“Existen enormes diferencias en materia de propiedad intelectual, acceso a los mercados agrícolas, niveles de minimis, energía, trabajo, normas de origen, indicaciones geográficas y mucho más”, explicó el representante de Comercio Exterior de Estados Unidos, Robert Lighthizer
Washington, 17 mayo (EFE).- El Gobierno de Donald Trump alertó hoy que el acuerdo de renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) con México y Canadá “no está para nada cerca”, aunque el proceso ya está en su recta final.
“Los países del TLCAN no están para nada cerca a cerrar un acuerdo”, dijo en un comunicado el representante de Comercio Exterior de Estados Unidos, Robert Lighthizer.
“Existen enormes diferencias en materia de propiedad intelectual, acceso a los mercados agrícolas, niveles de minimis, energía, trabajo, normas de origen, indicaciones geográficas y mucho más”, explicó Lighthizer.
La posición de Estados Unidos contrasta con la de Canadá, cuyo Primer ministro, Justin Trudeau, dijo este martes que el acuerdo podría alcanzarse “de forma inminente”.
“Estamos muy cerca. Vamos a seguir trabajando en los próximos días, pero sabemos que un acuerdo no se consigue hasta que se cierra”, dijo el líder canadiense.
En su comunicado de hoy, Lighthizer también dijo que EU “seguirá negociando” con México y Canadá para lograr el acuerdo: “Espero con interés trabajar con mis homólogos para lograr el mejor acuerdo posible para los granjeros, ganaderos, trabajadores y empresas estadounidenses”.
El Gobierno de Trump pareció así ajeno al margen marcado por el presidente de la Cámara de Representantes, Paul Ryan, que había puesto el día de hoy como fecha límite para que el legislativo recibiese un texto para someterlo a consideración.
Los funcionarios de los tres países han reconocido que el calendario político, con elecciones presidenciales en México en julio y legislativas en noviembre en EU, agregan presión a las conversaciones.
Estados Unidos, Canadá y México iniciaron en agosto de 2017 la renegociación del TLCAN, acuerdo que entró en vigor en 1994 y que Trump ha tildado de “muy, muy malo” y de “un desastre total y completo” para Washington.