En la misma línea de austeridad, la Cámara de los Diputados informó el 11 de septiembre que los diputados se reducirán en un 28 por ciento su remuneración mensual por lo que resta del 2018.
Ciudad de México, 18 septiembre (EFE).– El Senado de México aprobó hoy un severo plan de austeridad que reduce numerosas prestaciones de los legisladores y que se enmarca dentro de la política de austeridad que quiere impulsar el Presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, y su Movimiento Regeneración Nacional (Morena).
La Cámara alta aprobó en pleno reducir un 50 por ciento el gasto en asignaciones a grupos parlamentarios, un 30 por ciento en asesores técnicos para senadores y un 30 por ciento en comunicación y propaganda oficial.
Asimismo, se eliminarán los vales de despensa para alimentos, el seguro de gastos médicos mayores, el servicio de peluquería para legisladores, las tarjetas de gasolina y la aportación a teléfonos celulares.
También se aprobó reducir los viajes internacionales y el alquiler de estacionamientos para vehículos durante el actual período de sesiones, que comenzó el 1 de septiembre y finalizará en diciembre.
La semana pasada, Morena, grupo mayoritario de la Cámara, impulsó la supresión de la barra de frutas y bebidas para los senadores durante las sesiones de la Cámara.
Ante las quejas de los otros grupos parlamentarios, el presidente de la mesa del Senado, Martí Batres, de Morena, colgó en redes sociales un vídeo en el que aparecía en su despacho comiendo en un tupper que preparó en casa y animando al resto de senadores a hacer lo mismo.
En la misma línea de austeridad, la Cámara de los Diputados informó el 11 de septiembre que los diputados se reducirán en un 28 por ciento su remuneración mensual por lo que resta del 2018.
López Obrador, quien asumirá la Presidencia el 1 de diciembre, tiene previsto aplicar un ambicioso plan de austeridad, que busca acabar con la corrupción y los privilegios para favorecer programas sociales a través de 50 puntos.
El líder izquierdista, que arrasó en los comicios del 1 de julio con el 53 por ciento de los votos, prevé recuperar al menos 500 mil millones de pesos (unos 26.427 millones de dólares), que destinará al "desarrollo" del país.
Entre sus medidas estrella está la reducción de su salario como Presidente, que quedará en 108.000 pesos mensuales (unos 5.700 dólares), el 40 por ciento de lo que gana el actual mandatario, Enrique Peña Nieto.