En esta entrega de RADICALES, Álvaro Delgado, Fabrizio Mejía y Héctor Alejandro Quintanar hablaron sobre cómo los gobiernos de México permitieron durante años que Estados Unidos se inmiscuyera en las cuestiones internas del país mediante la aceptación de un injerencismo que, incluso, rayó en la subordinación.
Ciudad de México, 18 de noviembre (SinEmbargo).– La derecha mexicana ha permitido durante la años el injerencismo de Estados Unidos, incluso expresidentes han servido como agentes de la CIA, por lo cual no ha resultado algo inédito que hayan cerrado filas con el Embajador Ken Salazar en su ataque al expresidente Andrés Manuel López Obrador y sus políticas de Gobierno a las cuales ha dado seguimiento el Gobierno de Claudia Sheinbam Pardo, plantearon Álvaro Delgado, Fabrizio Mejía y Héctor Alejandro Quintanar.
“Las declaraciones de Ken Salazar entrometiéndose en política interna de México como embajador han revelado una vez más el injerencismo de los Estados Unidos en política interior de México”, expuso el escritor y periodista Fabrizio Mejía Madrid en este programa de RADICALES, el cual se transmite en el Estudio B de SinEmbargo Al Aire. “Estas declaraciones son arteras, son mezquinas porque dice algo de López obrador, cuando ya López Obrador no se puede defender, diciendo que fracasó su estrategia de abrazos no balazos, diciendo que rechazó 32 millones de dólares, para quién sabe qué, que no especifica a cambio de qué, que tampoco específica”.
El académico Héctor Alejandro Quintanar comentó a su vez cómo algo constante en la historia del Siglo XX y del XXI es la injerencia de Estados Unidos en el mundo, en la cual México había una relación excepcional en el mundo sobre todo porque México logró tener una línea independiente en su política exterior respecto a Washington.
“Mientras había asonadas y golpes y mucha inestabilidad en el resto de América Latina, México era la excepción de la regla porque tenía un control y una sucesión presidencial estable, una sucesión presidencial predecible que no era producto de la democracia desde luego, era producto del dedazo autoritario y de la simulación de elecciones, pero Estados Unidos siempre vio como deseable eso porque esa estabilidad les parecía preferible a lo que pasaba en el resto de de la región”, indicó.
No obstante, refirió Quintanar, esa situación cambió en el año 2000 cuando el Partido Acción Nacional (PAN) llegó al poder de la mano de Vicente Fox Quesada.
“Vicente Fox fue un tapete de (George) Bush. (Enrique) Peña Nieto y (Felipe) Calderón siguieron una línea parecida que fue de absoluta subordinación voluntaria y en la intención de Fox era sumarse por completo a la doctrina de Bush que fue fundamentalmente para tratar de construir el ALCA, un acuerdo regional económico liberal donde Estados Unidos llevará la vanguardia y Vicente Fox se sumó como un vocero arrastrado de esa visión y no le sirvió de nada”, puntualizó.
Héctor Alejandro Quintanar señaló que ahora con Claudia Sheinbaum, y antes con López Obrador, el gobierno de México entendió bien que una posición de su misión no le iba a generar ningún dividendo. “Entonces, pues hay que saber qué cartas jugar, qué cartas negociar porque de ese modo se puede lograr cierta distancia sana y también cierta cercanía sana en las cosas que se requieran con los Estados Unidos”.
El periodista Álvaro Delgado comentó a su vez cómo el discurso de Ken Salazar, y en general el de Estados Unidos, ha encontrado eco en México gracias a “esos compinches locales que se sienten muy a gusto con el tutelaje del Imperio”.
“Los compinches del gobierno de Estados Unidos en México abundan. No es solamente Marko Cortés (el dirigente del PAN) que qué bueno que implore la intervención militar de Estados Unidos en México porque eso es lo que está haciendo cuando habla de que hay que coordinarnos. Está pidiendo una reclasificación de los grupos criminales, a los que naturalmente hay que combatir, pero para que se conviertan en terroristas y pueda darse lugar a la invasión militar de Estados Unidos en México”.
Álvaro Delgado consideró que en estos personajes de derecha que piden la ayuda de EU “hay una vocación de subordinación, hay una vocación por el vasallaje, hay una vocación por sentirse otros peones colonizados y esto no es nuevo. Eso está en la historia y diría yo, esos han sido los más recientes gobiernos”.
“No es solamente Peña a quien Trump zarandeo con pena ajena […] el propio Felipe Calderón también se puso de tapete con Estados Unidos claro, él a su favor dirá ‘yo logré que se expulsara a un embajador de Estados Unidos en México, a Carlos Pascual’, sí pero los gringos también, como decía Díaz Ordaz, los gringos están conscientes de que les puedes mentar la madre y no pasa nada, si un Presidente de México le mienta la madre de Estados Unidos ellos lo dan por descontado, está en el presupuesto”.
Delgado habló de una diferencia fundamental entre los gobiernos de Peña, Calderón, Fox, Zedillo, Salinas y de todos aquellos presidentes que eran agentes literalmente de la CIA con los gobiernos de Claudia Sheinbaum y de López Obrador.
“Cuando hablo de que sí hay una diferencia fundamental entre lo que ha sido el gobierno de López Obrador y ahora el de Claudia Sheinbaum con los antecesores tiene que ver con un dato de cómo operaban y operan los agentes de las diferentes agencias del gobierno de Estados Unidos en territorio mexicano. Se les puso un alto inclusive en términos de ley y eso sí marca un antes y un después y en buena medida explica esta última conferencia de prensa. Yo creo que será la última vez tan visceral, tan anti diplomática, tan insolente de un Embajador que se exhibe frustrado, impotente e inútil, tanto que no encuentra respaldo en el Departamento de Estado de Estados Unidos”, ahondó.
Quintanar apuntó por su parte que miembros del PAN como Lilly Tellez o Marko Cortés reclaman la tipificación del narcoterrorismo en el fondo lo que parece decir es aceptemos que Estados Unidos intervenga en México bajo la premisa de que seguramente ellos sí saben cómo combatir a los criminales al narcotráfico. “Hay que mirar a Estados Unidos y observar que el problema de adicción que tienen es tremendo”.