ACAPULCO, Gro. (apro).- Programada para este viernes la asistencia de los cuatro candidatos presidenciales, Felipe Calderón empezó a calentar la 75 Convención Bancaria, que inauguró ayer por la tarde aquí.
“Misión cumplida”: dejamos “una economía con todos los elementos para dar el salto al desarrollo”, aseguró. “Hay mucho qué hacer pero, en honor a la verdad, es mucho lo que se ha hecho”, afirmó.
Dos razones tenía el presidente para desbordarse en el elogio de su obra de gobierno: es la última vez que estará, como presidente, con los banqueros, y había que echarle una manita –en plena veda electoral– a la deslucida campaña de la candidata presidencial de su partido, Josefina Vázquez Mota.
Casi una hora se tomó el presidente para dirigirse a la crema y nata del sistema financiero mexicano, que le tributó largos y emotivos aplausos, varias veces de pie.
Siempre el tono político al abordar temas económicos. Si a su gobierno se le acusa de haber incrementado el gasto corriente, como ahora lo hacen los candidatos Enrique Peña Nieto, del PRI, y Andrés Manuel López Obrador, de la coalición Movimiento Progresista (PRD-PT-MC), Calderón se defendió:
“Sí ha habido una expansión del gasto corriente en el gobierno –expuso–, pero si observan, estamos hablando de más de 80 mil nuevos médicos y enfermeras, que son los que está haciendo la cobertura universal de salud”.
Agregó: “Estamos hablando de la expansión, también, de miles de maestros y estamos hablando de la contratación de miles y miles de policías que se necesitan para la seguridad. Tan sólo en seguridad pública, hemos pasado de 6 mil a 37 mil”.
En su campaña por la Presidencia, el priista Enrique Peña Nieto ha sido insistente en el pobre desempeño económico en los gobiernos panistas.
Hoy, Calderón respondió así:
El impacto social de la reciente crisis económica (de 2009), “fue varias veces menor al sufrido durante la crisis de 1994-1995. Por ejemplo, en 1995 la pérdida del poder adquisitivo a consecuencia de la inflación fue diez veces mayor a la registrada en el 2009:”
También, que en 1995, “la pérdida de empleos formales registrados en el Seguro Social fue de cerca de 10% de la plantilla laboral del país, en tanto que en el 2009 fue de menos de 2% y se recuperó en prácticamente el año subsecuente”.
Sobre el aumento de la pobreza en este gobierno, como han insistido el PRI y su candidato presidencial, Felipe Calderón los refutó:
Con datos de la encuesta de ingresos y gastos de los hogares, del Inegi, el presidente afirmó que entre 1994 y 1995, la pobreza extrema aumentó de 21.2% de la población nacional a 37.4%.
En tanto, agregó, entre 2008 y 2010 la pobreza “tuvo una variación mínima, cuatro décimas de punto porcentual, de 18.4% a 18.8%”.
Festinó también el continuo crecimiento de la economía después de la crisis de 2009: de entonces a la fecha, dijo, la economía ha crecido sin parar durante 12 trimestres consecutivos, es decir tres años de crecimiento continuo.
Y así se fue el presidente con los temas económicos, todas las variables. En todo estamos bien. En inflación, baja y controlada; en déficit público, que es de apenas una tarde de lo que registran los países de la OCDE; en deuda pública, que es de menos de 33% del PIB ahora, mientras que “allá por el año 1986 (Miguel de la Madrid en el gobierno), era de más de 90% del PIB”.
En suma, “la economía mexicana está sólida, está en crecimiento y generando empleo”, dijo el presidente.
Como para que el PRI y Peña Nieto; Andrés Manuel López Obrador y los partidos que lo apoyan no anden diciendo lo contrario.
Inclusive, acusó a esos partidos de haber obstaculizado muchos de los cambios y reformas que su gobierno propuso y que los legisladores de aquéllos frenaron en el Congreso.
“Por eso digo e insisto en que es fundamental que se apruebe la reforma laboral, porque los cambios que México necesita no pueden estar secuestrados por la coyuntura de intereses políticos que siempre van a estar presentes y siempre serán demandantes”, acusó.
Y los presentes –banqueros, autoridades financieras, exfuncionarios, políticos locales, entre otros– le brindaron un fuerte y largo aplauso.
Fue su última asistencia a la convención bancaria, que cada año se realiza en este puerto turístico.
En la próxima, en 2013, asistirá, ya como presidente, alguno de los candidatos que este viernes sustentarán “examen” ante los banqueros.