En medio de la turbulencia por la corrupción que investiga la PGR en el caso de la transnacional Odebrecht, del robo de combustibles en gran parte del territorio nacional y la caída estrepitosa de la plataforma de producción de petróleo, el director general de Pemex, José Antonio González Anaya, compareció ante diputados federales como parte de la glosa del Quinto Informe de Gobierno del Presidente Enrique Peña Nieto.
Diputados de los partidos de oposición le cuestionaron sobre estos temas, especialmente del caso Odebrecht que se siguen contra su predecesor, Emilio Lozoya Austin, a quien ex directivos de la empresa brasileña acusan de haber recibido 10 millones de dólares en sobornos a cambio de su apoyo para obtener contratos de obra pública.
González Anaya dijo que Pemex ha colaborado en las investigaciones del caso, pero desde el ámbito de su competencia porque, dijo, “nosotros no somos Procurador de Justicia”.
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Ciudad de México, 18 de octubre (SinEmbargo).- El director de Petróleos Mexicanos (Pemex), José Antonio González Anaya, evadió las preguntas de legisladores que le cuestionaron sobre las investigaciones del caso Odebrecht que se siguen contra su predecesor, Emilio Lozoya Austin, a quien ex directivos de la empresa brasileña acusan de haber recibido 10 millones de dólares en sobornos a cambio de su apoyo para obtener contratos de obra pública.
Durante su comparecencia ante diputados federales como parte de la glosa del Quinto Informe de Gobierno del Presidente Enrique Peña Nieto, el primero que le cuestionó sobre el tema fue el Diputado de Movimiento Ciudadano (MC), Macedonio Tamez.
El director de la Empresa Productiva del Estado respondió, sin mencionar el nombre de Lozoya: “Hemos cooperado en todo sentido y estamos haciendo lo que tengamos que hacer, como cooperar con la Secretaría de la Función Pública a través del Órgano Interno de Control, con quien tenemos contacto continuo, y ha dado lugar a inhabilitaciones y cancelaciones de contratos para corregir esto, y también con la Procuraduría General de la República”.
No aclaró quiénes han sido inhabilitados ni qué contratos se han cancelado o si éstos tienen que ver con algunas de las filiales de Odebrecht, como Braskem –ubicada en Veracruz–, que tiene un contrato por 20 años con Pemex para recibir etileno.
La Diputada de Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Rocío Nahle García, insistió en el tema de Odebrecht y le pidió que diera nombres de los funcionarios inhabilitados por el caso.
“Sobre el tema de Odebrecht, nosotros no somos Procurador de Justicia, sin embargo, Pemex ha tenido una participación enérgica. Desde el primer momento tuvimos contacto con la Procuraduría General de la República (PGR).
“Aunque no teníamos porque hacerlo, publicamos los cuatro contratos que tenemos con la empresa. Estamos trabajando en el ámbito de nuestras competencias”, dijo González Anaya.
También reconoció que en administraciones pasadas el 80 por ciento de los contratos se otorgaban de manera directa afectando con ello las finanzas de la empresa al no obtener los precios más competitivos del mercado.
“Esta es una práctica que se ha venido corrigiendo con el objetivo de generar ahorros y hacer eficiente a la empresa”, indicó.
Este miércoles, el diario Reforma publicó una entrevista con el titular de la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales (Fepade), Santiago Nieto Castillo, donde reveló que el ex titular de Pemex, Emilio Lozoya, lo presionó para que declarara públicamente su inocencia por presuntos desvíos de Odebrecht al Partido Revolucionario Institucional (PRI).
De acuerdo con el titular de la Fepade, Lozoya le envió una carta para evitar que se le inculpara en el desvío de recursos para el PRI durante la campaña presidencial de 2012.
La dependencia abrió en agosto pasado la carpeta de investigación para investigar si una parte de los 10 millones de dólares que habría recibido Lozoya en sobornos por parte de la brasileña Odebrecht fue destinada a financiar al tricolor.
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El diario brasileño O’Globo reveló el 13 de agosto que el director de Odebrecht en México, Luis Alberto de Meneses Weyll, declaró que “los pagos comenzaron en marzo de 2012, cuando Lozoya era uno de los principales integrantes del comité de campaña del actual Presidente Enrique Peña Nieto”.
“Los primeros pagos de propina se producirían en el comienzo y el 2012, cuando el entonces candidato Peña Nieto lideraba las encuestas, el PRI se acercaba a una probable victoria y Lazoya era cotizado para asumir un cargo de relevancia en el futuro gobierno. Según Weyll, el primer pago para Lozoya, 4 millones de dólares, fue una manera de señalar que, si el PRI vencía la elección, la asociación corrupta podría rendirle aún más”, destacó el medio brasileño.
O’Globo detalló también que Weyll dijo a los fiscales brasileños, en un testimonio del 16 de diciembre del año pasado en la Fiscalía de la República en Guarulhos:
“A principios de 2012, constaté que Emilio Lozoya había alcanzado una posición destacada en el PRI, que disputaba las elecciones presidenciales de julio de 2012, cuyo candidato [Peña] era el favorito en las encuestas electorales. Lozoya se había convertido en uno de los líderes del comité de campaña, por lo que probablemente se convertiría en una persona influyente en la administración pública del país”.
El pasado 11 de octubre, Emilio Lozoya solicitó un amparo contra la investigación iniciada por la Fepade.
ROBO DE COMBUSTIBLE Y CAÍDA EN PRODUCCIÓN
Sobre el robo de combustible, el director de Pemex aceptó que los logros han sido “incipientes”.
Sin embargo, no aclaró de qué manera el área de seguridad ha atacado la sustracción ilegal de combustible en el llamado Triángulo Rojo –un conjunto de municipios localizados en Puebla, entre ellos Quecholac, Acatzingo y Acajete–, sin embargo, aseguró que los “resultados han sido incipientes, pero favorables”. Tampoco aclaró a cuánto ascienden las pérdidas mensuales.
En su primera intervención, González Anaya sostuvo que las finanzas de la empresa productiva del Estado “son estables, mejorables, pero estables”.