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EU condiciona a Maduro

Biden quita sanción a sector petrolero venezolano a cambio de elección libre en 2024

18/10/2023 - 6:11 pm

El Departamento del Tesoro emitió cuatro licencias que permiten transacciones en el sector petrolero, gas y del oro en Venezuela; sin embargo, cada una de ellas están sujetas a ser modificadas o revocadas “en cualquier momento” si el Presidente Nicolás Maduro no cumple con los compromisos de acuerdo con el pacto firmado en Barbados.

Madrid/Berlín, 18 de octubre (EuropaPress/DW).- El Gobierno de Estados Unidos ha levantado temporalmente algunas de las sanciones impuestas al sector petrolero de Venezuela, un día después del acuerdo entre el Gobierno y la plataforma opositora del país latinoamericano para garantizar la celebración de las elecciones presidenciales en 2024.

El Departamento del Tesoro estadounidense ha informado a través de un comunicado publicado en su página web de la emisión de cuatro licencias, que está “dispuesto a modificar o revocar” en “cualquier momento” en el caso de que el Presidente venezolano, Nicolás Maduro, “no cumpla con sus compromisos.

“Estados Unidos da la bienvenida a la firma de un acuerdo de hoja de ruta electoral entre la Plataforma Unitaria y representantes de Maduro. De acuerdo con la política de sanciones estadounidense, en respuesta a estos acontecimientos democráticos, el Tesoro ha emitido licencias que autorizan transacciones que involucran al sector del petróleo y gas y al sector del oro de Venezuela”, ha explicado el subsecretario del Tesoro para Terrorismo e Inteligencia Financiera, Brian Nelson.

Así, ha precisado que uno de los permisos autoriza durante seis meses las transacciones con el sector petrolífero y gasístico. “La licencia se renovará solamente si Venezuela cumple con sus compromisos”, ha subrayado el Departamento.

El Presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, habla en la Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños. Foto: Oficina de Prensa de Miraflores vía AP.

La segunda autorización permite las transacciones con Minerven, empresa de oro estatal venezolana, con el objetivo de “reducir el comercio de oro en el mercado negro”. Asimismo, ha dado permiso ha la negociaciones secundaria de ciertos bonos de deuda y capital de la compañía petrolera estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA).

En la víspera, el Gobierno venezolano y la plataforma que aglutina a los principales partidos de la oposición firmaron acuerdos que establecen derechos políticos y garantías electorales, así como el levantamiento de las sanciones y el respeto a la soberanía de Venezuela.

Los comicios se llevarán a cabo en el segundo semestre de 2024 tras la selección por parte de cada actor político de sus candidatos, “de manera libre y conforme a sus mecanismos internos”. Las elecciones presidenciales contarán además con la presencia de observadores electorales internacionales.

Maduro, que publicó el acuerdo conjunto, señaló que este texto “ratifica el fortalecimiento de una democracia inclusiva y de convivencia política que defenderá los Derechos Humanos” sujetos en la Constitución de Venezuela.

El Ejecutivo venezolano indicó que a lo largo de 2023 “llevó a cabo negociaciones con representantes del Gobierno de Estados Unidos” y con la oposición con el fin de “sanar las heridas sociales causadas por la ilegítima agresión económica”, en referencia a las sanciones “criminales” que han “castigado colectivamente a la población venezolana sin distinción” y “solicitadas por esta misma oposición”.

Esto se produce después de que el Ministerio de Exteriores de Noruega confirmara en un breve comunicado la reanudación de las conversaciones entre las partes tras las últimas reuniones celebradas en México, si bien en aquel momento los contactos no produjeron avances prácticos.

En abril de este año, durante la visita del Presidente de Colombia Gustavo Petro a los Estados Unidos, éste le planteó a su homólogo Joe Biden una estrategia que consistía en levantar progresivamente las sanciones a Venezuela a medida que haya avances en materia electoral en ese país.

“Quedó planteado sobre la mesa una estrategia que es hacer primero elecciones y luego levantar sanciones. O paulatinamente, en la medida en que se vaya cumpliendo una agenda electoral, que se vayan levantando también esas sanciones”, dijo Petro en declaraciones a la prensa en la Casa Blanca.

El Gobierno y la oposición de Venezuela reanudaron su diálogo, mediado por Noruega, con conversaciones programadas para el martes 17 de octubre de 2023 en Barbados, dijo la embajada de Noruega en México el 16 de octubre de 2023 en un breve comunicado. Foto: Marco Ugarte, AP.

El líder colombiano compareció brevemente ante los periodistas después de su reunión en el Despacho Oval de la Casa Blanca con el mandatario estadounidense.

Para Petro fue importante no irse con las manos vacías antes de la conferencia internacional que Bogotá acogió el 25 de abril sobre el estancado diálogo político en Venezuela. Estados Unidos fue uno de los participantes en la conferencia. Maduro no asistió, aunque le dio el visto bueno, y la oposición tampoco, pero se reunió días antes con Petro.

¿VENEZUELA RUMBO A ELECCIONES DEMOCRÁTICAS EN 2024?

El día de ayer, la isla caribeña de Barbados fue testigo de un nuevo capítulo en el proceso de diálogo entre el Gobierno venezolano de Nicolás Maduro y la oposición política, reunida en la Plataforma Unitaria.

Mediante la firma de un acuerdo, las partes negociadoras se comprometieron a celebrar elecciones presidenciales en el segundo semestre de 2024 con la participación de observadores internacionales, por ejemplo, de la Unión Europea, la ONU y la Unión Interamericana de Organismos Electorales.

“Este acuerdo es muy importante para allanar el camino hacia unas elecciones presidenciales más justas, más competitivas y que le permitan a la oposición participar con más garantías que en las elecciones de 2017, 2018 y 2021”, asegura la periodista venezolana Celina Carquez, especializada en la cobertura de procesos electorales.

“Sin duda es algo muy positivo para el país”, prosigue, “porque este acuerdo tomó dos años en firmarse, fue hecho con filigrana, y es importante porque abre una ventana”.

Por su parte, Laura Dib, directora para Venezuela de la Oficina en Washington para Asuntos Latinoamericanos (WOLA), resalta que se trata de un acuerdo parcial y que aún falta mucho por hacer. Pero insiste en “reconocer el valor de este momento y su potencial para seguir construyendo una solución pacífica y democrática a la situación que enfrenta Venezuela”.

Algunos de los aspectos clave a los que se comprometieron las delegaciones dialogantes son la publicación del cronograma electoral, la auditoría del sistema electoral, la invitación de misiones técnicas de observación electoral, la promoción de un balance en los medios de comunicación y el reconocimiento de los resultados electorales, explica Dib a DW.

Las negociaciones continuarán: “El punto de honor para el Gobierno es el levantamiento de las sanciones; para la oposición, la suspensión de las inhabilitaciones y la liberación de los presos políticos”, señala Celina Carquez, coordinadora editorial de la plataforma Crónica Uno.

No obstante, desde Barbados, el jefe de la delegación gubernamental, Jorge Rodríguez, dejó claro que se mantendrán las inhabilitaciones de políticos, como María Corina Machado, la favorita a ganar las primarias de la oposición, que se celebrarán este 22 de octubre.

Pese a las declaraciones de Rodríguez, Carquez cree que el Gobierno va a hacer concesiones en la medida en la que se levanten las sanciones al Estado, sobre todo las sanciones petroleras y también las sanciones personales contra algunos funcionarios.

“Hay que destacar que el Gobierno y la oposición siempre han estado negociando, pero para lograr un acuerdo se tienen que mantener en reserva, son decisiones que no se pueden llevar directamente ante la opinión pública, porque, si no, los radicales de ambos lados entorpecen esas negociaciones”, dice en entrevista con DW.

 

En opinión de Laura Dib, en el corto plazo, la publicación del calendario electoral, la invitación de las misiones independientes de observación y la actualización del registro electoral dentro y fuera del país serían avances positivos para 2024.

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