 14 brindaron atención de una a 11 personas.
Sedesol argumentó que esa información fue ocasionada por errores en la base de datos: “ya que durante la captura que realizan las coordinaciones estatales, omitieron registrar la fecha de inicio de operación, los nombres de los promotores y de las instancias de capacitación, así como las Áreas Geoestadísticas”.
Pero las inconsistencias continuaron. En 44 comedores se observó que la clave registrada no correspondió con la localidad en la que fueron instalados los Comedores Comunitarios, en 149 comedores no se constató que, en 50 casos, la localidad, municipio y entidad federativa señaladas en la Base Registral no correspondieron a las Zonas de Atención Prioritaria Urbana, y en el caso de 99 comedores, éstos se instalaron en localidades distintas a las registradas, sin que se proporcionara evidencia de su cancelación o reubicación.
Tampoco se pudo constatar el monto del apoyo otorgado a cada Comedor Comunitario por equipamiento y por el abasto mensual, ya que no hay información al respecto. Con la revisión de la documentación referente al equipamiento, suministro, abasto, almacenamiento y distribución de alimentos para los Comedores Comunitarios, se detectó una diferencia 142 millones 876.1 mil pesos derivada de 30 Cuentas por Liquidar Certificadas que no fueron proporcionadas.
Finalmente, de una muestra representativa de 22 Comedores Comunitarios ubicados en la Ciudad de México y en el Estado de México, la ASF verificó que en cinco comedores, los cilindros de gas no se encontraban en uso, en 13 comedores, el purificador de agua no funcionaba y en seis comedores, los cilindros de gas se encontraban instalados dentro de las instalaciones del comedor, lo cual no asegura las medidas mínimas de seguridad.
En el 72.7 por ciento de los comedores visitados, los alimentos diarios se preparan con base en menús diseñados por la propia Comisión de Alimentación, los cuales no se encuentran autorizados por la Sedesol, lo que no asegura que las raciones diarias cuenten con las necesidades nutrimentales básicas y contemplen lo establecido en la Norma Oficial Mexicana.